El gran viaje.

Capítulo 14: Cosas del destino.

Saludos otra vez!

Acá EX-T88 reportándose para traerles el siguiente capítulo de este fanfic que tantos me estaban pidiendo que actualizara XD

De lo cual, vuelvo a repetir que la historia no esta muerta, como las otras veces, les recuerdo que yo actualizo mis historias por turnos, por lo que si de momento ven que no subo otra parte, es porque estoy trabajando en el siguiente capítulo de mis otros fics, aclarando ya, que tampoco voy a dejar abandonados.

Pero bueno, ya habiendo dicho eso, los dejo con la siguiente parte, que también estoy ansioso por incluir nuevos personajes.

Disfruten del cap, nos vemos abajo, y.... ¡¡¡GOZENLA!!! XD

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[P.O.V Arnol]

A medida que los gobernantes iban llegando, más y más actividad iba formándose fuera de las murallas, llevándose los cuerpos de los caídos que poco a poco despejan el mojado suelo por la lluvia.

Eso si, la sangre que estos habían dejado, no daba indicio de que fuera de desaparecer pronto. Solo espero que la lluvia que se mantenía cayendo terminara de hacer el trabajo de hacerla desaparecer.

Girando mi cabeza hacia el interior de la base, mis ojos se posaron en la dirección donde supuestamente los lideres siempre iban, esperando el regreso de alguno. Pero tras ver que no fue así, regresé mi atención hacia el panorama frente a las murallas.
Sinceramente no era una vista agradable de presenciar, pero tampoco fue algo que nosotros pedimos. Ahora, en estos momentos que no eran los más alentadores, la llegada de otros dos reyes se hizo saber, esta vez siendo ese con forma de minotauro, y el pequeño parecido a un topo.

Tal cual fue con los primeros, ellos también recibieron la misma bienvenida, con todos nosotros resguardando los enormes muros desde arriba, y manteniendo posiciones ante cualquier intención hostil.
En sí el procedimiento fue el mismo, con las puertas abriéndose, y un el lote de bienvenida saliendo a recibirlos, con la diferencia de que esta vez no era el capitán Evans quien salía a decir: "Hola", sino otro oficial acompañado de los mismos Persecutores.

"¡Psst, Arnol!" en eso escuché susurrar a alguien detrás mío, a lo que dándome la vuelta, me di cuenta de que era Carem junto a David, y Erick.

"Y que crees?, parece que todo va viento en popa esta vez" comentó la rubia de mechón azúl, a lo que yo le respondí haciendo un gesto de 'mas o menos'.

"¡Vamos, Arnol, logramos no sólo hacer contacto con una raza extraterrestre inteligente, sino que ahora estamos negociando con ella!" me recalcó David, señalando a los líderes que estaban por entrar.

"Lo se, pero.... No creen que pudo haber sido mejor?" respondí haciendo un movimiento de cabeza hacia los cientos de cuerpos todavía esparcidos.

"No fuimos nosotros quien lo empezó, no teníamos de otra. Además, por lo menos pudimos ayudar a algunos...." alentó Erick, quien se había sentado sobre una caja de munición.

"Bueno, supongo que sí" terminé por contestar, solo para que un grito fuera exclamado desde el interior de las murallas. Nosotros, y los demás soldados que estaban cerca reaccionamos acorde a lo que abría sido, y tomando posiciones, apuntamos con nuestras armad hacia el origen del grito, solo para encontrar a un rey topo mirando hacia todos lados, y exclamar otro grito de impresión tras ver alguna estructura, o alguna unidad.

Por otro lado, el rey Tarios se mantuvo tranquilo, tal vez por el hecho de ya haber estado dentro, mientras era transportado por dos de sus guardias en una silla especial para él, aunque esta no era la que le habíamos dado aquella vez. La cosa es que sin aviso alguno, el gobernante de baja estatura comenzó a ir de un lado a otro como un niño, para admirar todo el interior de nuestra base, probablemente por el hecho de ser una base centralizada en la autosuficiencia, y la automatización casi en su totalidad.
Pero al parecer lo que más le parecía interesar eran los vehículos, y la aleación con la que estaban compuestas las estructuras.