El universo.... Una infinita zona donde billones y billones de estrellas y planetas habitan. Y la humanidad siempre tuvo esa enigmática pregunta en su cabeza. "¿Estamos solos en el universo?".... Acaso solo fuimos nosotros la única creación que Dios...
Wow.... Cuanto polvo!! *con una escoba, barriendo una cantidad exagerada de polvo*
Bueno, como pueden ver, finalmente actualizo esta historia, la cual se podría decir que es la segunda mas vista, pero mientras limpio y sacúdo todo el polvo que dejé en mi ausencia con este fanfic, comiencen con la historia, que espero que la disfruten como yo el haberla escrito.
Nos vemos abajo y.... ¡¡¡GOZENLA!!! XD
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A todos en la sala les tomó por sorpresa dicha pregunta hecha por Falen, quien permaneció sin decir una sola palabra mas, esperando a lo que todos los demás dirían, o por lo menos, uno solo de ellos.
"¿Y a que se debe esa pregunta, Rey Falen?" cuestionó el cocodrilo, levantando una de sus cejas.
"Primero, quisiera que me respondieran sobre si conocen la historia" contestó Falen, entrelazando los dedos de sus manos de forma pensativa.
"Todos conocen la historia de los Dioses. Seres bípedos, sin forma, y hechos de luz, que crearon toda la vida sobre este planeta, y bla, bla, bla....." respondió el león al lado de Falen, de forma altanera.
"¿Serían tan amables de relatar la historia?" pidió el león rey, permaneciendo en la misma pose, y con su mirada en la nada.
El gobernante antílope, dio un suspiro, para luego con un movimiento de mano, un especie de nebulosa surgiera de sus manos, y se moviera hasta el centro de la mena, convirtiéndose en una imagen algo distorsionada.
"Hace mucho tiempo, mucho mas antes de que la vida inteligente surgiera en nuestro mundo..... Este planeta estuvo habitado por cientos de seres de luz, cuya sabiduría llegaba mas allá de lo que cualquiera de nosotros pudiera llegar a imaginar. Estos seres, cansados de vivir en un páramo estéril, poco a poco fueron creando la fauna y los mares que cubren todo nuestro planeta, viviendo en armonía con la nueva vida silvestre que habían creado" comenzó a relatar el antílope, el cual resultaba ser un ciervo de grandes astas, a la vez que mientras relataba la historia, la imagen generada por el, cambiaba a diversas figuras e imágenes.
"Pero a pesar del hermoso paisaje que habían creado en pocos minutos, todavía sentían como si algo mas faltara, algo que completara el ciclo de la creación.... La vida que poblara el mundo. Todos ellos, fueron ideando a todos los seres vivos que caminarían, volarían, reptarían, y nadarían junto a ellos, creando así, a los mamíferos, reptiles, insectos, aves, peces, y demás seres vivos de distintas especies" continuó el ciervo gobernante, teniendo la atención de todos los presentes en la habitación, incluyendo a los guardias.
"Y los finales de su labor, todavía quedaba un último proyecto que era su deber finalizar. Crear a los hijos con los cuales compartirían su conocimiento, y basta vida.... O eso tenían pensado" cuando la historia había llegado a ese punto, la imagen cambió a una mas oscura, que mostraba a una especie de monstruos salir de debajo de la tierra, provocando un semblante aún mas serio en los líderes, excepto en el león de gran cicatriz, el cual solamente dejó salir una ligera carcajada.
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