𝒜𝓂𝑜𝓇 𝒶𝓁 𝑒𝓈𝓉𝒾𝓁𝑜 𝐵𝒶𝓁𝑒𝓃𝒸𝒾𝒶𝑔𝒶
En donde Jung Yoon Oh un Ceo millonario y dueño de la reconocida marca "Balenciaga" le propone un trato a un hermoso chico que conoce en su boutique de pura coincidencia, Lee Taeyong. Un trato que ambo...
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Jaemin y YoonOh iban envueltos en un silencio incómodo dentro de la camioneta conducida por el Ceo, ambos con miles de pensamientos en sus cabezas.
—No quiero que nuestra relación cambie Jaemin. No dejemos que suceda.—Habló Jaehyun mirando intermitentemente a su hermano quien chateaba en su celular, mientras que el intentaba no dejar de observar el camino.
—Lo sé Jae, nosotros no somos los culpables, seguimos siendo hermanos.—le tranquilizo Jaemin con una leve sonrisa, el contrario puro respirar tranquilo.
—¿Chateas con Renjun y Jeno?—consultó YoonOh al ver a su hermano.
—Si, les aviso que voy para allá porque me echaron de casa. Cuando esté con ellos les cuento los detalles.—explicó Jaemin para luego bloquear su celular.
—Deben estar emocionados porque vivirás con ellos por fin.—Ambos rieron estando de acuerdo.—¿Cuánto tiempo llevan Jeno y Renjun viviendo juntos?
—Creo que unos siete meses.—respondió Jaemin mirando por la ventana.
—¿Y porque estuviste soportando a mamá tanto tiempo después de lo que te hizo?.—YoonOh frunció el ceño, algo hizo clic en su cabeza y miro a su hermano, intentando no apartar tanto la vista del camino.—¿Por qué no te viniste a vivir conmigo? ¿Por qué no te fuiste con tus novios apenas tuviste oportunidad? Joder Jaemin, ¿Para que soportaste tanto?
Jaemin le miro incómodamente.
—Porque aún no tengo ingresos.—contestó Jaemin en voz baja.—Me gradúo el año que viene y no tengo trabajo.
YoonOh le miro incrédulo.
—No me regañes, Renjun es modelo y Jeno es heredero de la empresa de su papá, los dos ganan mucho dinero y no quiero que me mantengan, si vamos a vivir juntos, debemos repartir los gastos, es lo justo.—continuó hablando Jaemin.
—Lo comprendo, pero pudiste hablarlo conmigo, te hubiera ayudado.—le regaño de igual forma el Ceo.
—Es lo mismo, el dinero es tuyo por tu trabajo, no quiero que me mantengas.—negó Jaemin.—Así que ahora buscaré un trabajo hasta que me gradúe.
—No busques trabajo, ya lo tienes.—le dijo YoonOh sonriendo cómplice.
—¿Qué?—Jaemin se enderezo en el asiento.
—¿Tu pasatiempo sigue siendo la fotografía?—le preguntó YoonOh, deteniéndose en el semáforo rojo.
—Si.—respondió el menor dudoso.
—Perfecto, necesito un nuevo fotógrafo en Balenciaga.—Dijo YoonOh sonriendo, viendo como las comisuras de los labios de Jaemin subían.
—¿De verdad?—preguntó Jaemin sonriendo, su hermano asintió y aprovechando el semáforo el menor abrazo al Ceo por el cuello.—¡Eres el mejor! ¡Gracias!
