~Narra Eros~
Mi hermano, Cupido, han pasado muchos años, el maldito de Chronos sigue jugando con el tiempo, todos aún creemos que puedes lograrlo, pero, hay alguien, que aún te espera, con muchas más ansías que todos juntos, se que sabes perfectamente de quién hablo
-Todos se siguen preguntando, ¿Por qué lo hiciste?- su cara simplemente mira hacia el piso, no ha querido decir ni una sola palabra desde aquel día, algunos piensas que una parte de su castigo, fue ser silenciada hasta el regreso de su amo -no tienes porque contestar, yo lo sé, se mucho mejor que nadie, por que le eres tan leal a Cupido, toda tu lealtad comenzó desde aquella mañana, recuerdo ese día, yo estuve ahí-
-Lo se, usted estabas junto al amo Cupido- su voz apenas y parece un susurro, tan débil, tan apagada
-Si, aquel día, dónde todo comenzó, lo recuerdo tan bien...~Hace 300,000 años~
-Enserio Cupido, ¿Por qué estamos aquí?- hemos venido al lugar donde comienza el entrenamiento de los guardianes, ángeles con un entrenamiento intenso, entrenados para dar su vida si es necesario, listo para matar y para morir intentándolo
-Simplemente me parece bien volver al lugar donde fuimos entrenados hermano-
-¿Fuimos?, Te recuerdo que yo entrene en el Olimpo, mi maestra no fue tu maestra, este lugar solo te trae recuerdos a ti-
-Lo se, tranquilo, fue solo una expresión-
-Un momento, ¿Acaso tu?...- su sonrisa simplemente lo delata, hermano, eres tan fácil de leer, que hasta un humano podría hacerlo
-No se de que me hablas-
-Entonces tu, por fin haz decidido quién será tu guardián-
-No, aún no, tal vez después, por esa razón estamos aquí, simplemente quiero ver el potencial de la nueva generación-
-Cupido, cupido, cupido, solo tú buscan un guardián entre pequeños ángeles-
-Dios Cupido, es un honor el tenerlo aquí- una de los angeles se acercó hacia nosotros, parece ser uno de los maestros -dígame, a qué se debe el honor de su visita-
-Simplemente tengo la intención de conocer la nueva generación de guardianes-
-Bueno, siganme, les mostraré el lugar- fuimos detrás de él, cruzamos todo el campo, es bastante grande, parece ser que se toman muy enserio este trabajo -la nueva generación que hemos estado entrenando, tiene un increíble potencial, es como si todo estuviera dentro de su sangre, la habilidad para adaptarse no solo en combate, sino en supervivencia, es sumamente increíble- 5 ángeles se acercaron a nosotros, 3 chicas y 2 chicos, todos y cada uno de ellos con heridas y marcas en el cuerpo
-Así que ustedes son los 5 ángeles que quieren ser guardianes-
-Si señor- los 5 respondieron al unísono, tienen buena coordinación
-Quiero oir sus nombres y edades cadetes-
-Mi nombre es tad señor, y tengo 134 años- dio un paso al frente y se presentó el pequeño ángel más alto del grupo, un niño rubio, parece ser que tiene una cicatriz en el ojo, posiblemente sea de un accidente en los entrenamientos, es muy regular que pase algo así en estos lugares
-Mi nombre es Mayne señor, y tengo 129 años- esta vez fue una de las chicas, la segunda más alta, castaña, tienes unos lindos ojos cafés, me recuerdan a las avellanas
-Mi nombre es Lest señor, tengo 133 años- parece ser que ninguno de ellos es mucho mayor que el otro, sus edades son similares, está vez fue el turno del otro niño angel, y chico de cabello café, su cuerpo parece tener más heridas que la de los demás, parece ser que alguien se quiere esforzar el doble que el resto del grupo
-Mi nombre es Janne señor, tengo 127 años- parece ser que la chica rubia de ojos cafés es la más chica del grupo, bueno a menos que la otra pequeña ángel sea más pequeña, de hecho, es mucho más pequeña que los demás ángeles, aún se mantiene detrás, parece ser que está impresionada viendo a Cupido
-¿Cuál es tu nombre pequeña ángel?- parece ser que Cupido se dio cuenta al fin de que la pequeña ángel no dejaba de mirarla
-Melissa señor, tengo 114 años- vaya, es mucho más pequeña que los demás, yo inicie mi entrenamiento a los 125 años, pero ella, lo ha iniciado aún antes que yo, es una linda ángel, su cabello es negro como la noche, sus ojos brillan como dos grandes esmeraldas, blancos y relucientes como el mismo brillo de la luna, Cupido solo la miro y sonrío
-Maestro, hay una situación, están atacan el campo de entrenamiento-
-Maldición, ¿Quién nos ataca soldado?-
-Angeles de pesar angelical maestro- angeles de pesar angelical, cuando un ángel tiene demasiado pesar, suele materializarse, pueden tomar diferentes formas, pero la más común es tomar una forma angelical como la del ángel del que nació
-Maldición, tenemos de deshacernos de ella, cadetes esperen aquí-
-Un momento- Cupido, ¿Ahora que demonios haces?
-¿Qué ocurre mi señor?-
-Creo que este es un buen momento para que los pequeños angeles, puedan observar una prueba del poder de una deidad- de hecho, no es tan mala idea
-No suena mal, creo que nunca está demás un poco de acción mi hermano- todos salimos y revisamos la situación, son solo unos pocos enemigos
-8 en total Eros, veamos qué tan buena puntería haz afinado hermano- Cupido saco dos flechas y ambas dieron en el blando a la primera, las formas se desvanecen al sentir un alivio a su pesar
-Nada mal hermano, pero se puede mejorar- puse cuatro flechas en mi arco, todas llegaron a su destino, creo que ninguno de los dos a podido fallar a un blanco hace varios siglos
-aaaaahhhhh- ¿Qué mierda?, Más enemigos aparecieron por detrás, uno de ellos tomo a la pequeña ángel Melissa
-Cupido-
-Lo veo- sin siquiera un segundo que demorar Cupido derribo a los angeles de pesar angelical, cargo a la pequeña ángel y la llevo con los demás, parecían un poco avergonzados de ella, todos los enemigos fueron eliminados y el campo de entrenamiento fue limpiado
-Oh mis señores, muchas gracias por su ayuda, lamento lo que pasó con uno de los cadetes, yo me encargaré de que reciba un castigo-
-No será necesario, créame, está bien tener miedo algunas veces, y más cuando recién haz comenzado este camino- Cupido se acercó a la pequeña ángel, maldición Cupido, ¿Por qué siempre te metes más de lo que debes? -escucha pequeña ángel, no importa si no eres valiente todo el tiempo, lo único que siempre debes de recordar es que siempre debes de proteger aquello a lo que amas, eso te dará la fuerza para seguir levantando te y seguir peleando- parece ser que ahora le das un regalo, se quitó su collar y se lo regaló a la pequeña ángel.
Salimos del campo de entrenamiento y volamos de regreso
-Creí que ese collar te lo había regalado tu madre-
-Y así fue, pero, creo que le servirá mucho mejor a ella, tiene un increíble potencial, lo se, solo le falta a alguien para proteger y cuando lo encuentre, se que ella será la más leal de todas las angeles, tienes un gran futuro por delante, pequeña ángel.
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¿Cupido también se enamora?
RomansaCuando el dios del amor se canso de ver cómo los humanos jugaban con el don que les obsequio, decidió romper las reglas y bajar al mundo de los mortales para experimentarlo el mismo, después de conocer a quien le mostraría el lado bueno de la humani...