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28 de agosto.

Preocupado estaba muy corto para describir ahora.

Lan WangJi no se había presentado en su casa en casi una semana. Wei Wuxian ya no sabía qué hacer.

Al principio, pensó en hacer un reporte de desaparición. Pero se enteró que había estado yendo a su trabajo, pero salía a la misma hora de siempre, a la hora que antes llegaba a casa. ¿Dónde se metía en todo el día?.

Se negaba a creer algo más, así que investigó, y encontró el lugar en donde trabajaba su esposo. Al principio el plan era solamente verlo de lejos, intentar que no lo descubrieran, y resultó.

Se escondía en un parque fuera del trabajo de Lan WangJi, todas las tardes salía a la misma hora, veía que salía con su carro y se iba a una dirección contraria a donde estaba su casa. Incluso una madrugada decidió ir temprano, a la hora en la que su pareja siempre salía de casa. Se dio cuenta que llegó aseado, se notaba que había tomado una ducha y su ropa era diferente, pero no había nadie, ningún acompañante.

Pero después se había dado cuenta. Lan WangJi se había dado cuenta. Había sido visto en las cámaras de vigilancia, y había sido reportado.

Una tarde, Wei Wuxian llegó una vez más al parque, sentándose en una banca y esperando a que saliera. Pero no hizo, Lan WangJi no salió a la hora de siempre. Esta vez salió una hora más tarde. Y está vez, había un detalle, su esposo salió con una cara roja de ira, su mirada fue rápidamente al parque, buscando a su objetivo, y lo vio.

Wei Wuxian se dio cuenta, Lan WangJi lo miraba fijamente mientras se acercaba, y esto le dio miedo, ahora ya no sabía cómo reaccionaría. Así que se levantó rápidamente e intentó correr, pero una mano lo jalo, evitando su acción.

-¡Lan Zhan! ¡Me lastimas!.

-¿Qué haces aquí?

-Y- yo...

-¿Qué haces aquí?

-Yo quería ver que hacías, porque no llegabas a casa, estaba preocupado y-yo...

Un chillido salió de su boca cuando Lan WangJi lo jalo con una fuerza que casi le rompería la muñeca. Estaba tropezando debido a la velocidad en la que estaba siendo jalado. Fue obligado a subir al carro y al llegar a casa, su esposo solamente lo sacó sin piedad alguna, adentrándose a ella, haciéndolo llegar a su cuarto. Durante el trayecto, Wei Wuxian no dejaba de pedir disculpas, intentaba mejorar la situación. Al abrir la puerta, Lan WangJi lo aventó, haciéndolo caer al piso, dándole una última mirada y saliendo del cuarto, cerrando con llave.

Wei Wuxian al escuchar el sonido de la puerta cerrarse sintió un miedo indescriptible, así que rápidamente se levantó y empezó a tocar la puerta, mientras gritaba y lloraba, esperando que se abriera.

-¡Lan Zhan! ¡Lan Zhan! ¡Prometo ya no hacer nada! ¡Ayúdame! ¡Por favor! ¡Abre! ¡Por favor!.

Cada vez Wei Wuxian se sentía peor, de repente las súplicas pararon, y un sonido sordo se escuchó en la habitación, se había desmayado. 

His FoultDonde viven las historias. Descúbrelo ahora