Me miro por última vez en el espejo del baño y apago la luz. Después de llegar a casa y contarle las maravillosas novedades a Louis, me dí un baño de aproximadamente media hora mientras escuchaba a Coldplay. Fue mientras Chris Martin cantaba Fix you que caían la realidad de la situación. ¿Iba a dejar que, por el mero hecho de ser mujer, alguien iba a menospreciar mi carrera profesional? No me parece.Después de mirar todos los posibles conjuntos del armario me decidí por un traje de pantalón y americana negro con unas sandalias a juego. Si ellos querían jugar, yo también.
- Mamma mia. Estás increíble.- dice Louis desde el sofá ignorando a Enzo que le estaba hablando.
Cuando el moreno en gira en mi dirección apoya fehacientemente el veredicto de su no-novio. La historia de estos dos os la puedo resumir con que se gustan, pasan mucho tiempo juntos pero son eso, no-novios. O como digo yo, alérgicos a etiquetar relaciones.
- ¿Os gusta? No creéis que voy muy... con el escote o... Igual me voy a cambiar.- digo titubeando.
- Roma Lorenzo Fields- dice mi amigo poniéndose delante de mí y agarrándome por los hombros.- creo que necesitas una charla motivacional. Eres una mujer preciosa, y ambos sabemos que eso no es lo esencial. Has trabajado desde que llegaste a Paris por y para este puesto. Llevas prácticamente toda tu vida dedicándote a los idiomas, ¡eres trilingüe cariño!- dice riéndose.- y nadie. Escúchame, nadie te ha regalado nada para llegar hasta donde has llegado.
Escuchar sus palabras así, tan directas hace que se me agüen un poco los ojos. Desde que conocí a Louis supe que iba a ser una de esas personas que siempre van a estar dispuestas a estar a tu lado, pase lo que pase. Y que, tal y como me está demostrando en este mismo momento, siempre tienen las palabras adecuadas para cada ocasión.
- Gracias.- digo dándole un abrazo.
Me separo de él y me seco con un papel los ojos antes de que el eye-liner que tanto me ha costado hacerme de manera simétrica se estropee. Me miro en el espejo y me veo. No veo la cara bonita de la que habla. Veo a una mujer trabajadora, que lucha y defiende sus valores. Y la cena de hoy, no será una excepción.
- Tienes razón. Voy perfecta.- les digo recogiendo mi bolso de mano de la mesa del salón.- ¡Deseadme suerte!
Salgo de casa cerrando la puerta mientras les escucho al unísono un "no la necesitas".
Llego a la puerta del famoso restaurante Epicure. En la entrada hay varios fotógrafos que saben que las altas esferas del Paris Saint Germain se reúnen hoy con motivo del inicio de la nueva temporada. Paso saludando discretamente a la gente reunida alrededor de la puerta y una vez dentro me quedo embobada. El sitio está decorado con alfombras y lámparas dignas de una fiesta de los años 20. Un señor de unos 65 años se presenta como Simón, y me ruega que le acompañe. Le sigo por un largo pasillo que termina en un pequeño jardín con flores y un estanque.
- Mademoiselle, c'est ici. Si necesita cualquier cosa, hágamelo saber.
- Muchas gracias Simón.
Desde donde estoy puedo ver la cabeza rubia de Adrien entre la demás gente trajeada. El me sonríe y me invita a unirme a su conversación.
- Hola Roma, vaya. Estas impresionante.- me dice dándome un amigable apretón en el brazo.
- Gracias, ya sabes que soy una cara bonita.- digo arrancándole una pequeña carcajada.- Voy a hacerme con una copa de vino y a saludar a Laura que la he visto por ahí. ¿Luego nos vemos?
Me dirijo hacia una pequeña barra situada a la derecha del estanque donde un camarero vestido como un pingüino me sonríe amablemente mientras me pone una copa de vino blanco. Le doy un sorbo y le doy el visto bueno para que me llene la copa. Tiene un sabor afrutado y está fresquito. No es un Albariño, pero no me puedo quejar.
Desde mi posición veo como Ibrahim está hablando con un par de jugadores de la plantilla cuando sus ojos recaen en mí. Me sonríe victorioso dando por hecho que se ha ganado la simpatía de varios jugadores. No es hasta que Killian y Neymar se giran para verme que el pobre Ibrahim se da cuenta. Le va a costar bastante más que un chiste malo para quitarme de en medio.
- Hola Killian, ¿qué tal por casa? ¿Tu madre todo bien?- le digo dándole un abrazo.
- Si, todo genial por casa. Me ha dado recuerdos para ti.- dice pasándome un brazo por los hombros.
Aprovechando que Ibrahim no se que historia le está contando al bueno de Ander, el francés susurra.- Y esté bienqueda ¿quién es? ¿Me he perdido algo estando fuera? Por cierto, tú le das mil vueltas.Solo puedo reírme ante su comentario y le hago un gesto con la mano indicando que ya se lo contaré en otro momento. Desde aquí puedo ver cómo Rafa entra saludando a todo el mundo hasta llegar a nosotros. Se presenta a mi nuevo compañero de una manera bastante seca y viene a mi lado dándome un abrazo muy largo. Que puedo decir, es mi amigo. De la que venía en taxi le envié un auténtico podcast explicando la situación. No me gusta usar influencias externas de cara a mantener mi puesto de trabajo, pero si Ibrahim va a utilizar sus contactos, yo también tengo los míos.
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SOMEPLACE | Neymar Jr
FanfictionA lo largo de nuestra vida vamos a visitar muchos lugares y conoceremos a muchas personas, pero lo importante no es el donde, sino el con quién. Y eso es algo, que Roma está a punto de descubrir.