He escrito este capítulo con Dandelions de Ruth B. La tenéis en la playlist 🥺❤️
Me vuelvo loca al ver como Mason corre con el balón en sus pies y desde fuera del area chuta, entrando el balón por la escuadra.
—¡Aaaaaaaaah! ¡Goooooooool!—corre la banda con el equipo detrás y me coge en brazos para abrazarme—¡estás fatal! ¡vaya gol!
—Es tuyo, ¡te lo dedico Dai!—dice alejándose y señalándome. Noto alguien dándome en el brazo un suave golpe y veo a Olivia y a Kepa riéndose.
Maybe it's the way you say my name
Maybe it's the way you play your game
But it's so good, I've never known anybody like you
But it's so good, I've never dreamed of nobody like you
¡Final en Stamford Bridge! ¡El Chelsea se clasifica para los octavos de Champions tras esta victoria frente a la Juventus! Espero en el pasillo a los jugadores.
—¡Juuugadores de octaaaavos! ¡Juuuugadores de octaaaavos!—me río al oír a Saúl gritar en español. Así que yo me acerco y le paso el brazo por los hombros.
—¡Saúl! ¡Vaya partidazo has hecho, joder! Cabeza arriba siempre, ¿de acuerdo?—asiente tras mis palabras en español y me abraza.
—¡Gracias Dai, en serio!—chocamos los puños—vaya gol el de Mount... y qué bonito que te lo haya dedicado.
—Está loco.
—¡Por ti!—el ilicitano se va por el pasillo y Timo se acerca con Mason y Ben.
—¡Chiiiicoooos!—Mason me coge en brazos y da vueltas conmigo. Yo me río y le miro desde arriba. Cuando me baja, abrazo a Kai fuerte y a Ben.
—¿Te ha gustado el gol?—asiento.
—¡Más que eso! ¡Me ha encantado, Mason! Te puedo asegurar antes de tiempo que hoy tienes que comparecer en rueda de prensa.—se ríe. Ben y Kai siguen andando y Mason pasa su brazo por encima de los hombros y caminamos hacia el vestuario. En la puerta del vestuario, para y me agarra de las mejillas para besar mi frente lentamente y acariciar mi cara.
—Esto hoy es tuyo.—se quita la camiseta quedándose en la interior azul de manga larga, pone al derecho la camiseta y me obliga a levantar los brazos para deslizar la tela a través de ellos. Una vez está puesta, me gira para verme el dorsal y quita mi pelo echándolo hacia un lado.—espera, voy a por el móvil—cuando sale, prepara la cámara y nos hacemos un selfie en el que él está detrás de mí con mi espalda pegada a su pecho, y con la mano izquierda hace la foto mientras que con la derecha me abraza por el cuello dejando su mano reposar sobre mi hombro izquierdo. Luego me hace ponerme de espaldas y me hace varias fotos.—Dai, gírate, por fa.—me giro y agacho la cabeza poniendo mis manos en mi espalda con timidez.—las fotos preciosas y tú adorable.—me abraza.
—Gracias, me las pasas luego, me voy a la oficina a trabajar, bajo en un rato a decir quién tiene entrevistas, aunque a ti ya te he adelantado que hoy tienes que hablar sí o sí por semejante golazo.
—Yo hago lo que tú me pidas.—le doy un manotazo en el pecho y me doy la vuelta.—Sé que vamos a ir despacio pero... ¿puedo besarte?—pregunta tímido.
—Pero solo por el gol.—él asiente y me besa. Disfruto el roce de sus labios con los míos y como sus manos me acercan a él. Tras notar como nos falta el aire, me separo y vuelve a besarme cortamente.
—Uno más por el partido que he hecho—me besa de nuevo—y otro por lo bueno que soy—y...—le cojo de la nuca y le beso de nuevo, nos separamos al ratito y me mira—eres una maldita caja de sorpresas Dai. Eres increíble.
