Capítulo 1

11 7 1
                                    


Frustración, ira, dolor y rabia eso  sintió Elena al enterarse de la desaparición del rey, quien había abandonado el castillo desde bien entrada la tarde del día anterior, se había estado encargando de muchas cosas de las empresas que tenía a su cargo y luego de su apretada agenda el rey había tomado su auto y había abandonado el palacio hacia rumbo desconocido.
Dejando  a la guardia real y así jefe de guardias preocupados por el paradero del rey, el palacio se encontraba en total caos y la prensa solo lanzaba especulaciones de donde podría estar  el rey.
Aún no lograban entender como siempre la prensa solía enterarse de todo, era preocupante.
Elena no pudo ocultar una sonora carcajada que salió de su boca, porque todo esto solo le causaba risa. Era tan divertido y patético.
Buen para aquellos que no lo conocían también como ella lo conocía no les era fácil saber que el rey se encontraba en una pequeña villa que años atrás fue un refugio para encuentros llenos de amor, inocencia e ilusiones. Pero también de tristeza y gran dolor.
Dolor para aquellos que tomaron  con fuerza la cuerda que unía los destinos   y quisieron sobre pasar los límites que había creado el hombre. Elena dejo a un lado la pequeña nota que recibió de parte de la princesa Elisa, la hermana menor del rey y princesa  que era su mejor amiga.
Suspiro dejando el asiento donde prácticamente estaba recostada para ir a tomar  un vaso de agua en la cocina de su pequeñas casa y  volvió a observar la nota que unos de los guardias del palacio trajo junto con una invitación para que asistirá urgente al llamado de la princesa quien estaba muy preocupada por el paradero de  su hermano, Elena  suspiro y froto sus ojos con verdadero cansancio Rafael  había vuelto a desaparecer y eso solo traía problemas.
¿Estaba Rafe jalando del hilo rojo muy fuerte esta vez? Era tan difícil entender que no había forma de forzar una relación.
Al pasar junto a sofá en su camino  al refrigerador el contestador automático del teléfono comenzó a cambiar de color y un mensaje de voz se comenzó a reproducir.
“Hola — Una pequeña pausa lleno el ambiente por un momento, era como si la persona estuviera pensando que decir a continuación — Elena, soy la Señora Gloria se que nos pediste no llamarte a tu casa y no pedirte más ayuda pero — Otra pausa— solo llamo para saber, si  joven Rafael fue a buscarte o estuvo en contactó contigo — Se escucha un poco de ruido al fondo de la llamada y la escucho discutir con alguien — Puedes devolver la llamada en caso de saber algo que tengas buenas noches señorita Lofton”
Sus pasos se detuvieron solo por un momento  al escuchar la suave y angelical voz de la ama de llaves del la Mansión dónde vivía Elisa, retoma su rumbo al escuchar el final del mensaje.
— ¿Creen que lo estas escondiendo en casa? — La voz ronca de posa se puede escuchar — dije que no asistirá al cumpleaños Elisa la última vez, pero es que no me haces caso Elena no quieres entender lo obvio.

Al escuchar la gruesa voz de su padre salto del susto ya que no lo había sentido entrar en la casa, que era pequeña con piso de madera, hasta los momento solo podían permitirse vivir en eell
Don de Arturo Lofton observo a su hija con tristeza.
— Deberías decirle a tu amiga la princesa, donde se esconde su hermano, así no tendrías que recibir llamadas ni mensajes de esa horrible familia — Su voz se envolvió en la ira con cada  palabra que decía.
— No creo que Rafael quiera o espere que sea yo quien hable con  su hermana de su escondite secreto, así que no te metas en esto padre, ve a tomar una ducha volveré a calentar tu cena. — Trato de no sentirse mal por la duras palabras de su padre y se volvió para hacer lo suyo mientras lo veía salir de la cocina.
Cena que hace mucho estaba mas que fría. Esta vez su padre había llegado mas tarde de lo normal a casa, cada día lo miraba más cansado y eso le preocupaba.
Su mirada se perdió en los platos que  giraban en el pequeño horno mientras calentaba la cena para su padre, que trabajaba en el  palacio como unos de los sirvientes del rey actuar y también había servido al difunto rey el padre de Rafael y  Elisa.
Así fue como conoció a Rafael y a Elisa, como su padre era una de los sirviente fieles del difunto rey  la dejaban vagar por el palacio y jugar con los pequeños hijos del rey cuando no tenían obligaciones de la realeza, Elisa se volvió su gran amiga pero Rafael mientras fue creciendo cada día fue más complicado llevarse bien con él, era tan engreído, serio  y odioso.
Esos eran los pensamientos de Elena hasta que el año pasado cuando  el rey actuar se declaró  ante  ella en una confección de amor,  diciendo lo mucho que la amaba en secreto y que ya no podía seguir ocultado ese sentimiento, eso llevo a muchos encuentros secretos en la villa junto a la playa y muchas escapadas donde se disfrazaban  y se ocultaban entre el bullicio de la  gente en medio de muchas calles.
Un suspiro escapo de sus labios y tuvo que  molde su labios inferior  que le tembló un poco.
Todo eso acabo cuando una noche deseada con el mejor ambiente que pudo imaginar  Rafael se puso de  arrodillas en medio de rosas y velas con un pequeño cofre de terciopelo en dónde se podía  era un anillo  al abrirlo entre  las manos  de este, comenzó a  confesarle  su amor a una simple plebeya, marginar y pobre hija de los sirviente de la mansión que nada  en el mundo tenía que ver con la realeza, que nunca le gustó la vida de la mansión y que al ver el anillo solo sintió ganas de vomitar.
Ese fue el primer error, no era solo por ser una pobre chica de campo, era que la vida no era como una novela o cuento de andas como los que pasan en la televisión o como una cuento de eso que leía de pequeña. En la vida real el rey no puede casarse con una simple hija de un sirviente que odiaba el palacio y odiaba la vida de la realeza. No quiere ese castigo para ella misma se negaba a sufrir por hacer feliz a alguien más que no tenía la culpa.
Los pasos provenientes del pasillo que conecta la cocina con la sala de estar,  la alentaron de la llegada de su padre.
—  ¿Vas a quemar la cena o voy al restaurante de la esquina? — Últimamente su padre la trataba con rudeza y eso le dolía sabía que le había fallado igual que ella, pero estaba lucha el por enmendar todo lo malo que un día pudo haber hecho. 
Una risa seca salió de sus labios.
Con un sonoro suspiro producto del   cansancio de pensar en una solución, para hacer volver al rey a el palacio donde pertenece  sirvió la cena, no quería entrar en detalles con él, sabía que terminarían en peleas y la verdad no quería discutir con su padre y meno por asuntos del rey.
Sumida en el  silencio que  durante muchos años se a adueñado de la casa cenaron.
_ ¿Puedes ir por un poco de yogurt a la tienda más tarde?  No quiero salir de casa otra vez, hoy el palacio estaba muy ajetreado con la llegada del primo del rey el príncipe James  De Alexandre.
_ Lo sé, Elisa lo comunico en la nota que me envió, además alguien lo filtro a prensa y salió por el noticiero.
_ ¿Por qué enviar notas si tenemos teléfonos en el 2022?
_ Dice que le emociona hablar con conmigo como lo hacía la gente del palacio en su época
_Siempre he pensado que la princesa esta algo loca
_ Serás decapitado si ella te llegara a escuchar  hablando de esa manera de ella
_ No puede escucharme y tú no vas a traicionar a tu padre ¿verdad?
_No — Con una leve sonrisa dio por finalizada la conversación.
Luego de la cena Elena tomo su abrigo y cartera, el yogurt  era la comida favorita de su padre desde que tenía uso de razón a su padre le encantaba comer este tipo de cosas y no es que lo comerá dulce siempre lo pedís sin azúcar, cuando solía estar estresado o cansado podía pasar horar frente al televisor solo mirando y comiendo yogurt, cuando la mansión se volvío un caos por la huida del rey y la llegada del príncipe James  a quien  aún no había tenido la oportunidad de conocer.
Mientras caminaba a la tienda Elena solo podía pensar en el príncipe James sabía que había vivido mucho tiempo en el extranjero pero no sabía que edad tiene y muchos menos había visto una foto suya, hacia más de 1 años que ya casi no visitaba el palacio por lo tanto las veces que el Príncipe James había estado en el ella no había podido ir por miedo de ver al rey, cosa estúpida de su parte.
Su mente  solo podía fluir en imaginar al Príncipe que estaba por llegar a la mansión cuando sintió cómo sus cuerpo chocaba con fuerza, tomándola  por sorpresa
Un fuerte  golpe contra algo duro y musculoso, pero con un aroma  divino la llevo a saltar hacia atrás, preparada para sentir el fuerte golpe contra  el piso Elena cerro los ojos preparada para el dolor en su trasero  el cual nunca llego pero lo único que sintió fueron las manos gruesa y ásperas que la tomaban de los dos brazos evitando su caída.
_ Lo siento no miraba por donde iba se encuentra usted bien señorita.
Al alzar su mirada sus ojos se abrieron sorprendidos encontrando  con un rostro marcado por una sonrisa hermosa de dientes blancos  y mirada preocupada, muy apenada de mirarlo cono tonta Elena  decidió hablar.
_ No …No pasa… nada estoy bien, fue mi  culpa
_ Como voy a dejar que una linda chica asuma mi responsabilidad…un caballero nunca puede permitir eso.
Elena soltó una risa nerviosa que la sorprendió a ella misma y el descarado hombre solo amplio una sonrisa con gesto relajado
_ Pues nunca dije que no fueras un caballero
_ Oh este caballero
En ese momento un hombre alto y con traje a la medida y un auricular conectado en el oido  en ese momento los interrumpió detrás de el venían  otros más se miraban preocupados y asustados
_ Señor, ¿se encuentra bien?
El desconocido levanto su manos marcando una distancia prudente entre el grupo de hombres y ellos, estaba sorprendida y no lo oculto  pensó que de  seguro era uno de esos empresario que solían hacer negocios con el rey y visitaban la isla 
_ Señor se hace tarde debemos irnos ahora, el lugar no es seguro para su maje…
_Enseguida voy Emilio no te preocupes —Luego volvió la vista a los hombre y pidió que se alejaran un poco para que dejaran pasar a la pobre chica que estaba más que asustada por la expresión que reflejaba su rostro.
Porque a nadie le gustaba dar mala impresión a los turistas y extranjeros.
Al verla alejarse no pudo evitar sentir las ganas de detenerla y saber quién era.
Porque ella con su cabello recogido en una coleta y esos pantalones ajustados y ese suéter que la abrigaba de esa fria noche le pareció una chica linda.
Para uno fue un simple encuentro con un rico extranjero.
Para el otro fue la primera vez que se cruzaba con una mujer que despertara  su curiosidad luego de su oscura vida. Y mas si fueron solo segundo
Pero su belleza
Su pequeña sonrisa
Lo que no sabían ninguno de los dos era que podían ser el amor de la vida del otro después de haber perdido sus almas gemelas.
Pero podrá una alma gemela dolida por el abandono soltar el hilo rojo fácilmente.




últimamente lo único a lo que Elena estaba dedicando su tiempo era al cuidado de la casa de sus padres y dónde ella vivía y la otra parte del tiempo a dormir, desee que había abandonó la mansión se vida de había convertido tan aburrida que no podía explicase a si misma como había llegado a esta situación.
-Señorita Elena
Escucho  la  voz  suplicante de la persona insistente que  llamaba, si porque lo había escuchado llamarle dos veces antes pero se había hecho a la idea de que si lo ignoraba el se iría de regreso pero era obvio que el ola a no estaba dando resultados,  pero sus ojos no podían enfocar la persona de la cual provenía la voz roca, ya que estaba acostada en el sofá con los ojos cerrados aún y su cabeza descansaba de forma muy incómoda, pues había estado tomando una pequeña siesta porque últimamente tiene mucho tiempo para esa actividad.
-Señorita Elena,  La princesa Elisa me envía hablar a pedirle un gran favor para ella, se que ustedes son muy buenas amiga y se que no va negarse a los pedidos de la princesa, por favor — Este  hombre lo  conocía muy bien, Elena  se  incorporo cómo pudo  en el mueble para sentarse siendo como la sangre volvió a su lugar poco a poco, era el guardia real y personal de la princesa Elisa y por ende el hombre del que estaba ella muy enamorada, porque Elisa apesar de las avertencias de sus hermanos se había enamorado de su guardia real.
-Señorita Elena — volví a llamar, enfoque su rostro, aclarando mi vista luego de despertase de una pequeña  siesta o fingida siesta.
-Puedo saber que se le ofrece a su majestad esta vez, espero y no sea que se le rompió el vestido o no consigue una sandalia — Elisa lo había enviado en su búsqueda,quería decir que Rafael  estaba dando problemas pero ella trataba de no hablar del Rey con de la mansión.
-La princesa está muy preocupada por su hermano – le observa por un memento pero no cambio su expresión de molestia  que le causó  ver qué todos estaban preocupados por el paradero del rey pero la bella y hermosa Elena solo se dedicaba a dormir sin mortificación alguna – Le pide ¿que si puede usted hablar con su hermano ? bueno el rey le hace caso a usted y por lo tanto
-¿Quiere ella que yo interfiera en los asuntos del rey cuando está molesto? – no pudo evitar bufar y estirar su cuerpo sobre el sofá, para liberar el pequeño escalofrío que se colo por sus columna – ¿Qué hizo el rey?
-Ha despedido a  más de 30 empleados, golpeo a uno de los trabajadores por decir que usted era una mujer de la mala  vida y una ramera — Hace un pausa — Sabes que eso no es verdad, pero el  empleado estaba tomando y no medio sus palabras, no duerme mucho y solo toma  encerrado en su recamara, el príncipe James su primo a tratado de calmarlo pero no ha podido.
¿Es esto un circulo vicioso? Si,  saber qué Rafael  estaba actuando de esa forma tan infantil cuando no  acudo a sus pedidos se comporta como un verdadero idiota, porque tienen que esperar en el palacio que una mujer como yo la hija de un simple sirviente tenga poder sobre el rey.
Porque lo tenia y era lo peor que podía pasar.
Hace un mes Rafael  dejo el palacio, dos días después de que la celebración de su cumpleaños se realizara, Elisa me había invitado y no pude rechazarlo a pesar de que mi relación con el rey era complicada en este momento moría por ir y ver su cara, compartir los pequeños momento que se me permitían junto a ellos.
Pero Rafael  solo lo tomo como excusa, hizo escándalos por no poder cumplir sus órdenes y abandono el palacio como media de presión para que yo fuera tras el pero me negué  y luego de 2 semanas el rey volvió al palacio, papa regresaba cansado y decía que este rey no era un ser humano noble.
En realidad ni su padre lo fue… Pero ese es otro tema.
Aun ahora se buscaba escusas para hacer de mi lo que él quiera y no tenía más que cumplir sus deseos.
-Llévame a ver al rey
Porque si lo hacia esto, no iba a tener fin nunca y ya estaba cansada de eso, en el camino trato de hacerse un discursó para no perder valor.
El guardia real de la princesa le llevo a los establos del palacio apenas había llegado y le hubiera gustado pasear un poco mas y saludar y ver a su padre, pero ni para eso había tiempo.
Al  parecer al rey le dio por ir de paseo a caballo, cosa que ella no sabia hacer, Rafe sabía que le  molestaba montar a caballo pero aun así lo hacía estaba en esa área del establo.
Al llegar a los establos lo primero que vio fue a todos los guardias del rey desplegados en casi todo los rincones como siempre, velando por la seguridad del su majestad, ellos eran tan amables.       (algunos) que le saludaron con alegría disimulada con solo verle pasar a su vez algo de   alivio en sus miradas.
Eso le dio algo de pesar pues cuando ella saliera del establo, el estado de animo de Rafael seria peor.
Podría dar fe de ello.
Y pedía disculpa de ante mano con una mirada silenciosa.
Mientras observaba a Rafe que daba de comer manzanas al cabello.
Tomando una aire se preparo para la pelea.
-Su majestad está muy radiante hoy – dije con voz calmada, irónica y sobre todo  nerviosa, Rafael siempre ha sido un hombre de gran altura, ojos de un color miel intenso  y cabello bien cortado todo lo que amaba de él era sus modales y su sincera manera de demostrar que me amaba  —  Escuche que el rey mando a decapitar a todo los empleados y me parece algo absurdo de tu parte, porque aquí nadie tiene la culpa de tu estado de animo.
Para meter mas la pulla en la ironía ella se inclino en una muy ordenada reverencia.
Rafael la miro con los ojos llenos de furia que no quería contener ni disimular, pero en el de esos ojos estaba ese asombro y emoción al ver la hay frente a frente.
-Me parece un descaro de tu parte, cuando eres la razón de todos mi problemas.
-Y tú eres la razón por la que tu hermana y gente del palacio vienen a mí a molestarme, me parece de mal gusto aun cuando saben que hace tiempo deje de ser parte del servicio  ¿lo haces a propósito?- Lo acuso.
Sus ojos captaron rápidamente como su  mano derecha se apretó en un fu puño sobre la fusta Rafael dio varios pasos hasta estar muy cerca de su rostro.
Error sus majestad mi corazón ya sufre por verle en este estado
Pero el no necesita saber eso, porque seria aceptar sus sentimiento el uno por el otro y eso era algo que no podían hacer o al menos ella no lo aria.
No ahora.
Nunca, jamás.
-¿Te divierte? Elena te llena de vida ver a una persona sufrir por la mujer que ama.
-Me llena de dolor saber que no comes y le jodes la vida a todos h sabes que eso no puede ser así ¿Qué mierda quieres de mi, que mierda quiere que haga que me muera para que dejes de joderme?.
-Cuida tu boca – el grito fuerte que ella dio un paso atrás, sintiendo la humedad de sus ojos pero las contuvo para no caer.
Así que tomo una manzana y se acerco a otro caballo dando de comer.
-¿Qué? Te jode que diga malas palabras su majestad, eres el único ser que puede decir, hacer y joder como quiera la vida de otros.
-Pon fin a tus ironías, porqué no voy a discutir contigo estoy cansado Elena estoy cansado de esto… dime quien te trajo al palacio…
-¿Para qué? Para joderle la vida, hacer de tu poder y arruinar sus días.
-Elena  no me hagas castigarte…
-Ya no tienes ese derecho Rafael, ya no somos novio, ya no hay mas regaños ya no tienes autoridad sobre mi, Rafael, me fui deje el palacio y me fui….y con eso te deje a ti – su mirada me asesina al escuchar mis palabras – deja de joder la vida de todos  y vive tu vida
-Cállate. No te quiero escuchar…Owen – grito llamando a uno de los guardaespaldas – Sácala de aquí..
-Cásate, ten hijos…- No se detuvo y ahora la voz de Elena  era tan fuerte que todo podían oír.
-Dije que te calles — Grito fuerte pero aún así ella se acercó có  más aún  tanto que sus cara casi se podían tocar.
-Yo,  ya no quiero venir al palacio y no quiero que me llamen mas por ti, desde ahora – hablo fuerte para que todos  escucharan – Si el rey se vuelve perder,  pues no me llamen lidien con su trabajo y que rueden las cabezas de todo porque la  mia no se jode mas por tu culpa Rafael.
Rafe observo al caballo blanco, en lugar de  su rostro
-Nunca en la vida entenderé porque no puedes amarme Elena
-Te amo, lo hago…
-Pero tu..
-Pero yo Rafael, soy realista y esto no es una novela donde el rey y la pobre son felices para siempre esto es real y tú debes cumplir las leyes de tu reino porque estoy cansada de ser la mala del cuento y quiero por una sola vez ser la buena.
Llevo una mano a su rostro al ver la lagrimas de Elena pero ella se alejo al sentir sus dedos.
Odiaba mostrar su debilidad ante el, pero esto no solo le está doliendo a el, ella también sufría porque había mucho que los separabas.
-El rey puede cumplir las leyes junto a ti.
Su voz perdió fuerza y se volvio un susurro.
Su mano temblorosa toco sus labios haciéndolo callar.
-No, no  me puedo unir al hijo del hombre que tanto daño le hizo a mi madre — esa era la realidad de todo este dolor que los rompía a ambos.
Lo sentía por Elisa, por la gente del palacio, los guardias, por todos pero de ahora en adelante quería que lidiaran con el Rafe que tendrían que soportar de ahora en adelante.
Porque no era boba, sabia que las cosas en el palacio iban a convertirse en un infierno,  para su pobre padre.
A paso rápido para no dejar ver sus lagrimas frente a nadie se alejo por el pequeño  campos de los establo de palacio hasta llegar al auto que la había traído, luego se haber subido en este el carro se puso en marcha y al ver la estructura del palacio y   trato de enfocar un figuro a lo lejos cerca de la puerta pero lo ignoro pensando en los sirvientes que merodeaban por hay.
La alta figura que tenia ya un tiempo apartado y observando la discusión de su primo con la aquella chica.
Estaba gratamente sorprendido, puesto que aquella hermosa chica, era la chica que se había encontrado fuera del supermercado.
- Sebastián – llamo a su mano derecha y guardaespaldas
-    Señor.
-    Sigue ese auto y consigue su nombre y que relación tiene con el rey.

— Dio la orden que fue cumplida y esa misma tarde sobre el escritorio en su recamara se encontraba un pequeño informe de la señorita Elena Lofton.
- ¿ Que relación tiene ustedes dos? –  susurro mientras que con miraba el informe que había pedido de Elena, era tan linda la chica y lo llenaba de curiosidad quería tenerla en su brazos así sea por unos segundo otra vez y quería verla sonreír como aquella noche en la tienda cuando tropezó con ella.
Pero debía admitir que ver la junto a sus primo no le daba buen sabor de boca porque ya no quería nada que viniera no fuera pasado por las manos del gran rey.

Dice el dicho que el primer amor es nuestras alma gemela y el segundo  es el amor de su vida, la persona con la que estamos destinados a pasar el resto nuestra vida.
Dice la leyenda que el alma gemela es nuestro primer amor, sin embargo no estamos destinado a estar junto a esta persona para siempre, una vieja historia cuenta que muchas  veces el hilo rojo que une nuestros destinos se puede  romper si lo jalas muy fuerte  entonces llega lo que conocemos como: .
El amor de tu : Es la oersona que nos hace ver el mundo de diferentes  maneras, persona que no, nos daña, persona que valora y ama cada parte de ti, persona que  no jala del hilo rojo para no dañar el dedo al que está unido.Pero quién de ellos es mejor que el otro o quién de ellos romperá las reglas del destino.
El padre de Rafael les había dado una pequeña casa algo alejada del palacio en realidad era un pequeño lugar donde estaban las casas de la mayoría de los trabajadores y guardias de la mansión.
La suya era prácticamente la mas grande dando que el antiguo rey tenia mucho cariño hacia sus padres  también que para algunos lugareños era muy difícil pagar alquileres o comprar casa, para eso habría que trabajar mucho y en todo caso seria los nietos quienes disfrutara de todo esto.
Pero la verdad es que Elena sabía  que todo era una simple excusa para tener a su madre cada día más cerca.
El padre de Rafael y Elisa se había enamorado, de su madre al principio como estaba muy pequeña ella pensó que  ella no lo aceptaba porque era la mujer de padre pero con el tiempo se fue dando cuenta de que su madre y el rey se escabulle cuando su  papá no se daba cuenta pero ella  si lo veías.
Ese momento fue doloroso verlos  reír, jugar,besarse,llorar de placer cuando el la hizo suya, llorar de alegría cuando quedo embarazada y también de dolor cuando lo perdió, en silencio a sus 9 años le marco la vida.
Ver a su padre llorar en el silencio  de su habitación, no comer por la tristeza y la de presión la hizo odiar a la mujer que le dio la vida, solo odie momentos.
Todo lo que su madre  hacía con el difunto rey, daño no solo a ella, también a Rafael, Elisa y a todos.
Pero su dolor y agonía acabó cuando su madre con mucha emoción anunció  que era momento de dejar el palacio que fueran por una vida mejor solo ellos 3 ir a  otro lado a ser felices con su padre, para Kat fue la felicidad, quería irse de ese lugar donde comenzaba  a odiar a todos, quería irse y ser feliz con su familia.
Pero nunca hay finales felices.
Mama desapareció
Porque Annie había salido por las verduras y un dia no volvio mas.
El rey decía no saber dónde estaba su madre, puso guardias por todo el palacio para que la buscaran  pero su  madre nunca apareció, luego de días de búsqueda comenzó a pensar que su madre  se había ido sin ellos pero todas sus cosas estaban en casa.
La cabeza de Elena no dejaba de dar vueltas hasta que un mes después  jugando con Rafael en los pasadizos secretos del palacio, escuchó a alguien llorar, gemir y jadear, junto al fuerte sonido de palmadas así que esperando que Rafael la encontrará se alejó buscado la  fuente del sonido hasta que la encontró y no le gusto.
Porque aquella persona indefensa y atada a un cama era su pobre madre.
Su madre estaba atada a una cama de manos y pies, desnuda, a los pies de la cama estaba el padre de Rafael quien con un látigo le  pegaba hasta hacerla sangrar según él, era su castigo por huir de él.
Tiempo después lo entendió así.
Ese dia no pudo hacer nada, solo observo. Al dia siguiente regreso y su madre estaba sola, trato de quitar las ataduras pero fue intuir y luego unos pequeño pasos se escucharon presa del pánico su madre le pidió esconderse y así lo hizo.
Entonces fue testigo de todo el horror y sufrimiento que estaba sufriendo su inocente madre.
Su madre  estuvo encerrada en ese sótano las dos semanas que su  padre  planeó como sacarla luego de ella haber contado la verdad, fue violada, maltratada y lastimada física y psicológicamente.
Pero nada de eso la ayudo.
Porque Annie no tenia ganas de vivir.
Su madre se había  quitado la vida dos meses después lo sucedido y su palabras a su  padre fueron llenas de pena y dolor, dolor por la madre que dejaría ser, dolor por la esposa que nunca fue, dolor porque amor a un hombre toda su vida y ese hombre era el rey.
Pero entendió que para su madre aquél encierro le mostró lo que ella nunca quiso ver y  su corazón no podía aceptar aquel que la lastimó fuera el hombre que la amaba.
Su madre había  quitado  la vida un 12 de junio a las 2:35 de la tarde
El rey de quito la vida el 12 de junio  a las 3:00 de la tarde.
Ella lo hizo por pena y dolor.
El lo hizo por arrepentimiento de haber dañado la mujer que amo.
Quizás fue el destino, quizás el era el amor de su vida, quizá era su alma gemela.
Solo sabia que..el hilo rojo de había roto
Y todo se abia terminado para ellos.
Algo si estaba claro, las hermanas Moiras que dirigen los destino simplemente dejaron que cada uno tomara su camino
marcando así el camino de dos chicos que con los años se enamoraron y se entregaron tanta pasión, sin ver el pasado que poco a poco los fue atrapando en el odio y el rencor de lo que un día paso y que por mas que intentaron olvida no lo lograron, porque una vez visto el horror con tus propios ojos nunca vas a a olvidar la verdad.


Reglas Del Destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora