La Caída De La Princesa Al Atardecer [Dee Y Heavy X (T/N)]

"Corazones rotos"

HEAVY POV
Me levanté más temprano de lo que solía hacerlo en un sábado, pero no me dejaba dormir la sensación de sus suaves labios, cada vez que cerraba los ojos esa sensación, esa imagen volvía a mi cabeza una y otra vez, aún no podía creerlo.

-¿Que mierda? ¿Te caiste de la cama?- Pregunta Dee burlón mientras lo veo entrar a la cocina.

-Digamos que hoy es un día particularmente agradable, el cielo despejado, el sol reluciente, los pájaros cantan y mi aliento matutino huele bien- Dije soplando en mi mano para después olerlo pero hice una mueca de asco al comprobar que no era así.

-Poético- Dice sarcástico mientras pone a calentar agua.

Me servi cereal en un tazón y después la acompañe con leche, pero de pronto la volví a recordar; sonreí bobamente pero la voz nasal de Dee me saca de mis pensamientos.

-¿Que haces idiota? Ten cuidado- Se queja mientras se aleja de la barra a causa de que estaba derramando la leche.

-Oh carajo, lo siento- Dije rápidamente mientras tomaba un trapo para limpiar el desastre.

-¿Que te pasa? Estás muy raro y eso que apenas está iniciando el día- Dice con esa misma expresión despreocupada.

-... - Dudaba si contarle lo de ayer con (t/n)- Dee... ¿Volviste con Mika?- Pregunté ansioso.

-¿Eso importa?- Alza una ceja a la defensiva, a lo que yo solo lo miré intentando persuadirlo- No- Responde en un suspiro.

-¿Entonces porque has salido tanto con ella?- Pregunte con intriga y confundido.

-Porque podría ser...- Dice con seriedad. Al principio no entendí, pero por su expresión supe a lo que se refería- ¿A qué viene tanto interés por mi vida romántica?

-Quería asegurarme... De que te olvidaste de (t/n)- Respondí con seriedad.

El se sorprende y rasca su nuca con incomodidad, luego me ignora para hacerse su café matutino y sale de la cocina. Analicé un poco su expresión, no soy tan bueno como el en estos casos, pero necesitaba saber lo que el pensaba para poder dar el siguiente paso y pensándolo bien, lo haré.

Subí a mi habitación junto con el cereal, iba a desayunar mientras me vestía, no quería desperdiciar ningún segundo. Al terminar bajé a velocidad y como mamá se había llevado la motocicleta, tenía que ir a pie a los centros comerciales para buscar un regalo para (t/n) y pedirle ser mi novia.
.
.
.
.
.
.
.
.

Al día siguiente esperé la hora de recreo y ansioso aguardé en la misma mesa donde nos juntabamos para almorzar, aunque para mí desgracia Dee y Leonid venían con ella, había olvidado que ellos también se sientan aquí.

-Uff el de cálculo dejó mucha tarea- Se queja (t/n) mientras deja su charola en la mesa.

-Creí que te gustaba esa materia- Responde Dee tomando asiento.

-Que sea buena no quiere decir que me guste, me agrada más física porque son matemáticas aplicadas- Explica antes de darle una mordida a su manzana.

-Pues tu no le agradas al cálculo- Dice Dee soltando una risita leve, a lo que (t/n) le muestra el dedo medio.

-A mí me está gustando mucho la Química- Dice Leonid coqueto mirando a Dee, a lo que el solo lo mira con enfado.

Mientras tanto yo me quedaba callado buscando el momento perfecto para hablarle, pero entonces recordé esa frase que ví en internet: "no esperes el momento, solo hazlo perfecto".

-¿(t/n), podemos hablar un momento a solas?- Pregunté rápidamente.

-Claro...- Responde con extrañeza.