Capitulo 7: Las pruebas de la U.A

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En la ruidosa ciudad, donde normalmente siempre se escucha el barbullo de la gente o los autos andando, se escuchaba golpes. Curiosamente, los golpes dependiendo contra que choca hacen distintos sonidos. Tambien afecta cuanta fuerza apliques en cada golpe. O tu grosor de tu mano.

En resumen, muchos factores influyen en el sonido que dan los golpes, y en el mejor lugar para escuchar una excesiva variedad es sin duda en un gimnasio. Pero no cualquier tipo de gimnasio, sino un gimnasio de boxeo.

Adultos o jovenes. Hora tras hora. Entrenando duramente para conseguir sus ambiciones, o simplemente aprender a lanzar buenos puñetazos. Pero, sin importar cual razon tengas para entrar y entrenar, sin duda sabes lo que enfrentas y te metes en menor o mayor medida en el mundo del Boxeo.

Los ruidos golpes de la cadena moviéndose bruscamente, el sonido seco del saco de boxeo siendo golpeado una y otra vez con extrema brutalidad o precisión. Los peleadores por unos momentos detendrían su entrenamiento y verían impresionados a un joven pelirrojo.

Sus ojos eran del mismo color  que su pelo, tenía una extraña dentadura puntiaguda. Como es algo comun, no tenia una camiseta mostrando su bien trabajado fisico el cual estaba bastante bien marcado para ser de su edad. 

El se encontraba haciendo algo tipico y basico, golpear el saco de box....pero la fuerza y velocidad de sus golpes eran simplemente increíbles. Y pensar que solo habia empezado a boxear hace 7 meses.

El entrenador era un hombre de avanzada edad, pero aun asi, mantenia un excelente estado fisico. Llevaba una remera negra ajustada y manga corta, haciendo notar aun mas su buen trabajado cuerpo.

El era Max Trevor. Un ex campeon nacional de peso mediano. En su edad dorada lo conocian como la Muralla Increbantable, debido a que su estilo de boxeo era el mas dificil para los boxeadores y era el infighter. basicamente era el mas corto y donde los ganchos o Uppercut son el dia a dia, pero aun asi el jamas consiguio que le hagan un K.O. No por sus reflejos, ni mucho menos por su velocidad, sino por su absurda resistencia.

Aquel mismo hombre estaba viendo con una sonrisa orgullosa los puñetazos de Kirishima. Asi se llamaba el joven, Ejiro Kirishima. Un joven pelirrojo que tiene un gran talento para el boxeo, sin mencionar que posee una voluntad impresionante

-Bien. Suficiente Kirishima

Ante el llamado de su entrenador, el pelirrojo termino de golpear el saco. Aunque antes de eso, giro todo su cuerpo y dio un poderoso gancho rompiendo por completo el saco de box

-L-lo siento entrenador. Es que......querria golpear una ultima vez jeje

-ash.....es el tercero en esta semana, si esto sigue asi tendre que pedirte que me lo pagues

La cara de kirishima quedo en blanco, provocando la risa de sus compañeros y de su entrenador

-JAJAJA....Realmente avanzaste mucho en poco tiempo Kirishima. Y pensar que antes era un joven delgado, mírate ahora, todo un hombre

-Jeje-diria kirishima algo avergonzado sobando su nuca- Aunque aun me falta un monton....

-Sin duda se que llegaras lejos si te lo propones, pero ahora debes ir a tu casa, pegarte un buen baño e ir a rendir ese examen

-HAI!-



El pelirrojo no tardo tanto en terminar sus ejercicios matutinos para luego recoger sus cosas e ir a su casa. En el gimnasio. sus compañeros estaban charlando entre si hasta que uno se acerca al entrenador 

El legado del Monstruo humanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora