El legado del Monstruo humano

Capitulo 41: De vuelta a Japón

La cara de sorpresa es algo muy común de ver en los humanos, pero hay humanos que nace con la incapacidad de hacerlo, ya sea por su gran intelecto, su gran seriedad o por que son muy pero muy lentos e idiotas...

El caso del general Ryven es único, ese vejestorio fue general desde sus 40, un logro asombroso y en sus 30 años de servicio desde entonces jamás logro conocer la sorpresa, siempre sabia de ante mano que algo pasaría, siempre mostraba esa seriedad y terquedad, digna de un general de los EE.UU, y no de cualquier sector, sino de las Fuerzas Aeras Norte Americanas, la mas importante de todo el ejecito y mas cuando se enlisto la heroína Star And Stripes hace ya un par de años atras, múltiples veces los héroes por voluntad u obligación terminan participando en operaciones militares o en su defecto, trabajar junto a ellos como entrenamiento...

—¿Qué hizo que?—a pesar de tratar calmado, su vena en el cuello claramente denotaba su enfado

—La señorita Star agarro el caza B-2 junto con el joven Midoriya Izuku, de preferencia Izuku, quien salió del hospital hace dos horas..—comentaba el cabo que estaba encargado del mantenimiento, sus nervios estaban a full...Cuando la heroína se le acerco y le pregunto si había un caza libre no lo pensó tanto y de inmediato le indico cual y donde....pero ahora

—30 años....mas si lo que considero de lo que llevo vivo....y ninguna mujer mas allá de mi esposa me a sacado tanto de quicio y sorprendido de mala manera que esa maldita mujer—grito furioso. Por ahora el cabo andaba a salvo—Aunque...Ella es una idiota, nunca sabría tan rápido donde habría un caza libre tan rápido...a menos que—su vista furiosa se alzo al cabo que palideció

—Le juro que—no logro continuar al sentir sus rodillas flaquear y caer al suelo

—50 vueltas al campo, lavaras los cazas durante 2 meses y tendrás doble turno por los próximos 3 meses. Cada queja será un día mas. ¿Quedo claro?—comento sin ganas de recibir respuesta

—¡Señor, Si Señor!—afirmo furioso el Cabo, aunque también con tristeza, comenzando la rutina sin mostrar duda, porque sino seria peor

[...]

—¿No estarás en problemas al secuestrar una nave como esta?—comentaba con dificultad Izuku, mientras extrañamente, estaba parado en perfecto equilibrio en el caza que volaba a mucha velocidad

—Nah, soy una heroína y se tomar mis decisiones sin involucrar a nadie, tu relaja y yo nerviosa—comentaba sonriente Star mientras manejaba el caza

—Por cierto....¿como diablos estoy aquí de pie sin ser afectado por el viento?—comento con confusión Izuku, a pesar de no ser un genio, sabia que este estado no era natural...Mas que nada porque cuando salía volando por una patada de Bang sentía que el viento frenaba o aumentaba su velocidad

—Use mi quirk en ti, para que nada externo te ralentice, y a su vez, tampoco puedas soltarte del caza. Es algo solo útil para viajar así, pero es muy cómodo, ¿oh no?—pregunto curiosa, mientras aumentaba la velocidad

—Supongo

Luego de un tiempo de volar a máxima velocidad con el caza que fue tomado prestado unas horas por Star, Izuku finalmente llego a I-Island. Desde las altura se podía ver como claramente el edificio central seguía deplorable, el peliverde miraba sin emoción aparente los restos de una batalla, como también al agudizar su visión, logro ver algunas manchas de sangre que aun no se lograron borrar, eso solo provoco que sienta mas ira, hacia el y hacia Evan.

Star aterrizo y acompaño a Izuku al hospital donde estaban sus compañeros atendidos, Izuku mantenía una mirada seria, mientras que Star trataba de parecer mas amigable, claro que tener mucho mas músculos que una mujer promedio y ser bastante grande tampoco ayudaba, pero hey, ahí estaba la intención, ¿no?