y...si te llamo amor

capítulo 4

Antes de empezar me gustaría disculparme por no subir cap las semanas pasadas, estas han sido realmente difíciles para mi, he pasado de tener ataques de ansiedad en público hasta perder a una persona importante para mí. Durante esta semana puse mucho de mi para traerles un cap algo largo, los amo mucho <3

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Y ahí estábamos. Las palabras siempre lastiman, lastiman cuando vienen de personas que amamos, jode cuando aún sin saber el contexto de las cosas sacan conclusiones y entonces tu postura ante algo queda como si fueras de lo peor, ¿Cómo lo se? Bueno básicamente he pasado por eso muchas veces y a pesar de eso aún sigo queriendo a mi madre. Veras al llegar a casa por obvias razones bajé del auto, y si como dije antes mamá no se le vía muy contesta que digamos
-se puede saber donde mierda metiste tu puto trasero?-cuestiono apenas puse un pie fuera del auto
-emm...yyo...bueno hmm...- ni siquiera pude formular palabra alguna, sabia que si decía que falte a clases seria peor, en cambio si decía que venia llegando de clases se daría cuenta por mi balbuceo, básicamente estaba atrapada.
-buenas tardes señora Duran, soy Ben, un gusto
- y se supone que tu eres quien le paga a mi hija para que se prostituya contigo?- increíble, sabia que mamá era cruel, ¿pero llegar al grado de ponerme en esta postura? Ya era demasiado
-oh no señora, yo soy Benjamin Meyer, hermano menor de la dueña de la escuela a la cual asistimos Luna y yo.
- LUNA! ¿por qué no me dijiste nada?
-perdón mamá- dije cabizbaja, ¿Qué podía hacer? Solo tenía dos opciones 1 deja que me tratara como ella quería, 2 revelarme y atenerme a mis consecuencias, las cuales serian literalmente irme de casa
-como sea, ¿te gustaría pasar Ben? Y de antemano una disculpa por las molestias que te ha dado luna, le hemos dicho que deje de molestar a las  personas pero parece que no entiende
-Luna no ha sido ninguna molestia, al contrario yo he sido quien le pidió que me acompañara  a comprar, en fin, Luna nos vemos en la noche ciao- se despidió de mi con un beso en la mejilla, mientras que a mi madre solo con un asentamiento de cabeza, posteriormente se fue y ahora si empezaría la peor parte.
Ambas entramos a casa, al cerrar la puerta mi madre me proporcionó una buena cachetada, de esas que arden hasta el alma, no dije nada, siempre he creído que es mejor callar antes de hacer que las cosas se pongan peor, después de la primera llego la segunda, la tercera y por último una cuarta, mi labio estaba roto, y mis mejillas hinchadas por el impacto
-¡QUE SEA LA ULTIMA VES QUE TU ME DEJAS EN VERGÜENZA! Eres un maldito asco
-l..lo..siento...pe..perdón mamá
-lárgate a tu maldita pieza, que asco me das!
Subí corriendo las escaleras, y fue ahí cuando me permití llorar, no lloraba por dolor, lloraba por impotencia y enojo. Ahora me daría vergüenza ver a Ben o alguien de su familia gracias a este evento. ¡Dios!. Esta muerda dolía.
Después de eso no quise bajar.
El resto de la tarde me dedique a arreglarme para la cena de esta noche.
Tome un baño de alrededor de 30 minutos, esperé a que la hinchazón de mis mejillas bajara un poco para poder maquillarnos y así no se vieran los hematomas formadas en ellas, por desgracia mi labio roto no se podía cubrir del todo así que tendría que arriesgarme a ir así. Al final al decidí irme con el vestido azul de seda, me encantaba la forma en que se pegaba en las partes adecuadas, resaltando así mis caderas, al ser una persona de pocos pechos no se notaba la diferencia entre sí llevaba brazier o no. 6:30pm y lo único que me faltaba era terminar de acordar mi cabello, el cual lo dejé suelto.
Media hora más tarde mamá estaba gritando que un auto me esperaba abajo. Uuuuf! solté todo el aire que retenía mis pulmones en un tonto intento de tratar de calmar mis nervios. Y ahora si, baje las escaleras tratando de no tropezarme con mi vestido. En la puerta se encontraba un señor de edad media en u  traje negro.
-Buenas noches señorita Luna,  vengo por usted para la cena que tendrá con los jóvenes Meyer.-dijo el hombre apenas me vio, por mi parte solo le sonreí y salí de la casa, estúpidamente pensaba que alguno de los chicos estaría ahí, más sin embargo no fue así, el coche se encontraba vacío. Sólo el chófer y yo. MIERDA.
-La señorita Meyer se disculpa con usted por no venir personalmente por usted- soltó el señor una ves íbamos rumbo a quien sabe donde.
-No debería de disculparse, al final no le debo nada
Y así el camino se torno en un silencio absoluto. 25 minutos más tarde el coche se estacionó el restaurante de comida italiana, bajamos de este y posteriormente entramos.
-buenas noches Robert-saludo la recepcionista, que al mirarme lo hizo con desagrado -lo sentimos ya no tenemos espacio
-no necesita una reserva Julia es mi invitada-esa vos, esa que a pesar de ser ronca no dejaba de ser femenina, Si señores Ritta Meyer hizo acto de presencia-sabes ya no me eres útil estas despedida- una sonrisa cínica aparecía en su rostro ¡DIOS! Es que joder
-pe..pero señorita Meyer-
- Pero nada Julia, has tratado a una de mis invitadas de manera grosera, y eso que viene bien vestida, ¿Qué puedo esperar de un pobre vagabundo que pide un poco de comida? Además has demostrado que no tienes la capacidad de ser una buena recepcionista. YA YA YA desaparece-dijo sumamente calmada. Justo ahora reparaba como iba vestida, llevaba un traje rojo, el pantalón de la parte de abajo era un poco entubado por lo cual resultaba su figura, unos tenis casuales negros, la camisa iba abierta hasta la altura de sus pechos sobre su cuello una corbata desecha del mismo color de sus zapatos, y esperen llevaba..llevaba lentes! Joder que estamos en pleno restaurante en plena noche y ella seguía con sus lentes? Probablemente tenía alguna enfermedad en ellos y yo aquí criticándola-Vamos Luna la cena se enfría- tomo mi mano y me guió a lo que parecía un elevador y para mí sorpresa si lo era.
-¿Quién te golpeo en el labio Luna?           
-Eh?
-¿Qué quién te rompió el labio?
-Oh esto? No es nada resulta que soy muy torpe y me caí- me apresure a mentir antes de levantar sospechas
-Si claro y yo soy la virgen maría- soltó con sarcasmo.
-puede elegir creerme o no señorita, no le estoy mintiendo- MENTIRAAAA! Me grito mi conciencia, pues ambas sabíamos que no era así. No dijo nada, lo cual agradecí internamente. Por alguna razón Ritta tenía eso algo al que no le puedes mentir ¡Ja! ¡QUE dijo Ritta todos TODOS los Meyer que conocía tenían eso! A Ritta con suerte y pude hacerlo, mientras que Ben casi podía ver a través de mi. LLEGAMOS.
Era como la parte lujosa y exclusiva del restaurante, solo había una mesa para unas 20 personas, la cual se encontraba ocupada por los hermanos Meyer.
-Oh vamos, deja de ser mamona y quítate los lentes!-exclamo en lo que parecía ser español unos de los mellizos al cual reconocí como Kevin
-que te valga una mierda lo que hago con mi vida kevinsito- respondió esta en el mismo idioma, acompañado de el dedo corazón
-¡GENIAL! Que mamá viera como utilizan el idioma para insultarse- soltó el otro mellizo
-pero no lo esta-ahora quien hablaba era la misma gemela que quería matar a el chico en plena escuela
-ya cálmense! Hola Luna, toma asiento
-Gracias Ben
-Ya, hombre que empiezo a creer que te gusta Luna
-Sabes que le soy fiel a mi amor
-Amor que le tienes a lo que le cuelga entre las patas a Tommy
-Michelle!- Gritaron todos al unismo al escuchar lo que la chica dijo
-¿QUEE? ES LA VERDAD A BEN LE GUSTA TOMMY!
-ugh de verdad no se que te vieron mis papás
-me vieron lo buena que era matando-soltó como si fuera demasiado obvio
-YAAAAAA! Van a traumar a la pobre de Luna- hace falta decir que tanta información perturbadora empezaba a hacerlo.- pero mi atención recayó cuando Ritta empezó a reír, voltie a verla, ya no llevaba sus lentes y pude ver el por que nunca se los quitaba, tenía un ojo color azul mientras que el otro era mitad verde y mitad morado. Me permití perderme en ellos, estaba tan concentrada en ellos que no me di cuenta que ahora todos estaban en completo silencio
-terminaste de ver por que no me quito los lentes?
-lo siento-dije apenada
-Deja de andar disculpándote con medio mundo Luna- quería soltar otro lo siento pero vamos es que no se que decir, y como siempre el silencio fue la mejor opción.
Unos minutos después llegaron los meseros con la comida, la cena por si sola fue genial, cada uno de los hermanos Meyer se presentó, los cuales hasta este momento eran 8 y por lo que entendía faltaban un o una más, la verdad era que solo se referían como Jack, no tenía un sexo como tal, su explicación fue:
"Jack es Jack"
Durante que comíamos los hermanos soltaron con total descaro que eran parte de la mafia "MLD" y que por lo tanto su estilo de vida era estar rodeados de guardaespaldas, muertes y atracados constantemente y que estaban en la isla por asuntos personales. Simplemente demasiada información. Harley tenía razón al decir que no sería necesario describirme lo que le hicieron a Roy, y que ese destino o uno peor le pasaría a cualquiera que quisiera lastimar a uno de ellos. Y así todas aquellas interrogantes desaparecieron de mi cabeza.  Dijo cada quien se ganaba la vida como quería, y claro ellos no se la ganaban de la mejor forma pero aun a sabiendas de eso me daba igual, no era como que fuera a abrir la boca sobre quienes eran, y sobre todo no tenía un lazo con ellos como para que eso me afectará. ¿Verdad?
-Si me disculpan iré al baño- mencionó Ritta poniéndose de pie para entrar a un especie de cuarto, segundo después de entrar a este, se asomo y volvió a hablar-luna podrías traerme mi bolso por favor?
-Claro- me levante de mi asiento para ir a donde ella, entre a supuesto baño el cual resultó ser una pequeña bodega, en un momento rápido ella cerró la puerta con seguro, dejándonos a ambas ahí. Me acorralo hasta que mi espalda choco con una pequeña barra que había, lentamente me quito el bolso de mis manos, sacó un paquete de toallas desmaquillantes Y empezó a pasarlas por mis mejillas, para este punto me ayudó a sentarme sobre la barra
-qu...que haces?
-sabes Luna la vida es muy mierda como para que dejes que alguien venga a estarte golpeando-siguió  limpiando mi maquillaje,- es la última ves que te pregunto quien te hizo esto, si no me dices la verdad me veré en la obligación de secuestrarte e investigar por mi propia cuenta, así que dime ¿Quién te hizo esto?