capitulo 5

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quería salir corriendo de ahí, huir de esa pregunta, aunque también quería poder decirle a Ritta que quien me lastimaba era mi propia progenitora y que mi padre no hacia nada para defenderme, NADA. y a lo único que dedicaba era a decir que bebíamos entenderla, puesto que el estrés de que la isla no hubiera tanto trabajo la tenia mal.

realmente empezaba a dudar si era lo correcto que cada ves que terminaba mal en el hospital, mintiera solo para encubrirla, tenia que temar una decisión, de eso estaba segura pero el tiempo que Ritta me daba era muy corto.

para mi suerte Ben entro a la bodega, el cuerpo de Ritta cubría mi rostro, pero de forma que yo pudiera ver hacia la puerta

-Zur Hölle, Ritta, hör auf, Luna zu belästigen.(demonios Ritta ya deja de molestar a Luna)- dijo ben con una sonrisa en el rostro, para cuando se dio cuenta de mi estado esta desapareció, dejando ver la preocupación en su rostro, se acerco mas a nosotras  y saben creo que me apresure a decir que fue para mi suerte, por que lo que dijo a continuación hizo que mi piel palideciera -DIOS LUNA ¿esto lo hizo tu madre?-se acerco mas empujando un poco a su hermana -¿fue por que faltamos a clases hoy? Dios lo siento tanto, perdón- se puso a mi altura acariciando con cariño la zona afectada.

-no es nada Ben, trato de hacerle ver a tu hermana que estoy bien pero justo ahora estoy entre la espada y la pared, porque tengo que tomar una decisión- dije esta ves dirigiendo mi vista a Ritta.

-Бен, уходи отсюда и скажи ребятам, что есть важное дело, которое будет обсуждаться в зале заседаний дома, и чтобы приготовили машину, мы выезжаем через 20 минут. (Ben, sal de aquí, y diles a los chicos que hay un asunto importante, el cual se discutirá en la sala de reuniones de la casa. y que preparen el auto, salimos en 20 minutos)- aunque no reconocí el idioma, por el gesto que hizo Ben sabia que no había dicho nada bueno.- sabes, se que es difícil decidir si delatar a tu madre con un grupo de hijos de los mafiosos mas buscados pero lo que hace ella no esta bien, o ¿acaso le has hecho algo malo como para que pienses que mereces eso?- la pregunta rondaba por mi cabeza 

¿realmente merecía eso? o ¿solo era por ella que me hacia eso? ¿merecía que yo la siguiera presionando? esas y muchas preguntas rondaban por mi mente.

el semblante de Ritta cambio a uno que mostraba...mostraba cariño? realmente todo esto era nuevo para mi. 

-ven- dijo extendiendo su mano, la cual tome y me jalo sin mucha fuerza y me abrazo, al ser mas alta que yo su cabeza se sostuvo en la mía, el abrazo era cariñoso, sin ser sexual, solo era un abrazo que te transmitía que todo iba a estar bien, hizo caricias en mi cabello y solo entonces llore y llore, me aferre a su cuerpo, las lagrimas salían por si solas, y los hipidos se empezaban a escuchar, no necesitaba que digiera algo, solo me abrazo con mucho cuidado, como si temiera que me fuera a romper. 

Espero a que me calmara un poco, pero en ningún momento me soltó, solo éramos ella y yo, sin nadie mas. Permanecimos así hasta que uno de sus hermanos abrió la puerta

-disculpa Ritt, el auto ya esta listo, pero supusimos que seria incomodo ir todos en uno, así que Robert nos llevara a nosotros y Alex vendrá por ustedes, las esperamos en la casa, nos vemos- se despidió y salió de la bodega.

-bien lu vamos

-pero...a donde vamos?-pregunte un poco preocupada 

-a casa- respondió simple.

esta ves no salimos por la puerta principal. Salimos por el estacionamiento, donde un señor de mas edad del otro chofer, pero sin ser tan viejo, nos recibió, supuse que ese era Alex.

-Buona sera, signorina Meyer, la macchina è pronta. Andiamo.(buenas noches señorita Meyer. el auto esta listo. Vamos)- dijo el señor. 

-grazie Alex

subimos al carro y el silencio que había era raro, ni siquiera era incomodo, algo que nunca había sentido, por lo general cuando el auto de papa quedaba en silencio era uno incomodo pues lo mas seguro es que hayamos discutido, pero en este momento el silencio me permitía pensar en todo lo que acaba de pasar, lentamente me recosté en el hombro de Ritta, debo admitir que pensé que se quitaría, pero al contrario ella se acomodo a forma de que yo quedara sobre su pecho, y me empezó a hacer caricias en mi cabeza, transmitiéndome la paz que necesitaba.

-Eccoci qui, signorina, dove vuole che parcheggi la macchina?(hemos llegado señorita, ¿en donde quiere que estacione el auto?)

-al cancello 5 va bene Alex, grazie mille.(en la puerta 5 esta bien Alex, mucha gracias)

Estaba tan ida que  ni siquiera le preste atención a la estructura de la casa, el auto paro enfrente de unas puerta de color blanco con detalles dorados, una puerta para nada chica, al contrario era como para que pasaran tres personas sin dificultad alguna. 

Si me sorprendió una simple puerta, la casa por dentro mejo a punto de un infarto. El diseño era entre  elegante clasicismo y rustico, puesto que una gran parte  de ella tenia ese toque elegante. mientras que el piso y otras parte eran de madera. 

caminamos por unos cuantos pasillos, pasando por demasiadas habitaciones, cada una de ellas con puertas y diseños distintos. Nuestra parada final fue una sala en el segundo piso, en un gran sofá se encontraba Ben, perdido en su celular, se levantó en cuant0o nos vio llegar 

-Ritt tu les dijiste a los malos de tus hermanos que no podía estar en la sala de reuniones?-dijo con un pequeño puchero en su lindo rostro

-si Ben, se que eso te molesta, pero cuando sea el momento te dejaremos entrar, además ¿no quieres dejar sola a lu mientras nosotros hablamos verdad?

Ben solo negó con la cabeza en forma de respuesta-Ese es mi niño, ahora iré con ellos, y discutiremos algunos temas importantes cariño- con eso Ritta entro a una gran puerta color negro, dejándonos a Ben y a mi solos en esa gran sala.

-quieres ver una pelicula, mientras ellos esta ahí?

-claro, creo que eso me ayudara a despejarme un rato.

y así pasamos un buen rato hasta que el sueño se apodero de mi y me quede dormida en el sofa.


y...si te llamo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora