God & King ~Yoonmin~

1 capitulo

(MIN)
El semblante de mi rostro estaba más rígido de lo habitual. Tanta parlamento por parte de quince los presentes comenzó a darme jaqueca. Si no alegaban de una cosa, disputan por la otra, y al fin a cabo su guerra no tenía un final. Mis ojos rodaban direccionalmente en cuyos labios arrugados, secos, y ajenos que se turnaban en dar su opinión.

Solo se oían ellos mismos, como si se hubieran enamorado de sus propias voces, y también por el hecho de no tomarme el privilegio en decir absolutamente nada durante media hora que llevamos aquí. Extrañados por lo callado que me encontraba, como si aquello fuera suficiente motivo para cerrar sus bocas, cansados de parlotear, giraron sus vistas para verme.

-¿Majestad?-

-¿Ya terminaron?- la diferencia de mi tono resalta entre la de ellos. Ninguno dijo si, o no, sólo asintieron- ¡Bien!- junte mis manos- Les diré lo que pienso- mi tardanza en decir lo que pensaba impacientó a muchos de mis consejeros reales. Estos ancianos estaban acostumbrados a prácticamente ordenarle a mi difunto padre, pero conmigo todo es muy diferente, y es precisamente eso, lo que no soportan de mi a pesar de que soy su rey- La obra seguirá en pie..

-Pero alteza...

Muchos de ellos se levantaron de sus asientos. Abrieron sus párpados, se mostraron indignados, contradictorios, e irrespetuosos con mi decisión..

-PERO NADA- bufé. Al resonar las palmas de mis manos contra la gran mesa alargada, los vejestorios volvieron a depositar sus traseros en las respectivas sillas- ESTOY HARTO DE QUE SIEMPRE ME REPITAN LO MISMO, UNA, OTRA, Y OTRA VEZ. EL DIOS JIMIN NUNCA SE MOSTRARÁ ANTE MI, PORQUE SENCILLAMENTE EL NO EXISTE...

-MUCHACHO TERCO E IGNORANTE- ni el le primer ministro se toma tanta osadía como lo hace el concejal más viejo. Nuestras miradas se cruzaron, mis manos aún estaban puestas sobre el madero mientras el sostenía su peso con ese jorobado bastón- ¿Como puedes decir que el "padre tierra" no existe? No es un mito, Min Yoon Gi. Atiende el concejo de este viejo que fielmente te ha acompañado en cada paso que haz dado- con pasos de tortuga se fue acercando a mí- Jimin en estos momentos debe de estar muy enojado contigo. Le has destruido por completo un bosque, con la absurda ambición de que tu terreno se extienda. Te recuerdo que nada de este mundo te pertenece..

-YO soy el rey- volví a recordarle con voz grave. El concejal se sonrió, pero se revelaba más como burla que por felicidad ajena- MALDITA SEA- exploté- BORRARÉ ESA SONRISA CÍNICA QUE CARGAS, DE MÍ NADIE SE BURLA..

-Si no quieres que me burle, entonces deja de ser tan ingenuo- fácilmente contestó- Yoon Gi, mi rey. Prometo no volver a meterme en tus decisiones, pero si tu arrogancia te mete en aprietos, después no digas que te lo advertí.

-¡BASTA YA!- puto por su insistencia, fui yo el que terminé en salirle al encuentro- Espero que hayas lavado bien tus oídos, viejo, porque lo que te diré, solo lo oirás una sola vez- remarqué más mi ceño. El concejal de cabello blanco aceptó sin protestar- El padre tierra, NO EXISTE, pero lo que si existe soy YO, y el mundo que estoy pisando. Por lo tanto, YO PUEDO HACER CON LO MÍO, lo que se me plazca, ¿Te quedó claro?-

Un suspiro fue su única respuesta.

-¡INFORME, MAJESTAD!-

Giré entre mis suelas para atender el llamado urgente de uno de mis soldados. Se inclinó ante mí, esperó a que aprobara lo que tuviese que decirme.

-¿Qué sucede?- pregunté.

-Alteza. El príncipe Kim NamJoon de GWANGJU está aquí y lo espera en su trono, dice que le ha traído un regalo por su cumpleaños- enarque una ceja al oír aquello.

-¿Mi cumpleaños?- repetí confundido- ¿Acaso yo estoy cumpliendo años hoy?-

-¡Mi rey!- el ministro tomó la palabra- No quisimos celebrarlo porque a usted no le gusta. Pero hoy su alteza cumple 20 ¿Ya se le había olvidado?-