Atrapada Entre Dos Gemelos (PARTE ll)

Capítulo 14- Ver las estrellas

Días después...

Ya era tarde y Luciel finalmente logró bloquear temporalmente aquel sistema que se estaba infiltrando en su agencia, lo que le valió para ir a descansar en casa.

Regresó pero obviamente nadie lo recibió, ya que no tenía hora de llegada, y suponía que Mc y su pequeña estaban dormidas.

Se dirigió a la habitación con la ilusión de dormir un poco y recuperar un poco las energías que ya incluso las bebidas Pepper ya no tenían tanto efecto.

Abrió la puerta de la habitación y pudo ver a Mc despierta sentada en la cama.

Luciel?- dijo ella extrañada ya que no esperaba verlo.

Hola cariño- dijo Luciel dibujando una pequeña sonrisa en su rostro.

Mc le quitó la mirada no prestándole tanta atención, debido a la discusión que ambos habían tenido la última vez y que al parecer aún no se había hablado de eso.

Creí que ya estabas dormida....qué haces despierta?- preguntó Luciel mientras dejaba su mochila a un lado y comenzaba a quitarse la ropa para ponerse una más cómoda.

Yo......- soltó un suspiro- no es nada- dijo cortante

Luciel se dio cuenta de la tensión que había entre ambos, así que después de cambiarse la ropa se dirigió donde su esposa.

No creas que no me doy cuenta, puedo sentir que aún estas molesta por nuestra última discusión...- soltó él también un suspiro- no tengo mucho tiempo para descansar pero....quiero que hablemos sobre eso- dijo serio el pelirrojo

No creo que haya algo de que hablar, ese día fuiste muy claro y yo no pienso molestarte más.... Será mejor que duermas, no tienes porque perder tu tiempo valioso de descanso conmigo- dijo Mc desviando su mirada para no verlo

Amor....no te comportes así, entiende.... Ese día yo, estaba muy presionado, bueno...- se rascó la cabeza- lo he estado últimamente y no es fácil para mí, tú para mí eres importante y quiero que estemos bien, nunca serás una pérdida de tiempo, así que por favor disculpame por herirte- dijo Luciel tomando las manos de Mc

Mc se quedó en silencio sin responder a su disculpa.

Amor...mírame por favor, realmente quieres que sigamos así? Que tengo que hacer para que me disculpes?- preguntó el pelirrojo

Mc soltó nuevamente un suspiro y dirigió lentamente sus ojos a los de Luciel quién tenía una mirada de suplica.

Entiendo que estés ocupado con tu trabajo y que estas pasando por un momento horrible....pero realmente me dolió cuando fui atenta contigo y tú me despreciaste, yo sólo me preocupé por ti y eso no te importó- dijo Mc

Lo sé... Realmente soy un idiota, no es así? Mi dulce y querida esposa...te agradezco todo lo que haces por mí, nuevamente me disculpo- dijo Luciel

Lo voy a pensar....- dijo Mc mientras quitaba sus manos de las de su esposo para volver a acostarse en la cama e intentar dormir nuevamente.

Está bien cariño, descansa- dijo Luciel mientras le daba un beso pequeño en su cabeza, no siguió insistiendo ya que temía hacerla enfadar.

Luciel se acostó a su lado y ella se dio la vuelta dándole la espalda para no verlo, eso decepcionó un poco al pelirrojo, pero debía descansar, así que se acomodó y debido al cansancio exagerado en su cuerpo y mente, cayó dormido rápidamente.

Mc siguió despierta aún sin poder dormir.... Esa noche al parecer tenía un pequeño insomio, se levantó de la cama y salió de la habitación para dirigirse a el jardín de la mansión a caminar un poco. La noche estaba muy hermosa y la luna junto con las estrellas brillaban intensamente, se veía todo muy tranquilo y silencioso.

Mc dirigió su mirada hacia el cielo y de pronto escuchó los pasos de alguien acercarse a ella, rápidamente se volteó y supo de quien se trataba.

Saeran....- dijo la joven

Saeran la miró con una sonrisa y se acercó hacia ella, era una oportunidad perfecta para conquistarla nuevamente.

Sabes....me encanta como mencionas mi nombre en una especie de susurro- dijo el peliblanco

Me asustaste... Creí que estaba sola en este lugar, qué haces aquí tan noche?- preguntó la joven

Sólo digamos que estoy muy al pendiente de ti...pero me sorprende que estés en este lugar cuando el idiota está en casa después de mucho- dijo Saeran- por qué será?

Yo aún no he arreglado las cosas con Luciel... Además no es por él que estoy aquí, simplemente no puedo conciliar el sueño, así que vine a caminar un poco- dijo Mc

Saeran se acercó a ella y acarició su cabello entre sus dedos, romper la distancia entre ambos era lo que quería Saeran.

Sabes...te ves hermosa cuando estas excitada, pero a la luz de la luna.... Simplemente eres una diosa- dijo con un tono coqueto

Estas exagerando...- dijo la joven un poco avergonzada- nunca voy a entender porque te gusto tanto

Entonces sabes lo mucho que me gustas, cierto? Jaja- se río levemente el joven - yo....- dijo tomando el rostro de la joven para hacer que lo viera- yo tampoco puedo entender....lo único que sé, es que cada vez que te veo, quiero besarte, y hacerte mía- dijo en forma de susurro las últimas palabras.

Mc se puso roja ya que Saeran iba acercándose lentamente hacia ella mientras le decía esas palabras, hasta que él unió sus labios a los de la hermosa joven, iniciando un beso entre ambos, Saeran prosiguió y luego colocó las manos en la cintura de su chica, acercándola más a él, Mc comenzó a sentir aquellas mariposas en el estómago que una vez sintió por amor, era un momento muy romántico, Saeran era todo un posesivo pero cuando se trataba de ella, podía ser incluso hasta eso.

Los labios de Saeran lentamente fueron pasando hacia el cuello de la joven, la cuál tenía un poco de nervios al sentir los labios de él en sus zonas sensibles, pero eso la hacia sentir bien.

Saeran después de un rato finalmente se detuvo y ver el rostro de la joven le provocó una sonrisa.

Mc.... Quieres ir a ver las estrellas conmigo?- preguntó el peliblanco

Ver las estrellas?- dijo ella confundida- pero sí aquí las vemos perfectamente

Bueno, pero conozco un lugar mejor, sígueme - dijo Saeran tomando la mano de Mc para guiarla.

Saeran llevó a Mc a otro parte del jardín la cuál estaba muy escondida, pero en un espacio, había una manta colocada en el suelo, Saeran tenía todo preparado.

Ambos se recostaron en ella, y miraron las estrellas juntos. Pero Saeran era alguien especial y en poco tiempo ya la estaba besando nuevamente encima de ella.