Capitulo 11- petición directa

295 20 5
                                    

Saeran....puedo preguntarte algo?- dije mientras me acomodaba en su regazo

Dime- dijo el peliblanco quién se encontraba acostado en la cama que yo y Luciel compartíamos.

Por qué me deseas tanto?...es decir, soy ahora una mujer casada, tengo una hija, y probablemente tengas muchos problemas al estar a mi lado, por qué no decides buscar a alguien mejor que yo?- pregunté

Saeran se quedó en silencio un momento, estaba pensando que responder.

Y tú crees que eso me importa? Antes de casarte con mi hermano, tú y yo ya teníamos un pasado....no me gusta ser cursi, es ridículo.... Pero aún es un poco inexplicable para mí como es que alguien como tú logró llegar hasta lo más profundo de mi corazón, intenté olvidarte con ya sabes quién.... Pero no funcionó, yo ya no puedo ver a nadie más que no seas tú, hablo enserio, no existe nadie más para mí- dijo Saeran tomando mi mano y entrelazando nuestros dedos.

....aunque yo ame a Luciel?- dije esperando una respuesta

Saeran en un movimiento rápido ya me tenía bajo de él, era increíble lo hábil que era cuando se molestaba.

No seas tonta....tú ...tú sólo estas confundida, no sé cómo te has convencido a ti misma de que lo amas, pero tú jamás lo amarás como me amas a mí.- dijo el peliblanco

Yo sólo desvíe la mirada, indicándole que no estaba tan segura de sus palabras, Saeran estaba justo en frente de mí, pero yo aún seguía pensando en la pelea que había tenido con Luciel.

Te atreves a pensar en él ante mi presencia?- dijo Saeran con un tono de molestia.

Me sorprendía que Saeran seguía teniendo aquella habilidad para poder leer mis pensamientos a través de mi mirada.

Yo no puedo engañarte Saeran....- respondí simple

Saeran soltó un suspiro para luego soltarme y acostarse a mi lado, era obvio que estaba molesto y no lo podía ocultar.

De pronto mi pequeña comenzó a llorar así que me levanté de la cama y fui a calmarla entre mis brazos. Saeran observaba la escena muy detenidamente.

Mi pequeña al ver a Saeran quiso acercarse a verlo.

Eh? Quieres verlo?- pregunté extrañada

Me dirigí nuevamente hacia Saeran y coloqué a Haneul en la cama quién fue gateando hasta acercarse a él peliblanco.

Saeran....Haneul....al parecer quiere verte más de cerca- le dije al ver aquella escena.

Debe pensar que soy el idiota de su padre jugándole una broma- dijo desviando la mirada para no verla directamente.

Buu - dijo mi pequeña con una sonrisa- da ...da..- intentaba hablar

Haneul trató de llamar la atención de Saeran mientras se subía encima de su abdomen.

Oye pero que te sucede! Acaso te diviertes molestándome?- dijo Saeran

Mi pequeña parecía ignorar la molestia de Saeran, al parecer verlo enojado era divertido para ella, ver esa escena ni siquiera me enfado sino todo lo contrario, me causó mucha gracia y dibujé una sonrisa en mi rostro.

Te atreves a molestar al fuerte Saeran? Ya verás tú también serás castigada por mí- la amenazó el peliblanco.

Haneul le dedicó una gran sonrisa, al parecer le agradaba mucho la presencia de Saeran, Saeran por otro lado se sonrojó al ver aquella sonrisa tan parecida a la mía y al mismo tiempo tan inocente, que apretó los dientes y desvío su mirada, era como sí le molestase aceptar que mi pequeña le agradaba.

Haneul...ven con mamá- dije mientras la tomaba entre mis brazos.

Mi pequeña tenía hambre así que procedí a darle lo que quería, después de eso fui al jardín a jugar con ella como era costumbre con la única diferencia que Saeran estaba presente observándome de cerca siendo yo una madre, hasta que después de tanto jugar mi pequeña se quedó dormida.

La llevé a su cuna y la cubrí con su manta con todo el cariño del mundo, ella simplemente era la razón de mi felicidad.

Finalmente un poco de tiempo para ambos- dijo Saeran

Eh?- dije confundida

En ese instante, Saeran me tomó de la cintura para luego darme un beso apasionado, era como sí todo el día lo hubiese estado esperando.

Sae-saeran- dije entrecortada

Saeran tomó con una mano mi cabeza y la juntó más a la suya, realmente no quería separarse ni siquiera un centímetro de mí. Hasta que ambos nos separamos por falta de aire.

Mc....quiero tener sexo contigo- dijo mirándome a los ojos

Yo me ruboricé ante semejante propuesta, aún no me acostumbraba que él lo pidiera tan directamente.

Saeran me cargo entre sus brazos y me llevo hasta la cama, donde comenzó a desnudarme por completo. Podía ver como él también lo hacía en frente de mí y yo desviaba mi mirada debido a lo nerviosa que me sentía en ese momento.

Se puso a mi lado y con una de sus manos comenzó a jugar con mi entrada utilizando sus dedos.

Mmm - gemí levemente mientras me estremecía un poco.

Estas muy empapada....acaso lo estabas esperando?- me preguntó pícaramente.

Ahh Saeran- jadeé su nombre al sentir más movimiento en mi entrada

Saeran me silenció con un beso, sin dejar de estimularme, hasta que poco a poco se posicionó encima de mí, podía sentir su gran miembro cerca del mío y eso poco a poco me hacía perder la razón.

Ahh- gemí al sentir como él entraba en mí.

Él sin perder el tiempo comenzó a embestirme cómo sólo él sabía hacerlo, yo para sentirlo más profundo dentro de mí, lo rodeé automáticamente con mis piernas en una especie de abrazo, su sonrisa de victoria en su rostro era más que de satisfacción, le encantaba verme así y no podía evitarlo.

Eres mía - dijo para luego besarme el cuello- a partir de ahora tú y yo....recuperaremos el tiempo perdido, ya lo verás te haré muy feliz- decía el peliblanco con un tono seductor.

Saeran....- susurré su nombre

Esta vez seré un poco amable contigo, pero la próxima vez no me contendré demasiado- me advirtió Saeran.










Atrapada Entre Dos Gemelos (PARTE ll)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora