Double bunny [KookV]

07 🐰

Alrededor de un mes había pasado desde que Taehyung decidió dejar a Jungkook en su casa. No había podido entrar a la Universidad por falta de tiempo, pero había hecho un amigo cuando fueron a preguntar. Y tampoco estaba de más decir que gran parte del tiempo eran discusiones entre ambos chicos.

En este momento, Taehyung llegaba a su casa después de haber estudiado, trabajado y cuidado a su novia. Porque sí, resulta que está resfriada y tuvo que cuidarla.

Se tiró en el sofá y soltó un gran suspiro, ganándose la mirada de Jungkook.

—Conejito, ¿sabes cocinar?

—Uhh, no.

—Ah, mierda —pasó las manos por su rostro —No quiero cocinar, estoy taan cansado.¿Quieres pizza?

—Está bien.

Con una sonrisa se recostó de Jungkook y pidió la pizza.

—¿Y por qué tan cansado?

Se acomodó nuevamente quedando sentado frente a él.

—Hoy tuve exámenes, casi me despiden del trabajo y tuve que cuidar a Sana.

—¿Y nunca te has dado un tiempo para ti?

—No tengo tiempo, casi siempre soy yo quien ayuda y cuida a los demás.

—¿Y nadie te cuida a ti? - cuestionó acercándose al pelinegro.

—Uhm, nop —negó, para él ya era una costumbre cuidarse a sí mismo sin ayuda de nadie.

—¿Sabes qué creo?

Con cada palabra que decía se acercaba más al otro, quedando así a centímetros de su rostro.

—¿Q-qué?

—Que es tiempo de que alguien cuide de ti.

Al decir eso terminó por unir ambas bocas en un beso lento. Al principio Taehyung quiso negarse, pero terminó por ceder ante aquellos dulces labios que iban al compás de los suyos. En un movimiento rápido quedó sobre el regazo de Jungkook con las manos del otro en su cintura y las suyas apretando fuertemente los hombros ajenos. Se separaron por busca de aire, pero no fue impedimento para seguir con el beso. La lengua de Jungkook se encontró con la ajena y empezaron un dulce juego. Al separarse tomó el labio inferior entre sus dientes, sacándole un gemido a Taehyung.

—E-esto está mal —susurró.

—¿Por qué tendría que estar mal?

—Yo tengo pareja y eres un chico —dijo bajando la mirada.

—¿Mente cerrada acaso?

—¡Claro que no! S-solo...

—¿Te sientes bien con Sana?

—Y-yo, n-no lo sé.

—Déjame hacerte sentir bien —dijo antes de unir sus labios nuevamente.

_Ju-jungkook...

—Shhh.

Dejó las protestas de lado y se entregó a los labios del mayor. Las manos ajenas se paseaban por su cintura dándole una sensación nunca antes vivida.

—Te voy a matar, conejito.