“Dicen que en la vida todos tenemos un secreto inconfesable, un arrepentido irreversible, un sueño inalcanzable y un amor inolvidable”
MicaelaAbro los ojos por la luz del sol que entra por mi ventana dándome directamente en el rostro, como cada día suspiro molesta mientras me doy la vuelta sobre mi cama.
- Malditas cortinas – intento cubrir mis ojos.
Hoy como cada día despierto temprano, es lunes por lo que tengo instituto y mis ganas están en cero, literalmente.
El instituto es totalmente aburrido y no lo digo por los estudios, en realidad, lo digo por las personas. En aquel lugar todos son totalmente hipócritas, su amistad es solo por intereses más nunca es verdadera. Siempre buscan juntarse con los que más dinero tienen y en esta ocasión soy yo.
La amistad aquí es sinónimo de fortuna así que puedo decir que la única amiga que tengo es Kady, una chica que entró en el más prestigioso instituto de New York gracias a una beca, a la chica que hicieron a un lado por no ser de su misma clase social.
Vuelvo a suspirar antes de levantarme con miles de pensamientos en mi cabeza, mis líos personales y emocionales.Me dirijo a mi armario en busca del uniforme dejándolo listo en mi cama mientras me ducho rápidamente, al salir me empiezo a vestir. El uniforme es el típico de una colegiala, consta de una falda corta color negra, una camisa de mangas -hasta los codos- blanca con una corbata negra y las medias a las rodillas, si, típico uniforme de colegiala como había dicho.
Tomo mi mochila guardando mi celular y audífonos en ella, salgo de mi habitación dirigiéndome a la cocina donde encuentro a mi Nana Marlene terminando de preparar el desayuno.
- Buenos días – la saludo con un beso en su mejilla como todas las mañanas desde que tengo uso de razón.
- Buenos días – me sonríe – siéntese señorita, enseguida le sirvo su desayuno.
- Muchas gracias, Nana.
Me siento en una de las sillas que están en la isla de la cocina y observo a mi nana mientras prepara el desayuno, ella es morena lo que la hace lucir muy hermosa. Posee una cabellera azabache que resalta su tez y unos ojos oscuros como la noche. Nana es muy diferente a mi madre físicamente, pero a la vez algo parecida en su personalidad.Mi madre es una mujer increíblemente hermosa, con un carisma que alegra a cada una de las personas a su alrededor, es rubia de ojos claros puedo decir que heredé físicamente mucho de ella, a mi padre no me parecía casi nada físicamente, pero nuestro carácter es bastante similar, motivo por el cual siempre tenemos problemas, siendo mi madre la que más sufre con nuestras confrontaciones. Sé que aquello provoca peleas entre mis padres, pero prefieren hacerlo cuando no estoy en casa según para que no me entere. Ella es bastante unida a mi padre, aunque eso no significa que siempre esté de acuerdo con él en todo lo que decide.
- Su desayuno señorita. – dice Nana sacándome de mis pensamientos.
Coloca el desayuno frente a mí, comienzo a comer rápidamente observando la hora en el reloj de la pared de enfrente. Saco mi celular para escribirle a Kady y Luther que pasen por mí, se me hizo tarde para ir al instituto, no me gusta ir sola aunque tengo mi propio auto.
- Nana, ¿Dónde están mis padres? – pregunto al no verlos ni escucharlos por la casa.
- Salieron muy temprano, al parecer tuvieron problemas con un negocio y necesitaban resolverlo lo antes posible. – frunzo el ceño, ellos nunca han tenido inconvenientes en sus negocios, siempre hacen excelentes tratos y procuran que todo este en perfecto orden.
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ANTES DE TI (#PGP2024)
Teen Fiction¿Han oído de que no sabes cuando ni en que momento algo puede llegar a tu vida y cambiarlo todo? Llegar para realizar un cambio tan grande y significativo. Algo que al principio llegó inesperadamente para cambiarlo todo de un día para otro volviéndo...