Eternamente - Bajifuyu

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Narra Baji
Layla cortó la poca distancia que había entre nosotros y me besó, rápidamente me separé por la impresión.
Layla: Baji... Me gustas...
Quedé paralizado literalmente, no sabía que decir ni que hacer.
Layla era linda y es buena persona, no pasará nada si quiero ser su novio ¿no?
Ella sin dudarlo me preguntó si quería salir con ella a lo que yo acepté.
Narra Chifuyu
No encontraba a Baji, seguramente se fue con Layla. Decidí irme caminando a casa, necesito pensar.
Llegué a mi casa y me encerré en mi habitación, agarré mis audífonos y comencé a escuchar música, no sé porqué pero las canciones que escucho me recuerdan a Baji.
¿Debería decirle a Baji que me gusta?
Pues claro que no. Él es feliz con Layla pero yo quiero seguir siendo su amigo y creo que eso es lo que le molesta a Layla. Decidí enviarle un mensaje a Baji aunque Layla me amenazó. Baji respondió al segundo y me dijo si podía ir a hablar con él, por un momento sentí miedo por si estaba Layla pero igualmente acepté ir.
Caminé hasta la casa de Baji e iba a tocar la puerta pero Baji abrió directamente y me agarró de la muñeca. Llegamos a un parque y nos sentamos en un banco, Baji sonrió y comenzó a hablar:
Baji: Chifuyu, he encontrado a alguien que me hace muy feliz, creo que estoy enamorado de Layla.
Mi corazón paró de latir por un segundo, Baji es feliz. Hacía mucho que no le veía sonreír.
Lo único que hice fue mostrarle una sonrisa falsa, sentía ganas de llorar. ¿Porque me siento así? ¿Realmente estoy enamorado de Baji?
De repente comenzó a hacer mucho frío, tanto que hasta me abracé a mi mismo. Baji al notar ese gesto, se levantó y me ofreció su sudadera.
Me quedé mirando la sudadera por un momento hasta que la acepté. La sudadera era bastante grande, tanto que llegaba por mis rodillas. Baji y yo íbamos caminando en silencio hasta llegar a mi casa, técnicamente Baji me acompañó. Iba a quitarme la sudadera pero Baji dijo que me la podía quedar,
él se despidió y yo entré a mi casa. Me apoye en la puerta y comencé a llorar, a él le gustaba mucho Layla.
Me acordé de que yo tenía su sudadera, seguía oliendo a él. Subí corriendo a mi habitación y me dispuse a saltar de la emoción
¡Baji me regaló una sudadera! Me sentía especial, en el momento en el que Baji se levantó para entregarme la sudadera mi corazón latía fuertemente aunque ese momento fue un poco triste pero igualmente él me ayudo y aparte me acompañó.
De tanto saltar me entró sueño así que me dormí enseguida.
Narra Baji
Después de acompañar a Chifuyu hasta su casa, me fui directamente a la mía. Chifuyu se veía muy lindo con mi sudadera y eso que le queda muy grande. Al llegar a mi casa me dispuse a pensar en todo lo que había pasado en un solo día todo lo que había sucedido era muy irreal.