DAMIAN.
-Ven aquí.- repitió señalando sus piernas para que me acostara en ellas
-Hola bestia.- habló y me encontré con la mirada mas tierna que he visto
-Hola fresa.- sonreí
Comenzó a peinar distraídamente mí cabello con sus manos siguiendo con mis cejas y pestañas haciendo que cerrara los ojos al sentir su tacto, nunca antes me habían hecho algo igual y extrañamente lo encontraba placentero
-Verónica...- murmure después de un rato con los ojos cerrados
-Dime.-
-Si sigues así lo único que vas a lograr es empeorarme.-
-Se supone que es para que te relajes no para que te sientas peor.-
-No me refiero a eso.-
-Oh.- fue lo único que dijo
Desde que la ví entrar a la habitación con mí camiseta puesta sentí una sensación rara, de repente tenía muchas ganas de besarla y abrazarla pero no podía y el haber dormido con ella de aquella manera aunque fuese por unas horas no ayudaba en lo absoluto, la quería cerca, solo eso necesitaba
-No sabes cuánto me ha costado controlarme.- fuí honesto
-Yo...ammm.- detuvo las caricias
Me levanté de sus piernas y noté como tenía las mejillas ligeramente sonrojadas...estaba nerviosa lo demostraba jugando con sus manos, evitando mí mirada
-Hasta que te dejo sin palabras fresa.-
-Damián- intento decir algo pero la callé estrellando sus labios con los míos
El beso comenzó suave pero poco a poco fue subiendo de nivel al grado de quererla más cerca sentándola sobre mí, mis manos acariciaban sus muslos mientras ella tenía enroscados sus dedos en mí cabello tirando de él, sentía que me faltaba la respiración y estaba seguro que ella se encontraba igual sin embargo no nos detuvimos en ningún momento, sus labios parecían haberse vuelto una droga para mí desde el primer momento que los probé, la veía y no esperaba el momento de volver a besarla, me encantaba disfrutarlos a mi antojo, mordiendo, tirando de ellos, jugando con mi lengua en su interior, solo pedía que no se terminara, mis manos comenzaron a subir posandose firmes en su cintura cuando sentí que se empezaba a mover, probablemente para acomodarse mejor o quizás lo hacía inconscientemente pero a mí ya me estaba causando un gran problema
-Verónica...- jadee -Deja de moverte o harás que lo único que me queda de autocontrol se vaya a la mierda.-
Hizo caso omiso a lo que dije y continúo moviéndose sobre mí, sus manos dejaron mi cabello para bajar a mi espalda desnuda y nuca haciendo pequeños trazos, no me malinterpreten lo estaba disfrutando pero algo en mi comenzaba a dolerme amenazando con romper en pantalón, creo que está era la primera vez que alguien me ponía tanto con solo un beso y peor aún era la primera vez que me ponía tanto la presencia de alguien
-Debemos parar.- me separé elejandola un poco
-Yo se que piensas que fue un error de nuevo y lo siento yo me deje llevar de nuevo y...- la volví a besar pero está vez uno corto
-No hables, ni digas estupideces si te pedí que paráramos no es fue porque pensara que había sido un error.- trate de controlar mi voz -Es porque...si continuábamos así lo único que iba a pasar era...- intenté encontrar las palabras correctas pero al no conseguirlo preferí callarme
¿De cuando acá me detenía?.- pensé
-Vuelve a besarme.- pidió
-Verónica...El volver a hacerlo pondría en riesgo la ropa de ambos.- advertí
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TU y YO
Teen FictionVeronica está apunto de entrar a su último año antes de la universidad, decide pasar el verano con su padre, ¿Que podría pasar en dos meses?,¿Que pasaría si vuelve a ver al amor de su infancia?,ya no son unos niños por lo tanto no son los mismos. El...