Amado por un vampiro

Capítulo 6

Me levante muy feliz, hoy no había clases era sábado. Me di una ducha me lave el pelo me depilé, terminé de bañarme seque mi cabello con una toalla y luego procedía a cercarlo normal me puse un jeans negro, una camisa y una zapatilla, mi camisa me hacia notar mis curvas que estaban muy bien definidos.
Me coloqué un lindo collar, me puse mi colonia favorito de manzanas me había ondulado el cabello.

Vi la hora eran las 1:45 pm mire por la ventana que Yibo estaba ahí no sé qué tiempo llevaba esperándome me hizo una señal de que baje y así lo hice. Cuando iba hacia él vi cómo me miraba de arriba abajo le dije:

- Hola despierta.

Sonrió y abrió la puerta del carro.

Wang Yibo

- Joder tiene un cuerpo jodidamente perfecto.
Me cuestione a mi mismo. - No es momento para pensar en tus caprichos sexuales. - Me dije a mi mismo mientras no quitaba mis ojos de el.

Me subí al carro luego él hizo lo mismo, estaba vestido de negro como siempre con sus botas y su chaqueta de cuero siempre llevaba una camiseta que le dejaba su pecho descubierto.

Me quedé observando en silencio.

- ¿Qué me ves bonito?

- No te estoy viendo.

- Ah ¿No?

- No, pues como sabes que te estoy viendo si estás manejando.

- Tengo mis trucos para saber cuando me miran y además siento que me observas.

- Te he dicho que no.

- Lo siento jajaj no te vayas a enojar, y cuéntame cómo llegaste al orfanato que le pasó a tu padres.

- No lo sé, solo me dijeron que ellos habían muerto y que alguien me trajo en una noche de tormenta, tocaron la puerta y me dejaron tirado con una nota que decía "No tiene padres murieron" y con una cantidad de dinero que me servira hasta mis 18, ya después de ahí tendría que trabajar para el orfanato o irme.

- ¿Y los tuyos Yibo?

Antes de responderme vi como la expresión de él cambió como si no quisiera hablar de aquello.

- No tienen tiempo para su hijo.
Fue todo lo que respondió no dije nada pues no quería crear más mala vibra de la que se sentía en ese momento.
Llegamos al lugar era un paisaje hermoso habían muchas flores la brisa que hacía que mi pelo se mueva, había entendido porque era su lugar favorito simplemente era fascinante.

- waoooooo esto es increíble.

- ¿Por qué crees que te dije que este es mi lugar favorito?

- jaja, con esa fachada de Niño egocéntrico y engreído que te cargas jamás había imaginado que un lugar como este seria tu favorito.
El me dio una mirada coqueta y siniestra antes de responder.

- ¿Crees que me conoces pequeño?

- Nop, en lo absoluto.

Me tomo de las manos y me dio un beso muy tierno en ellas me sonrojé visiblemente y él lo noto.

Abrió la parte de atrás del carro sacó una canasta y una manta negra.

- Enserio Yibo, una manta negra.

- Si.

Dijo secamente mientras que yo rodé los ojos.
Nos pusimos a caminar un poco más, pues el auto no llegaba hasta el lugar en el que nos íbamos a sentar cuando llegamos pude notar que se veía toda la ciudad y era muy hermosa desde ese punto.