Levantemos un instante la mirada.
El oscuro vecindario dejó de estar vacío para siempre.
El silencio nunca volvió a estar tan callado.
Mientras en la roca azul se gestaba la hazaña, arriba, en el todo,
continuaba el vendaval de apoteósicos acontecimientos.
Esos acontecimientos que lejos de haberse detenido,
ahora se habían multiplicado en millones de chispazos y posibilidades.
Pasan las saetas de fuego con sus gélidas estelas y sus vicios.
Las apedradas vidrieras de la Luna y sus charcos de polvo.
El viento estelar arrastrando las semillas;
los ataúdes reflectantes.
Recuerden que aquí arriba nada amanece.
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Poemario Galáctico
PoetrySelección de poemas sueltos. Ideas acumuladas y palabras que van tomando forma en la mente del admin. Poesía huérfana de todo lo que conocías anteriormente, escrita para gustos especiales. Comenzamos.
