¿Mieczysław?

Capítulo 1

Las cosas con la manada no estaban en su mejor momento, no después de los acontecimientos con el nogitsune y que se enterasen de lo sucedido con Donovan.

Ya ninguno de sus supuestos amigos/manada se le acercaba, al principio Erica, Boyd y Isaac le hablan por mensaje o lo visitaban en las tardes para pasarla juntos, pero luego dejaron de hacerlo y Stiles no se molestó en impedírselo. Esto ya hace mes y medio.

Ahora, el castaño de ojos verdosos con algunos reflejos marrones, se enfocaba en utilizar su tiempo libre en entrenar su físico –que, aunque nadie lo creyera estaba bien mantenido. Su torso pálido y cubierto de lunares estaba marcado y definido, sus brazos y piernas tenían la cantidad perfecta de grasa para que sus músculos no sean grandes, pero si aguantaran peleas y carreras. En pocas palabras su cuerpo parecía tallado por los dioses, pero él se encargaba de esconderlo bajo ropa holgada y apariencia débil- e intentar volver al rendimiento que tenía antes de todo. Era difícil, ya no tenía ni la fuerza ni la compañía de antes, pero vamos que ha pasado por cosas peores como para darse por vencido ahora. Estaba cansado, sí pero no derrotado.

[...]

Eran alrededor de las seis de la tarde cuando volvió a su casa, tenía que preparar la cena para su padre así que sin perder tiempo corrió escaleras arriba para tomar un baño y quitar todo el sudor y suciedad que gano por entrenar en medio de un bosque. Porque a falta de opciones, el único lugar donde puede entrenar sin levantar sospechas y en tranquilidad es en el lado contrario del bosque a la vieja mansión Hale. Era bastante largo el viaje, pero valía la pena, con las pulseras de wolfbane y ceniza de cerval que le había entregado Deaton, podía meditar además de entrenar tranquilamente en el silencioso lugar.

Luego de bañarse y vestirse con sus usuales pantalones de chándal y una camiseta verde oscuro, se encamino a la cocina para comenzar con la cena. Desde los once años -luego de la muerte de su madre- que cocinaba para él y su padre, pero hacía ya tres años que cambio sus platillos no tan saludables por otros con grandes porciones de verduras y nada de carne grasosa y poco saludable.

Ni siquiera había llegado a ordenar los ingredientes que necesitaba cuando su teléfono vibro anunciando un nuevo mensaje.

"Loft de Derek en 20 minutos. No lleguen tarde"

Scott.

"Genial, chau buen día" pensó el castaño.

Desistiendo a preparar él la cena y cambiando sus planes por comprar unas hamburguesas veganas que había visto en un local cerca de la estación de policías, le mandó un mensaje a su padre avisándole que él le llevaría la cena al trabajo y saldría a una reunión con la manada. El sheriff ni corto ni perezoso le respondió;

"Cuídate y avísame si sucede algo. No dejes que te pisoteen.

Te amo."

Papá

Noah Stilinski era consciente de todo lo que sucedía en la vida de su hijo y lo frustraba no poder hacer mucho para ayudarlo. Nunca pudo ayudarlo o protegerlo como su pequeño lo hizo con él, porque cuando Claudia Gajos-Stilinski falleció debido a su enfermedad y el comenzó a ahogar sus penas en alcohol no importaba cuantas injusticias le soltara al pequeño castaño, este siempre se quedó a su lado ayudándolo y cuidándolo como si fuese un adulto. Se sentía un mal padre, pero intentaba remediar todo el daño que causo y eso era lo que más le importaba a Stiles.

"Lo haré, no te preocupes. Nos vemos en unas horas.

También te amo papá."

Guardando su teléfono en el bolsillo de la cazadora roja que traía puesta, se encamino hacia el elevador que lo llevaría hasta el loft del lobo gruñón que la manada acostumbraba a usar como cueva para sus reuniones.

Cuando corrió la puerta corrediza del piso revelando su presencia, todos los presentes se quedaron en silencio con su vista enfocada en cada movimiento del pecoso, decidió quedarse parado a unos pasos de la puerta, no tenía sentido acomodarse y ponerse cómodo. Él sabía que la reunión -al menos para él- no duraría mucho y tenía razón, su instinto nunca se equivoca. 

--Que bueno que por fin nos honras con tu presencia Stilinski. -soltó con burla Scott-

"Que mal que no nos honras con tu inteligencia" Stiles tuvo que poner de todo su auto control para no reír o rodar los ojos en conjunto a su comentario, pero si se permitió una pequeña sonrisa que era más una casi imperceptible curvatura de labios.

--¿Se puede saber a qué se debe la invitación de la reunión o se van a quedar mirándome?

--Ni que hubiera mucho que ver, eres más hueso que piel. -comento Derek que estaba apoyado en una de las paredes del salón.

--Pues esta bolsa de huesos te salvo de morir ahogado gracias a uno de tus betas. -le devolvió el castaño guiñándole un ojo. Sí, tal vez estaba jugando con fuego, pero él era una hoguera así que no se preocupaba-

--Como sea, hemos estado discutiendo sobre esto por un tiempo y llegamos al acuerdo de que no eres necesario en la manada, eres solo un humano débil al cual debemos proteger en todo momento además de ser un maldito asesino, por lo que estas fuera de la manada a partir de ahora. -la manera tan indiferente con la que Scott lo soltó si le dolió al pecoso, es decir, fue su mejor amigo por mucho tiempo sin mencionar que él consideraba una segunda madre a la del moreno-

--¿Eso es todo? Porque si es así tengo muchas cosas por hacer. -todos los presentes estaban sorprendidos, si ha de ser sinceros ellos esperaban lágrimas, gritos y algún tipo de escena patética de parte del humano, pero no, el chico frente a ellos se encontraba entero y sin rastro de lágrimas contenidas-

--¿Qué cosas? ¿Matar a todas las personas que se te crucen por enfrente? ¿Llorar por haber matado a tu propia madre? -algunos le sonrieron al alpha por su comentario y otros lo vieron sorprendidos pero lo único que puedo hacer el castaño fue mirarlo con desprecio, decepción y juntar todo su autocontrol para no acomodarle su quijada despareja-

--Cuida tus palabras McCall, y agradece que le tengo mucho amor a tu madre como para hacer algo contra ti, pero vuelve a nombrar a mi madre con tu asquerosa voz y no me detendré hasta que tragues tierra como en el pasado. -los ojos del pelinegro brillaron en rojo carmesí-

--Me estas amenazando pedazo...

Silencio.

Sus ojos dejaron el brillo sobrenatural y todos se pararon en alerta mirando hacia el pecoso.

Stiles no entendió porque lo miraban de esa manera, se escaneo a si mismo comprobando que todo estaba en su lugar, pero siguiendo la mirada de Lydia que era de las más cercanas a él vio que miraban sobre su cabeza.

"Que no sea lo que creo que es, que no sea lo que creo que es..." Rogaba mentalmente, pero sentía el poder corriendo por sus venas, levanto la cabeza ya sin miramientos encontrándose con el tridente tan característico de su "padre" brillando sobre su cabeza.

--¿No te cansas de cagarme la vida verdad padre? No puedes ser tan malditamente despreciable, carajo. -murmuraba con enojo Stiles, bajo la atenta mirada de los presentes.

"Esto está mal, muy mal"