¿Mieczysław?

Capítulo 10

Para cuando la caracola sonó, los campistas que estaban entrenando o haciendo sus actividades, salieron corriendo como una avalancha y en el proceso llevando a la manada con ellos, sino fuera por sus sentidos súper desarrollados hubieran terminado con varias heridas.

El grupo del castaño, en cambio, se acercaba al comedor con tranquilidad y entre charlas amenas. Stilinski estaba realmente agradecido de tener la bendición de Nix y ser lugarteniente de Tanatos, ellos aún no tenían mesa o cabaña por lo que podría usar la de Hades sin problemas, no había manera de que se sentara en la misma mesa que Perseo. Estaban esperando una guerra, no crearía una antes.

-¿Sabes que no puedes vivir a base de cajitas felices? -cuestiono el castaño al ver el plato frente a su amigo.

-Sí.

-Genial, ahora dame el juguetito. -sonrió estirando su mano y moviendo los dedos en una clara expresión de "trae pa' ca".

Guardando el juguete en su bolsillo pensó en su cena de esa noche (carne con aros de cebolla), se levantó dispuesto a dejar su ofrenda, sin ser consciente de que la manada seguía sus pasos.

-¿Podríamos hablar? -escucho a Scott detrás suyo.

-No. -contesto seco y sin girarse- Por Nix, Tánatos y Hera, gracias por intentarlo. -dijo mientras tiraba a la hoguera la mejor parte de su comida.

-Necesitamos tu ayuda. -Derek lo agarró del brazo antes de que se alejara.

-Tu nos trajiste aquí. -agrego Lydia, provocando que el castaño se soltara del agarre.

-Los dioses los quisieron aquí, reclámale a ellos, niña. -estaba cansado de siempre ser amable y servicial con quien no lo merecía, no sabía cómo terminaría todo y si ellos querían arreglar las cosas con él, serían quienes debían esforzarse.

La cena no pasó en mayores inconvenientes, la manada cada tanto le tiraba miradas de curiosidad o enojo a Stiles y Nico que hablaban tranquilamente sobre estrategias y la recolección de almas que harían por pedido de Hades.

-Quiero volver a casa.-declaró Liam.

-Oh vamos, esto es increíble, estamos rodeados de semidioses ¡Hijos verdaderos de Dioses! No seas bebé. -Isaac lo empujó amistosamente con el hombro.

-No es eso, es solo que... ellos vienen peleando por su vida desde hace años y hasta los que son novatos ¡Han peleado en guerras con dioses! Nosotros si no fuera por Stiles estaríamos la mayoría muertos. Si él u otro semidiós no aceptan entrenarnos, iremos directo a nuestra muerte. -concluyo Liam. Scott, siendo su alpha, lo veía entre indignado y enojado, sin embargo, la mayoría sabía que el cachorro tenía un punto.

[...]

A la mañana siguiente, luego del desayuno, todos los campistas se reunieron al grito de Quirón.

-¡Héroes! -había gritado el centauro, ocasionando la llegada del decenas de semidioses provenientes del todo el campamento- Sean bienvenidos a otra ronda de captura la bandera, para los nuevos y nuestros invitados, a quienes estoy seguro que saben de qué se trata el juego, me gustaría advertirles de seguir las instrucciones de sus compañeros de equipo. -solo los sobrenaturales fueron capaces de escuchar al hombre susurrar "así nos evitaremos muertes".

-¿Podríamos desistir de participar? -pregunto Scott, con tono usual que utilizaba para recordarle a Stiles que él era mucho más fuerte que el "humano"- Es que somos lobos, podríamos hacerles daño. -aclaro al recibir miradas dudosas.

Las sonrisas de ironía e siniestras que prometían un feo final para la manada no se hicieron de esperar. Ellos habían luchado contra dioses principales, y unos simples lobos que ni siquiera superan a los monstruos que enfrentan día a día se creían capaces de derrotarlos, ridículo.

-Si se creen tan capaces, deberíamos dejar que formen su propio equipo, nosotros nos separaremos como de costumbre. sugirió Nico, con su usual expresión de seriedad, pero los semidioses podían ver el brillo de diversión en sus ojos. Antes de que Quirón pudiera evitarlo, pues sabía lo pésima idea que era, Dioniso habló.

-Gran idea Nicolás, ahora vayan que no tenemos toda la vida.

Siguiendo las instrucciones, cada equipo fue por sus protectores y espadas.

-¿No deberíamos usar de esos también? -pregunto Isaac, siendo escuchado por el equipo al que pertenecía Stiles, el cual era liderado por Thalía.

-Son hombres lobos, unas simples espadas no les harán daño, o al menos, no demasiado. -sonriendo, le respondió el castaño.