O8

216 36 9
                                    

Nuevamente era lunes, Minghao y Junhui sentados nuevamente en aquella esquina de la escuela, Minghao con su almuerzo y Jun solamente observando a la nada.

Si bien los días siguientes Minghao sentía mariposas en la cabeza al imaginárse a Junhui más cariñoso con el, era un pensamiento que quería evitar y no podía, simplemente le gustaba y se sonrojaba.

—Te traje arroz. — Minghao rompió el hielo entre ambos, ofreciéndole aquel plato con una pequeña sonrisa. — No te preocupes, puedes pedirme comida cuando quieras.

—No tengo hambre.

El silencio nuevamente se hizo presente entre ambos, Minghao cabizbajo y escondiendo la mitad de su rostro en su suéter de cuello de tortuga.

—Minghao ¿puedo preguntarte algo? — Jun posó su vista en el menor fijamente. — ... Tú... ¿por qué estás acá en Corea?

Minghao se emocionó al escucharlo preguntarle algo.

—B-bueno... mi papá tiene varios restaurantes en China y por eso no está acá conmigo... mamá es manager de varios artistas coreanos y viaja mucho, vine a Corea por que en China es un poco difícil conseguir lo que quiero estudiar. —Minghao hizo una pausa volviendo a recoger sus piernas en sus brazos, sin darse cuenta se había vuelto a emocionar y a sonrojar un poco. —Actualmente mamá está de gira con una cantante entonces estoy aquí.

—¿Solo?

—No diría que solo, tengo más familia acá.... ¿y tu, Junhui? ¿como llegaste acá?

Otra vez ese silencio que tanto odiaba, su mirada pesada y su silencio, Minghao estaba apenado nuevamente y solo quería que la tierra lo tragara, se había olvidado por completo.

Después de unos minutos, El por fin habló.

—Llegué acá cuando tenía catorce. — Su mirada sería y sus brazos cruzados, hablaban mucho de su incomodidad.

Minghao en ese momento no quería preguntarle más, podía sentir como ese tema no le hacía bien.

—Yo llegué con quince... ¿eso quiere decir que cuando entré a la escuela también habías llegado al mismo tiempo?

—Llegaste un año después que yo.

—¡Somos casi iguales! — Esta vez los ojos de Minghao se iluminaron, le hacía bien hablar con Junhui, de repente se dio cuenta que por su entusiasmo, estaban demasiado cerca de distancia.

Por su lado Jun, no podría describir lo lindo que se veía Minghao tan emocionado y prestándole atención.

—¿Puedo algún día conocer a tu gatito? — El menor preguntó observando el suéter lleno de pelos gatunos que portaba Jun. — Te gusta mucho ese suéter.

"Es el único que tengo" Pensó Junhui.

La tarde pasó rápido, ambos decidieron no ir a clase y quedarse a platicar un rato, Junhui no era un tipo que hablara demasiado pero amaba a escuchar a Minghao contar cosas de su vida.

La hora de salida llegó y Junhui siempre llevaba a Minghao hasta su casa casi siempre, esta vez fue diferente ya que el menor después de una larga tarde y pocas horas de sueño estaba tomando una siesta sobre el hombro de Jun.

"¿Por qué me siento tan bien a tu lado? ¿Por qué no quiero deshacerme de ti? ¿Por qué me pareces alguien lindo cuando eres un peligro? ¿Por qué, Minghao?"

Esas preguntas atormentaban cada vez más a Junhui, Minghao era precioso y siempre era fiel a ese pensamiento, siempre lo observó y ahora que compartían más tiempo... solo quería estar con él aunque su propósito fuera otro.

Beauty & Beast [JUNHAO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora