Honey | Pehyan x Yasuda

02 | I need (you) a hug.

"I need (you) a hug"

》(Te) Necesito un abrazo《

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Había sido tan repentino que no tuvo tiempo de reaccionar. Él simplemente entró al club de manualidades que ya parecía ser su nuevo lugar favorito y la buscó con la mirada, se acercó a pasos largos detrás de ella y envolvió sus largos brazos alrededor del cuerpo de Yasuda.

—¿Hayashi-kun? —preguntó temerosa, por suerte el chico la buscaba después de clases cuando ella se refugiaba en la soledad del club, si alguien más del club hubiera estado allí seguramente estaría roja de la vergüenza porque Yasuda sabía que a Pehyan le daba igual si había o no había presentes para hacer de las suyas.

—No te muevas —le indicó el chico mientras ocultaba su rostro en el oscuro cabello de Yasuda— Sólo quédate así —algo en su voz le llamó la atención, quizás fue lo bajo que se escuchaba por primera vez o la tristeza que podía notarse en aquellas palabras.

Yasuda controló su respiración y guardó silencio, se mantuvo así quieta mientras el rostro de Pehyan seguía escondido en su cabello y aquellos brazos la rodeaban.

Cierto, dijo que le gustaba. Pensó, pero aquella situación parecía más de lo que se veía a simple vista.

Sin embargo, Yasuda no se movió. Por mucho que quisiera replicarle algo a Pehyan, sobre lo que sea, no se movió.

—Quiero matarlos —por fin, Ryohei se animó a romper el silencio que se había formado— Esos imbéciles no saben nada.

—¿De qué hablas? —su voz sonaba serena y calmada.

Sintió cómo el chico se aferraba más a ella en aquel abrazo.

—Alguien de la ToMan, uno de sus capitanes, murió el Halloween pasado en una pelea.

Yasuda sintió un nudo en su garganta, por lo que sabía los capitanes de la ToMan no eran adultos como se pensaba generalmente, eran chicos que rondaban su edad y la de Hayashi. El imaginar que un chico tan joven como ella había muerto le provocaba escalofríos.

—¿Era tu amigo?

—No era algo como eso —explica, hay cierto temblor en su voz— Pero era genial y pensó en la ToMan hasta el final.

—Ya veo —Yasuda lleva su mano hasta las de Hayashi que se encontraban entrelazadas en su abdomen, ella acarició suavemente los nudillos de Pehyan suavemente— Lo siento.

—Hay imbéciles que están hablando mierdas de Baji sin saber nada ¡quiero romperles la nariz! —exclamó furioso.

—¿No lo has hecho aún? —preguntó sorprendida conociéndolo cualquiera habría dicho que Pehyan ya había repartido puñetazos hasta para llevar.

—No. Te lo dije aquella vez, estoy tratando de no meterme en problemas en la escuela.

Oh. Yasuda no sabe porqué pero le emocionó la idea de que él hiciera algo porque ella se lo había pedido.

—No sé qué decir sobre lo de ese chico además que es una pena lo que pasó.

—Yo sólo necesito... un abrazo — en esos momentos a Pehyan no le importaba si estaba sonando cursi o como un idiota, solo quería ser sincero con lo que sentía porque aquella combinación de sentimientos le provocaban un malestar interno— Te necesito.

—De acuerdo —vaciló, aún no sabía como aceptar que empezaba a gustarle el delincuente del que tanto se quejaba, pero sabía que él necesitaba de un abrazo y de alguien en esos momentos.

Al parecer la necesitaba a ella.