_ Escrito_

208 18 7
                                    

Para aquel momento, el germano caminaba nuevamente a su propiedad, ya abría dejado el tan preciada comunicado que le ponía tan tenso y nerviosos, ahora su mente estaba algo mas relajada, pero eso no lo libraba de divagar en que pasaría cunado aque...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Para aquel momento, el germano caminaba nuevamente a su propiedad, ya abría dejado el tan preciada comunicado que le ponía tan tenso y nerviosos, ahora su mente estaba algo mas relajada, pero eso no lo libraba de divagar en que pasaría cunado aquel yanqui la leyera. Mas ahora debía dejar de discurrir en esos asuntos; ya que tenia otros dilemas que resolver, como descubrir que es lo que aquel ruso quiere dialogar con el, acaso seria algo de un nuevo tratado? o una nueva alianza ? o algo aun mejor, como una disculpa?; el tudesco tenia cierta preferencia con la ultima opción, pero bueno, lo que le fuera a ofrecer o proponer ,  esperaba a que fuese algo  positivo. 

. . .

Un chico de cabello colorado abria notado la llegada de la carta, algo que para aquel era nuevo, después de todo; solía estar mucho en aquel lugar y no solía llegar correspondencia, tal vez alguno que otro paquete, pero nunca correspondencia, así que aquello era realmente novedoso. El chico dejándose de rodeos levanto la carta y lo primero que hizo al tenerla en sus manos fue buscar el remitente; más después de que pasaran unos tres o cuatro segundos revisando no encontró nada, no había remitente al parecer solo se encontraba el nombre del destinatario, aquel que debía recibirla y el nombre era claro - 𝑬𝒔𝒕𝒂𝒅𝒐𝒔 𝑼𝒏𝒊𝒅𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝑨𝒎𝒆𝒓𝒊𝒄𝒂 - de cierta forma le sorprendía? o tal vez no? acabaría el dilema llevando la carta consigo a la habitación que usaba de oficina en casa el de cabello rubio. Cuando entro a aquella habitación se observaba a aquel americano concentrado en su computadora y alrededor del escritorio se veían algunas pequeñas pilas de hojas, seguramente eran aquellos importantes papeles que tratarían sobre nuevos proyectos, tratados eh informes de sus estados, ese tipo de cosas que llegaban a ser muy tediosas.

En aquella habitación tan silenciosa donde apenas se llegaba a escuchar el teclear que producía el de ojos azules se sumó una suave y algo susurrante voz, aquella correspondiente a la del canadiense.

Canadá: - Hey bro -

Hablo el pelirrojo en voz baja, ya que no quería desconcentrarlo por que lo podría  poner de muy mal humor. 

Usa: - Oh, hi Canadá, que se te ofrece? -

Hablo aquel con una voz algo monótona al darse cuenta de la presencia del de ojos de oliva.

Canadá:  - Rien de vraiment important, je viens de t'apporter de la correspondance  (Nada realmente importante, solo te traje algo de correspondencia.)  -

Dijo en una voz suave y sutil mientras se acercaba al escritorio del mayor, cuando ya estaba allí solo extendió su mano con el sobre dando a entender al americano que lo tomara. 

Usa: -  What ?,  Who ?- 

Pronuncio con cierta extrañeza que también se reflejaba en su mirada , la cual estaba dirigida a aquel sobre que sostenía el canadiense, después de todo no esperaba cartas o alguna cosa por el estilo.  

🌟🇺🇸•Ojos azules como el Atlántico•🇩🇪🌟 usagerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora