Las intrépidas aventuras del chaval pito en llamas y su novio el fósil viviente

➤ Capitulo 20: La formación Gran cielo nublado

✿ ---- Finalmente, encontramos el rastro de A-Jiu ---- ✿

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Xi Huai abrió los ojos para mirar a Chi MuYao a su lado, y su expresión no tardó en cambiar.

Se dio cuenta de que no era Chi MuYao quien ponía los pies bajo sus piernas, la culpa era de Yi QianXi, que tiraba de la túnica de Chi MuYao, tratando de apartarlo y alejarlo de ella.

Yi QianXi estaba tirando de la parte trasera del cuello de la túnica de Chi MuYao, el tirón hizo que el cuerpo de Chi MuYao girara hasta la mitad en sentido de las agujas del reloj, lo que provocó que sus pies tocaran sus piernas.

Su corazón se apretó al instante, y estaba tan extasiado que casi levantó a Chi MuYao para abrazarlo, de verdad esta vez pensó que había encontrado a A-Jiu.

Esta momentánea caída emocional lastimó su corazón, en la irritación puso su mano en su daga, odiando la idea que vino en ese instante de matar a estos dos.

Al notar su movimiento, Yi Qianxi también puso instantáneamente la mano en su daga, tratando de proteger a su shidi.

Usaba esta daga para cortar los cadáveres de bestias espirituales, asi que podía ser capaz de resistir uno o dos movimientos, entonces Yu Yanshu vendría a ayudarles.

El corazón de Xi Huai tuvo un momento de alegría, y al momento siguiente cambió a una furia asesina, Song Weiyue y Zong Sichen claramente lo sintieron, y se miraron de manera muy desconcertada.

Al final, Xi Huai no lo hizo, sino que se limitó a sentarse con las piernas cruzadas en su sitio, con su mirada baja mientras su pupila se movían, hablando para sí mismo.

Llevaba dos años buscando a A-Jiu, pero no había ninguna pista, y ni siquiera sabía cómo era A-Jiu en realidad.

A A-Jiu no parecía importarle en absoluto, no parecía querer encontrarle, y él era el único que le había importado lo que había pasado en esos años.

Pensar en eso le hacía sentirse mal, apretó sus puños hasta que sus venas se hicieron notorias.

Innumerables veces había imaginado el momento en que se reencontraría con A-Jiu, ensayando su forma de actuar una y otra vez, pensando en lo que haría para no entrar en pánico.

En realidad le costaba mucho darse cuenta que A-Jiu no quería volver a verlo...

Yi QianXi regresó a ver la mano de Xi Huai, y arrastró a Chi MuYao a su lado. Pero vio como su shidi que se atrevía a seguir durmiendo quería irse a lado de Xi Huai, asustada se apresuró a tirar de Chi MuYao de nuevo.

Este discípulo de la secta demoniaca tiene un temperamento excéntrico, un mal carácter y puede ser muy despreocupado en lo que hace.

Aunque una pelea estuvo a punto de comenzar hace un momento, Chi MuYao seguía durmiendo, Yi QianXi realmente lo admiraba.

La osa mayor gira y la constelación Shen aparece en el horizonte [1].

Un poco de luz clara penetró en la cueva a través de la barrera, la luz se refugió en las rocas proyectando una sombra de luz distorsionada.

Chi MuYao abrió los ojos y se levantó lentamente, todavía envuelto en su manta, miró a Yi QianXi, y noto que le estaba guiñando el ojo antes de girar para mirar hacia el otro lado.

El corazón casi se le sale del pecho después de mirarlo.

JiuJiu estaba de pie sobre el hombro de Xi Huai con mucho orgullo, frotando su mejilla contra él y piando.