veintidós.

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— no tengo todo el día, así que te recomiendo que comiences a hablar

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— no tengo todo el día, así que te recomiendo que comiences a hablar.

una sonrisa perezosa se abre paso en mi rostro cuando escucho las palabras de madison y me esfuerzo demasiado por no reír.

su cabello rubio luce sucio y está peinado en una simple coleta, además la enorme sudadera que está usando junto a sus leggings color gris me hacen pensar que se acaba de levantar de la cama, sumando el hecho de que no hay una sola gota de maquillaje en su cara y luce 10 años más grande de lo que probablemente es.

es gracioso porque hace 30 minutos me dijo por twitter que estaba trabajando y si no mal recuerdo su trabajo es modelar. Pretty Little Liar.

— la última vez que nos vimos tú hablaste y hablaste y hablaste, yo solamente me quedé callada y escuché todas las estupideces que salían de tu boca, ahora es turno de que tú me escuches a mí — le digo y la muy idiota se ríe.

— ay no, ya vas a empezar otra vez con tus cosas de "eres mala para jaden" — me dice y rueda los ojos. — por favor brisa, creí que las cosas ya habían quedado claras. el duerme conmigo y tú lloras porque ustedes jamás llegarán a algo, así es la realidad, dalo por hecho y busca a algún chico que te quiera así como eres, fea — madison se encoge de hombros y sonríe, yo bufo.

sé que lo que me está diciendo es con intención de molestarme, pero no me afecta en lo absoluto porque cuando vine aquí ya estaba preparada mentalmente, Quinton me advirtió que ella haría algo como esto.

— no tienes derecho a llamarme fea cuando tú sin maquillaje no destacas más que yo — contraataco sintiéndome de pronto demasiado segura de mí misma. creo que el verla así a "cara lavada" ha hecho que mi autoestima suba un poco, porque sin todos esos kilos de pintura que usa no luce muy bonita.

— me voy en quince minutos mas, te lo advierto — madison dice y clava sus ojos celestes en los míos. sé que está furiosa y lo estoy disfrutando.

— de acuerdo — murmuro y respiro profundo antes de iniciar mi discurso. — tienes razón en muchas de las cosas que has dicho, probablemente tener una relación con jaden hossler es una de esas cosas que se quedarán solo en mi mente y nunca serán realidad, quizás soy patética por gasta mi vida idolatrando a alguien que hasta hace dos semanas no sabía de mi existencia. pero, ¿sabes qué? tú no eres mejor que yo, tú tienes que esperar a que los hombres tengan calentura para que medio mundo te conozca, porque antes de salir con Caden conrique o Jaden no eras más que una simple modelo, una simple chica con un cuerpo demasiado delgado que se empezó a hacer famosa por dormir con personas del medio artístico, sé que conociste a jaden gracias a nick b, prácticamente le debes la cuarta parte de tu fortuna a él, ¿cuántos dólares tuviste que darle para que te lo presentara, mads?

— ¡,o voy a permitir que mi insultes de la manera en la que lo estás haciendo! — susurra furiosa mientras sus mejillas se encienden con un llamativo color rojo.

— no vengas a hacerte la digna ahora, todos sabemos lo que eres, una perra básica.

una brisa en miniatura se encuentra bailando alegremente justo ahora en mi cabeza y me siento genial, probablemente mi mamá no estaría muy orgullosa de mí si supiera lo que está sucediendo aquí pero trato de no pensar en eso para no sentir culpa.

— le voy a decir a jaden de esto.

— y a mí no me importa una mierda lo que hagas.

— eres una estúpida brisa, tú y todas esas niñitas de las "rockstars" — dice, su mandíbula se encuentra apretada con furia y sigo encontrando toda esta situación demasiado divertida. — me encargaré de que pagues, no sé cómo pero lo haré, las cosas no se van a quedar así.

— oh, no, no se quedarán así, aún tengo más que decirte — confieso mientras me encojo de hombros y una pequeña risita escapa de mí, madison me mira como si quisiera asesinarme. — te odio, me odias, así son las cosas y no van a cambiar. tú tienes a jaden y yo, bueno, yo tengo salud, pero ese no es el punto. lo principal aquí es que a pesar de todo jaden me sigue importando demasiado, y si te cité en este lugar es para decirte que si él termina con el corazón demasiado roto por tu culpa, un montón de chicas que en realidad lo queremos estaremos listas para hacerte la vida imposible, ¿de acuerdo? así que, si no quieres a jaden realmente todavía estás a tiempo para terminar las cosas con él y quedar en buenos términos pero, si lo quieres tanto como tú dices, entonces tienes que encargarte de hacerlo el chico más feliz del mundo. ¿entendiste?

— eres una idiota — la escucho murmurar muy bajo y me acerco más a ella. me acerco tanto que puedo notar una finísima capa de sudor comenzando a aparecer en su frente. ella tiembla.

— ¿entendiste? — le insisto, esta vez más cerca y ella asiente.

— entendí, maldita perra.

— me alegra que nos hayamos llevado tan bien — me burlo y ella pone los ojos en blanco.

mi cuerpo se encuentra lleno de adrenalina, me siento con demasiada energía y quiero gritar y correr para sentirme liberada, pero probablemente eso me haga ver como una absoluta loca.

— si no tienes nada más que decir, entonces me voy. No puedo decir que fue un placer conocerte, hasta nunca brisa.

los ojos de madison se clavan en los míos y noto cierta repulsión en ellos, hago mi mejor intento por lucir punk rock y ella termina suspirando y dando la vuelta para salir del lugar pero, justo cuando está por cruzar la puerta llamo de nuevo su nombre. ella no voltea a verme, pero sí se detiene.

— oye, madison.

— ¿qué quieres?

— tengo una última pregunta — le digo y una sonrisa se forma en mi rostro, mi sonrisa es tan grande que me duelen las mejillas. — ¿en realidad tienes diecisiete años, o eres mayor?

— ¡no tengo porqué responderte eso! — grita desde la puerta sin mirarme.

— ¡oh por dios, eres mayor! ¿"cuántos años tienes, mads? — digo y rio, soy una maldita. — ¿22, 23, 27?

— no soy mayor de treinta, brisa — dice finalmente, su voz suena tensa.

— ¡acabas de pelear con una chiquilla de dieciséis años! — grito y no puedo evitar soltar una carcajada, pero madison no se queda a escucharme, ella camina rápidamente en dirección a su coche y la veo encender e irse lejos, dejándome en medio del lugar riendo mientras las personas a mi alrededor me miran raro.

Tal vez extrañe a Madison.

madison. jaden hosslerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora