Una Segunda Oportunidad Para Nuestra Familia.

"Capítulo 5"

(Pov Kara)

No puedo creer aún lo que hizo. Se que ella no es así, tal vez, tubo un problema antes y se desquitó con aquella jovencita. Bueno, como hayan Sido las cosas, debo arreglarlo.

"Pero ¿Cómo?."

—¡Nia!— ella trabaja allí, seguro sabría algo.

Marque el número de mi amiga, pero no contesto. Intenté nuevamente y tampoco.

—Seguro está ocupada, le hablaré más tarde— me dije a mi misma.

Seguí con lo que hacía antes de que mi hermana me interrumpirá. Quería terminar rápido para ir a saludar a mamá y papá, quienes no sabían que había vuelto a la ciudad y a Alex, aunque no sé si Alex quiera recibirme.

Desde que me fui, ella no a querido hablarme, creí que ella sabría dónde está Lena, pero lo único que hizo cuando le pregunté fue, darme un golpe, gritarme que era la peor persona del mundo y que estaba avergonzada de ser mi hermana.

Se que también le afecto el echo de que me fuera, yo amaba y amo a Lena con toda el alma. Dejarla fue una de las cosas más dolorosos que e echo en mi vida, pero tenía que hacerlo, no quería lastimarla, yo debía cuidar de ella, Porque para mí, la familia es lo más importante. Se que después de todo termine por herirla, fue muy difícil para mí dejarla, pero prometí volver y arreglar todo, estuvo de acuerdo, o eso pensé. Dijo que me esperaría.

Es por eso que no entiendo el porqué Se fue sin decir a dónde y  porqué Alex me trata así. Ahora que podré verla en persona otra vez, le pediré disculpas y aceptaré que cometí un error al dejarla sola. Solo espero que quiera escucharme y ayudarme a encontrar al único amor de mi vida.

Un par de hora habían pasado ya, cuando mi teléfono sonó, al ver qué era Nia no dude en contestar.

—¡Nia!, Estuve llamando pero no contestaste—

—Siento no haberlo hecho Kara, estaba realmente ocupada —suspiro.— de echo acabo de regresar a Catco.

Dijo Nia, yo sabía que así era, todos estaban tratando de que todo quedará perfecto en la empresa, para que mi socio y yo tomaremos posición de ella la próxima semana, como lo había dicho Cat.

—Lo supuse, fue por eso que no insistí.

—Pero bueno, ya estoy libre. ¿Qué necesitabas?— pregunto Nia.

De fondo se escuchaba a muchas personas hablando y gritando, tal vez corriendo o alocándose por algo referente al trabajo.

—me gustaría hablar contigo, ¿Podemos vernos  en la cafetería que está a dos cuadras de Catco?—

Sería mejor vernos en persona, el bullicio de las personas del otro lado no me dejarían concentrarme, y todo es mejor en persona.

—Claro, ¿te veo allí en 20?—

—perfecto, nos vemos —

Colgué. Guarde mi trabajo y apague el computador, recogí los papeles y los puse en mi maleta. Tome mi saco y salí de inmediato de la empresa.

Subí a mi coche y me puse en marcha hacia el lugar acordado. Me tomo llegar allí, justo 18 minutos, no había mucho tráfico.

Entre a la cafetería y los recuerdos azotaron mi cabeza. Fue aquí donde vi por primera vez a Lena, lo recuerdo perfectamente. Era el 21 de mayo del año 1999, Tenía un vestido holgado, color blanco con flores de girasol estampadas, su cabello largo hasta los hombros y de un color negro muy llamativo, pero lo que más llamo mi atención fueron.. esos ojos, grandes, de un verde profundo en la oscuridad y claros con la luz del día, en ese entonces yo tenía 9 años. Visite esa cafetería todos los días por las próximos semanas, solo con la esperanza de volver a ver a esa niña.