Una Mariposa en Busca del Sol

Especial OVA#2: Una Mariposa Envenenada

—¡Bien! Es todo por hoy, Kamado-kun—

—Muchas gracias, Kanae-san—

La Finca Mariposa, un lugar en donde pueden atender heridos y que puedan recuperarse, ciertamente pocas personas lo conocen, pues el Cuerpo de Exterminio de Demonios no es reconocido por el Gobierno

Kamado Tanjiro y Kanae Kocho se encontraban en un pequeño entrenamiento, esto era para poder hacer el chequeo y fortalecimiento del Kamado, incluso para ver que tanto ha avanzado, Kanae era la encargada de entrenarlo, ya que fue una petición de ella, Tanjiro había aceptado con todo el gusto, ya que sería una buena idea ver la fuerza de una Pilar

—Haz mejorado mucho, Kamado-kun— decía Kanae sonriendo

—Muchas gracias Kanae-san, no habría sido posible si usted me enseñaba— dijo Tanjiro sonriendo

—No digas eso, esto ha sido por todo tu esfuerzo, espero muchas cosas de ti— volvió a decir La Pilar

Al terminar el entrenamiento ambos finalmente descansaron, Tanjiro y Kanae hablaban tranquilamente, esto ya era normal para todos, ya que ellos se llevaban muy bien, Kanae se había ofrecido a cuidar de Nezuko y Tanjiro, ya que desde el primer momento en que vio a ambos, sintió una extraña conexión entre estos dos, un humano que protege a su hermana demonio era simplemente increíble de ver

Kanae finalmente hizo sus labores, el día de hoy no tuvo misiones, así que probablemente le vendrían mañana, de todas maneras algo le inquietaba bastante, era como si algo le estuviera faltando, ella justo ahora se encontraba con Aoi, pues Tanjiro estaba jugando con las niñas y Kanao pronto llegaría, siempre le daba la corazonada de cuando llegaría esta

Tanjiro siempre sentía un olor bastante peculiar en Kanae, ya que de vez en cuando sentía una felicidad, a veces sentía un olor a tristeza, incluso miedo, Tanjiro no preguntaba nada a Kanae ya que no quería molestarla, pero realmente le preocupaba el que Kanae tenga algo así, ya que ella es una persona muy amable

—Me pregunto que es lo que estará pensando... Kanae-san es muy amable... Y linda...— Tanjiro al pensar en esto un sonrojo golpeó su cara y rápidamente quitó ese pensamiento

Tanjiro caminaba centrado en sus pensamientos hasta llegar afuera de la Finca Mariposa, la noche era bastante hermosa, mientras el Kamado pensaba, chocó sin querer con cierta persona, de quien estaba pensando mucho

—¡K-Kanae-san! Lo siento mucho— dijo Tanjiro nervioso sonrojándose un poco

—Ara~ Ara~ Kamado-kun— respondió Kanae sonriéndole a Tanjiro

Tanjiro aún con su sonrojo, la sonrisa de Kanae causó que su sonrojo aumentara más

—No te preocupes— decía Kanae sonriendo

—F-fue un accidente...— respondió Tanjiro nervioso

—Los accidentes no existen— dijo Kanae