𝐼 𝑊𝐼𝐿𝐿 // 𝐾𝐴𝑍𝑈𝐹𝑈𝑌𝑈

𝗡𝗼 𝗺𝗲 𝗱𝗲𝗷𝗲𝘀, 𝗽𝗼𝗿 𝗳𝗮𝘃𝗼𝗿.

—Baji, por favor, ¡resiste!-Exclamó alterado un joven de ojos celestes.- No falta mucho para que llegue la ambulancia, ¡solo aguanta un poco más!. -repetía aquel chico a un joven de cabello largo que yacía en el suelo.

La sirena de una ambulancia se aproximaba, las vivas calles de aquel lugar por un momento se habían detenido, se encontraba un silencio acompañado de murmullos, gente alrededor de aquella avenida contemplaba el terrible suceso recién ocurrido, un hombre de larga cabellera desangrando en el piso mientras un joven de complexión delgada lo sostenía entre brazos.

—¡CARAJO!, ¡¿POR QUÉ TARDAN TANTO?!- Con la voz entrecortada y ojos vidriosos quejaba el de cabello corto.

—Chifuyu... no te preocupes, todo está bien...- En un quejido soltó el hombre que reposaba en el pavimento.-No me gusta...verte así.

—¡BAJI-SAN!- Exclamó el joven de menor estatura.- no te sobre esfuerces, pronto todo estará bien, ¿vale?.-Le decía al contrario mientras se le escapaban unas cuantas lágrimas.

—No llores, Chifuyu, todo está bien... solo... por favor no me olvides ni el cuanto te amé.-Soltó con todas sus fuerzas el de cabello largo con una sonrisa.

La ambulancia que hace poco se escuchaba a lo lejos por fin se encontraba en el lugar a compañía de unas patrullas, estás anunciaban su llegada con unas cuantas luces de colores rebotando sobre el rostro de la gente, dándole una nueva esperanza al chico que permanecía hincado en el pavimento sujetando al hombre que parecía el merecedor de los servicios esa noche.

—Gracias al cielo...-Susurró el de menor estatura mostrando una pequeña sonrisa de alegría.-Todo estará bien, cariño.

Una camilla se aproximó a toda velocidad hacia ambos jóvenes mientras que el personal auxiliar de aquel vehículo les separaba al de ojos celestes del de cabellos largos, montando en la camilla al anterior mencionado. Después, una mujer de aspecto calmado se le acercó al de cabellos rubios preguntándole por lo sucedido y si conocía al hombre que trataban ahora mismo, aquel chico solo asistió evitando la primera pregunta.

Aquel rubio subió hacia el vehículo junto con el personal que llevaba al herido, y justo como llegaron le brindaron primeros auxilios al individuo en la camilla mientras que al contrario le indicaban que tomase asiento en el lugar junto a la puerta, este siguió instrucciones y se sentó en el lugar indicado, orando por el bienestar de su pareja.

—Baji-san, todo estará bien ahora...-Comentó el chico que se encontraba en el asiento del extremo de la ambulancia.-Por favor...resiste hasta llegar al hospital.

Una mujer de cabello rizado se aproximó hacia el rubio con un rostro muy alegre e iluminado, era la misma persona de hace un momento.—De favor ¿me podría contestar algunas preguntas?.

—Claro, dígame ¿que le gustaría saber?.-Contestó esta vez un poco más calmado aquel chico sentado en el fondo.

—¿Que fue exactamente lo que ocurrió?-Preguntó la mujer mientras se sentaba al costado del joven.

—Un hombre de baja estatura le dijo algo a mi pareja mientras caminaba junto a él, cuando menos sentí, el... le dió un disparo.-Al mencionar lo anteriormente ocurrido este apagó su mirada, el solo recordar aquel suceso le aterraba demasiado.

—Ya veo, siento haberle hecho recordarlo, tengamos la esperanza de que tu amigo se recupere.- Contestó la chica mientras le daba una sonrisa de compasión al contrario, este solo asintió y trató de relajarse un poco lo cual empezaba a conseguir, todo parecía marchar mejor.