𝗨𝗻 𝗻𝘂𝗲𝘃𝗼 𝗮𝗺𝗮𝗻𝗲𝗰𝗲𝗿

907 116 54
                                    



Ya había pasado más de dos semanas desde aquel incidente ocurrido en las calles de Shibuya, el joven que esa noche había sido víctima de presenciar toda aquella atrocidad en la cual se vio involucrada su ex pareja, había empezado a deprimirse sin tener ganas de hacer absolutamente nada.

Este había dejado de comer adecuadamente, alimentándose únicamente de comida chatarra cuando su cuerpo realmente se lo pedía a gritos, ya que el solo pararse a hacer algo de comer le daba pereza. Dormía casi todo el día y no hacía algo más que eso, pero presentaba mucho insomnio diariamente cada noche al solo recordar todo lo anteriormente sucedido, pues veía esos recuerdos como si los volviese a vivir haciéndole sentir un horrible escalofrío del solo acordase de aquella calidez que sentía mientras sostenía entre sus brazos a su pareja desangrada.

Hace días que este no se bañaba o aseaba su casa, teniendo así un evidente desorden por doquier, pero eso era algo de poca importancia para él en ese momento, lo único productivo que realmente le importaba hacer era alimentar a su mascota, después de todo aquel gato era todo lo que tenía ahora mismo.

\~\~\~\~\~\

Era lunes por la tarde alrededor de medio día, aún siguiendo en cama y sin hacer algo productivo, Chifuyu seguía con aquella rutina a la que hace poco se había adherido, al parecer planeaba seguir así hasta el fin de su existencia.

Ese pensamiento ya había pasado infinidad de veces por la mente de Matsuno, pensaba en como terminar con su existencia para así poder ir a donde Baji se encontrase en ese momento si es que había otra vida, para estar junto a él, pero, siempre al momento de intentarlo terminaba acobardándose por el miedo del que pudiera esperarle. Más que por eso, no quería hacer pasar por lo mismo que actualmente vivía a sus seres queridos.

Este de igual manera tras la muerte de Keisuke se había alejado de todo contacto con familiares y amigos, quería estar solo y así lo había logrado durante 15 días, pero para su mala suerte, ese día alguien se presentó llamando insistentemente a la puerta, se trataba de su antiguo mejor amigo Hanagaki.

Matsuno simplemente lo ignoró mientras pretendía no oír nada, no estaba de humor para recibir visitas, pero ese chico si que era persistente, ni porque lo había ignorado más de 20 minutos seguía sin marcharse, por lo que ya al estar molesto de lo ruidoso que era su amigo no tuvo otra opción más que abrirle.

-¡GRACIAS AL CIELO! CHIFUYU- Dijo con una sonrisa el joven esperando fuera.-No sabes como te he extrañado.

-¿Que haces aquí? Takemichi, siento la descortesía pero no estoy de humor para visitas.-Contestó el joven tras la puerta sin aún salir tras esta para recibir al contrario.

-Estaba preocupado por ti, eso es todo-Dijo el de ojos azules.-Bueno con tu permiso.-Sin preguntarle al contrato este se escabulló dentro de la casa.

-Pero yo no te he dejado ent-Le reclamaba el joven Matsuno al intruso pero fue interrumpido por este.

-¿PERO QUE RAYOS? Que desastre hay aquí-Quejó Hanagaki.

-Mira quien lo dice.-Dijo un poco molesto el de cabello rubio.-Simplemente no he tenido tiempo para trivialidades.

-Pero esto no es una trivialidad, Fuyu, deberías preocuparte más por tu salud, estar en este ambiente es...deprimente.-Mencionó el joven de cabello oscuro mientras contenía unas cuantas lágrimas.- Tu no eres así, el solo verte de ese modo... me pone realmente triste.

Hanagaki simplemente se acercó hacia donde su amigo para darle un fuerte abrazo con el propósito de hacerle sentir al contrario que no estaba solo, que lo tenía a él, realmente quería ayudar a su amigo a salir adelante, no toleraba verlo de ese modo cuando él era una persona muy alegre.

𝐼 𝑊𝐼𝐿𝐿 // 𝐾𝐴𝑍𝑈𝐹𝑈𝑌𝑈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora