White [Wang Yibo]

19. Hasta luego

- El río Han siempre ha sido hermoso ¿No lo crees?

- Habla la que recién supo lo que significaba "hermoso"

- Ante tus ojos ¿Qué es hermoso?

- ¿Hermoso? ¿De repente?

- Mmm... ¿No hay algo que te parezca hermoso?

- ¿Cuenta mi motocicleta? No, espera, recibí hace poco un casco edición limitada, eso sí es HERMOSO.

- Siempre tan materialista.

- Ps no me gustan mucho los ríos, así que el río Han no se me hace hermoso como tu dices.

- Hoy es una hermosa noche.

- No me asustes, suenas a esos personajes cuando están a punto de suicidarse, no me digas que.. ¿Enserio te vas a lanzar al rio?

- JÁ quisieras, viviré toda una vida disfrutando de cada detalle que ignoré en todos estos años de vida y encierro.

- ¡¡Esa es la actitud!! Es más, deberíamos viajar por el mundo, así conoces cada cultura, la comida, los paisajes, es más, has visto los distintos bailes que existen en el mundo? Son wow enserio!! Hace poco......

y así me perdí en sus sueños, en cada palabra suya, el chico frente a mi, el que se olvidaba que pronto debia decir "si" ante el altar, pese a que muchas veces me decía que no tenía sueños, que le daba igual casarse por amor o no, cada pequeña palabra que salía de sus labios con emoción, eran un lujo que agradecía tener.

- ¿Viajar? Lo consideraré, pero no creo que sea adecuado viajar con un hombre casado.

El brillo en sus ojos se apagó, me miró profundamente como si me regañara por mis recientes palabras, Wang Yibo debía entender que el matrimonio no es un compromiso cualquiera, el decir si ante un altar es el deseo más anhelado por los amantes.

- Gracias, por derrumbar mis expectativas de viaje en menos de 10 segundos.

- Pero podrías viajar con tu futura esposa, es más aprovechan el viaje y se casan en uno de los tantos países que visiten.

Ni yo entendía la gracia de mis palabras, aún si lo decía con buenas intenciones, veía en su mirada como si se sintiera cuestionado o si tuviera que elegir cuidadosamente que decirme y es que hasta hace unos minutos había confesado mis sentimiento hacia él y ahora hasta le daba ideas para su boda.

- Mi abuelo es un tradicional de primera, apuesto que quedrá una boda a lo antiguo, un vestido blanco aunque no haya pureza y yo diciendo esas mentiras de "prometo amarte en la pobreza, en la salud y bla bla bla"

- De tan solo pensarlo, suena romántico, aquel día, tú en traje, elegante, esperando en el altar, la iglesia decorada... - suspiro un momento, fijo mi vista en lo profundo del río - Aunque no pueda asistir.... Sabrás que te deseo lo mejor.

- No es un matrimonio de cuentos de adas y lo sabes.

- Pero tendrás a tu compañera por el resto de tu vida, eso es más romántico.

Sonrio tristemente recordando la escena donde ambos se besaban, mi corazón se oprime pero mi imaginación vaga tristemente en la escena de Yibo esperando en el altar con un traje negro, mientras yo camino con un vestido blanco.....

Solo yo podía estar riendo al lado de la persona que me rechazó en el mismo día en que lo hizo y hablando sobre su futuro matrimonio.

- Encontrarás a alguien que te enseñe el verdadero amor, alguien que cumpla con cada una de tus fantasías románticas....

No me atreví a verlo, solo sonreí.

Sentí como se sentaba en las orillas del río, dándome mi espacio, aquel pequeño momento en donde nuevamente caía en cuenta que jamás lo podría tener de la manera en que lo quería.

- Gracias....

Mi frase era larga, pero se detuvo, mis labios no querían decir más, mi lengua se sentía seca.

- Por enseñarme los colores de la vida....

No quería que mi voz se cortara, pero lo hacía, escuché como se levantó y se acercó a mí.

- Yo soy el que está agradecido contigo, pero también soy yo el que siente mucho haberte hecho sentir estos sentimientos no correspondidos, pagaré el precio por ellos aquel día en el altar... con la esperanza de que seas libre de ellos... tal vez en este momento, solo pueda darte esto.

y fue así como recibí mi primer beso, entre pequeñas gotas de lágrimas, con pleno viento cálido en el río Han.

Cuando sus labios se juntaron con los míos, sentí el verdadero dolor de saber que serían la primera y última vez que los tendría.

Cuando nuestros ojos se cerraron, solo éramos nosotros consoladonos, he aquí la rechazada, recibiendo su primer beso con el chico que la acaba de rechazar y he ahí el chico que se casará por deber, sin saber lo que realmente es el amor.

Tan desafortunado destino siendo olvidado por dos labios que se unen por primera vez.

Cuando ambos labios se separaron y nuestros ojos se abrieron frente a la realidad, simplemente había un abrazo que no tenía fin.

- ¿Qué se supone que estamos haciendo?

- No lo sé....

Así fue como nos despedimos la última vez que nos vimos.

Desde hace 2 meses no lo he vuelto a ver, después de ello me acompañó a casa, se despidió de mi con un "adiós" que recuerdo claramente como si fuera ayer.

Cada día solo pienso en aquel beso tan doloroso que me regaló, tampoco he sabido nada de Lay, supuse que vendría a buscarme, pero no lo volvió a hacer.

De pronto mi realidad y el señor destino me decían nuevamente
"no lo podrás tener"

Y yo solo me resignaba a pedir por su felicidad, tal vez ya estaba casado o simplemente se le hacía incómodo verme después de aquello, tantas eran mis dudas sin embargo el no estaba para aclararlas, era tan solo un "veremos".

Hasta que el señor destino decida reunirnos de nuevo.