Primera Página

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-Hola! Es sorprendente que estemos en el mismo salón! ¿Verdad? -trato de seguir su mirada mientras ella me evita y voltea su rostro, la sigo hasta su asiento, ella se ve un poco irritada pero yo no me rindo.

-Vete.....

La miro confundido y decido sentarme frente a ella, siento que esta temblando y es ahí cuando realmente pienso que he ido lejos, pero aún no entiendo. Porque.... Ella es así, alejada del mundo, encerrada en su propia nube.

-Por favor... Olvidame...

Veo su mano temblar y la cojo, ella abre sus ojos de par en par, le sonrió y el tiempo se detiene, ella ya no tiembla, está analizandome en secreto.

-Debes cambiar tu vida, te voy a ayudar. Después de todo, el mundo no es tan malo.

-Deberías alejarte de mi, devolver mi libro y hacer como si esto nunca hubiera sucedido- retira su mano bruscamente, mientras se apoya con la mejilla en el pupitre, su mirada ahora está en la ventana, es demasiado temprano. Supuse que ella vendría a estas horas para que nadie note realmente su presencia.

-¿Es bonito vivir sin que nadie te tome importancia?- a pesar de que me advirtió, sigo ahí, frente a ella en busca de respuesta.

-Supongo que el señorito lo tengo todo y todos me aman nunca lo sabrá -su ironía me sorprende y río por su sentido del humor, aunque no escuche ni vea ninguna sonrisa en ella.

-Pues si no me lo dices supongo que no lo sabré... Aunque hay otra opción--logro hacer que me mire- me dirás tu razón del por que quieres tu libro de vuelta, su significado o.. Yo te seguiré a donde vayas, seré como tu sombra. Es una idea genial ¿verdad? ambos salimos beneficiados!

Puedo ver su notable molestia, aun así escucho su afirmación.

-Entonces! ¿Nos vemos hoy en la biblioteca? Después de clases....

Asiente y me empuja, observo el reloj de la pared y me doy cuenta que pronto llegarán todos, el tiempo pasó demasiado rápido. Vuelvo a mi sitio y no puedo evitar voltear a verla de vez en cuando.

Las horas pasan y yo estoy emocionado sin saber la razón exacta, somos humanos con sentimientos, le doy esa única razón y me apresuro a guardar mis cuadernos.

Cuando la salida al fin llega, me apresuro a la biblioteca no sin antes darle una última mirada.

De pronto siento a las veredas como algodones de azucar, la gente luce feliz, con hermosas sonrisas en su rostro.

Felicidad que se termina al observarla sentada en plena biblioteca con otro libro en manos, siendo ignorada, apartada del resto, es la vida que ella ha está viviendo.

La vida que estoy por cambiar.

-Hola, llegué tarde -me mira sin importancia y sigue hojeando el libro que tiene en manos.

-Hola, supongo--me paralizó el escuchar su saludo, ella quien en la mañana estaba molesta por hablar conmigo, de repente me saluda.

-Estoy listo para escuchar tu razón- me acomodo y la observo detenidamente.

-Yo... No tengo ninguna razón- mi sonrisa se borra inmediatamente, interiormente me sentí estafado

-¿Qué? -Aún sigo plasmado y ella solo me mira, parece tan confiada que empiezo a creer que realmente no tiene una razón en específico

-Dijiste que dijera mi razón, pues no la tengo. Ahora devuélveme el libro- ella sigue hablando frente a mi y yo me pierdo en su mirada.

-¿por qué no me quieres decir tu razón?-mis palabras salen casi en un susurro pero ella me escucha claramente

-WangYibo, no trates de ser un super héroe, no todos somos víctimas y necesitamos tu ayuda. Al parecer tu ego es tan alto que te crees el Dios del mundo que puede ayudar a cualquier alma caritativa que llame tu atención, en todo caso ¿por qué no comienzas ayudándote a ti mismo? Me voy- las palabras salen como dagas, me siento confundido, sabe mi nombre y posiblemente sepa mi situación actual, en parte tiene razón, ¿por qué? Si ella se negó desde el primer momento ¿por qué sigo insistiendo?

Veo que se aleja lentamente y corro a toda prisa para llegar a ella antes de que abra la puerta, la señora de la biblioteca me advierte que está prohibido correr, me detengo cuando soy capaz de coger su mano, ella voltea lentamente y confundida es entonces cuando le estiró el libro, ella lo mira y luego me mira a mí como si se cuestionara.

-Te lo devuelvo- ella lo coge rápidamente y sale por la puerta, sin decir una última palabra.

De pronto me siento tan decepcionado, algo dentro de mi está triste, un vacío se abre paso, me pregunto interiormente si es que la use de excusa para huir de mis propios problemas, pero aun así ella no tiene el derecho de decir eso cuando su propia vida es igual.

Tal vez hoy no tuve nada que decir, pero no me daré por vencido, ya verás.

White [Wang Yibo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora