La hermana de Jinpachi Ego +18 | Baro x T/N | Blue Lock

8. Abandonada

(ESTE CAPÍTULO CONTIENE SPOILERS DEL ARCO DE LA SUB 20)

Mi hermano se fue de mi habitación dejándome sola para poder procesar las cosas mejor y que preparase las maletas, me iría justo antes del partido de la sub-20 así que para cuando ellos regresasen yo ya no estaría más con ellos. Una parte de mí deseaba que perdiesen, porque entonces al regresar todos se irían y no se preocuparían por mi ida repentina, pero en cambio la otra parte de mí deseaba fuertemente que ganasen y les demostrasen a todo Japón lo grandiosos que eran.

-A quien quiero engañar, ya aprendieron mucho de mí, ya apenas les sirvo para mejorar, no creo que se vayan a preocupar por mí... Jinpachi y yo los hemos convertido en unos maravillosos egoístas- Reí amargamente mientras pensaba en voz alta sobre ello.

Ese día pasó con normalidad, solamente acepté el reto de Isagi y Bachira, los cuales ambos acabaron derrotándome totalmente y me hicieron sentirme orgullosa de ellos e incluso estaban por escaparse algunas lágrimas de mi rostro.

¿-T/N estás bien? Tienes los ojos llorosos...- Dijo Isagi algo preocupado por mí. -Está llorando de felicidad porque somos los primeros en vencerla justamente- Decía contento Bachira mientras nos abrazaba a ambos.

-Si chicos, me alegré mucho de que lograseis vencerme. Mañana ya podré estar mucho más tranquila sabiendo que no sois tan pésimos- Dije escondiendo mi tristeza por separarme de ellos mañana sin despedirme.

Estuvimos un poco más de tiempo entrenando juntos y les di algunos consejos para el partido del día siguiente y cuando cayó la noche me dirigí a mi cuarto sin cenar para empezar a preparar las maletas, al terminar me tiré a la cama a llorar y acabé durmiéndome del cansancio.

Al día siguiente podía notar la tensión de todos en el comedor, estaban entusiasmados e impacientes, yo en cambio tenía una cara de póker mientras comía mi desayuno sola y al terminar me dirigí a mi cuarto, ellos se irían al autobús ahora para el partido y no me apetecía despedirme porque me pondría triste de nuevo.

Me quedé sola en el edificio, todo el mundo se había ido y mi hermano me había dejado un mensaje en el móvil diciendo que en 30 minutos llegaría un taxi a por mí. Llevé mis maletas y pertenencias a la puerta y empecé a escuchar música mientras esperaba al taxi, este no tardó en llegar y me subí para dirigirme al apartamento de mi hermano donde vivíamos antes del inicio del proyecto. Llegué y el taxista me ayudó con las maletas, le agradecí y se fue, ya que mi hermano había pagado el viaje previamente. Entré y fui a dejar las cosas en mi cuarto, llegó la hora del partido y me fui al salón a verlo. 

El partido empezó muy bien, el equipo de la sub-20 no se esperaban que fuesen tan buenos y Nagi les marcó un gol con algo de facilidad, después de eso el equipo oficial empezó a jugar en serio por lo que todo estuvo mucho más reñido. Me dolía que a pesar de ser parte de su gran mejora yo no podía estar allí para animarlos, aunque también sabía que ellos eran unos monstruos y lo podrían haber logrado incluso sin mí. Cuando estaba terminando la primera mitad del partido iban 1-1, pero Rin con su gran visión del campo atravesó a todos ellos y marcó el gol que nos daba la ventaja. Empezó el descanso y decidí ir a la cocina a hacerme un bol de palomitas para disfrutar el partido, realmente estaba entretenido. Cuando regresé observé que iban a meter a Baro al partido, mi corazón se apretó al verle, al recordar el beso en mi habitación y el cómo no volvió a buscarme luego de irse. Entonces sentí que el piso parecía encogerse, el aire se volvió más frío y todo estaba silencioso excepto el crujir de las palomitas y las voces de los comentaristas. Al final me sentí tan mal que apagué el televisor y me fui a hacer algo de ejercicio trotando por los alrededores hasta que termine el partido con la esperanza de dejar de pensar en él. Al contrario de mis expectativas mientras corría más me preocupaba por ellos, aunque sabía que podrían con ellos.

Regresé al apartamento y me fui a duchar, me coloqué el pijama y caminé hasta mi cuarto a ver algunos videos en mi ordenador, cayó la noche y recibí un mensaje de mi hermano, todo salió como estaba calculado. Yo resoplé aliviada y al rato me fui a dormir.

A la mañana siguiente llamé a Anri para que me informase sobre como estaban, ella se puso a llorar emocionada por lo bien que lo habían hecho y me dijo que les había dado 2 semanas de vacaciones a todos y se habían regresado a sus casas, que ni siquiera en la cena de anoche se habían dado cuenta de mi ida. Realmente esa parte me dolió un poco, pero decidí seguir escuchando a Anri. Terminó la llamada y me cambié de ropa y me arreglé para ir a Shibuya a dar un paseo.

Llegué a mi cafetería favorita y me senté adentro, me tomé un café con avellana y un trozo de tarta de zanahoria y cuando iba a salir me fijé que Isagi, Bachira y Chigiri estaban en la mesa cercana a la salida, ellos me vieron y se acercaron a saludarme.

-Hola T/N, tú también estás tomándote un descanso?- Dijo Bachira feliz, lo cual me dolió más todavía. Asentí algo insegura.-No creo que fuese a quedarse sola 2 semanas en esa cárcel cuando nosotros estamos afuera, verdad?- Esta vez fue Chigiri el que habló. Isagi se quedó callado y me miraba algo triste sin embargo lo escondía en una leve sonrisa. Acabaron invitándome a estar con ellos, luego nos encontramos en otra mesa a otro grupo de Blue Lock y nos fuimos todos juntos a la sala de juegos donde se había entretenido Nagi. Estuvimos jugando todos juntos y fue muy divertido. Luego quisimos ir al karaoke y nos encontramos al equipo de la Sub-20 allí, algunos estaban felices de observarlos, ya que sentían admiración y otros se pusieron competitivos así que decidieron irse a la bolera más cercana a competir. Mientras caminábamos hasta allí me presentaron a todos y Aiku intentó ligar conmigo en algunos momentos, de este modo al final algunos chicos decidieron ponerse entre él y yo para que no me sintiera incómoda... realmente era un picaflor, chica medio guapa que observaba, chica a la que le tiraba la caña.

Llegamos a la bolera y...

-CONTINUARÁ-