Cuando florece la camelia

Capitulo 5

Malas noticias

Algo único sobre el Pico Sisheng o el pasado en general son los baños de primavera que la gente tiene y parece disfrutar inmensamente. Mo Ran solo lo acompaña porque la culpa de al menos dos personas que le calentaron el agua desde su primer día en Pico Sisheng aún persiste dentro de él.

"¿Así que se bañan así....al aire libre, para que todos lo vean?" Mo Ran busca en la cara de Xue Meng esperando a que sonríe y le diga que esto es una broma, pero desafortunadamente el hombre habla en serio.

"¿Qué todos? Aquí todos somos hombres. Además, ¿por qué esto te molesta tanto?" Las preguntas que hace Mo Ran despiertan la curiosidad de Xue Meng. 'Entonces, ¿Cómo se baña la gente en el futuro?'.

Pero preguntar eso será un intento inútil para Mo Ran que es demasiado inflexible en no proporcionar ninguna información.

Cuando llegan al baño de primavera rodeados por completo de naturaleza, mirarlo tranquiliza un poco la mente de Mo Ran. La hierba alrededor del manantial está húmeda, ranitas y grillos saltan libremente. Hay ondas tranquilas y constantes que fluyen dentro del agua. Quizás esto no sea tan malo como había pensado inicialmente. No es muy diferente a una piscina.

Mo Ran se quita las capas de ropa, se desploma y se hunde al nivel de la cintura en el agua, dejando escapar un suave gemido. El agua es cálida en el sentido de que la madre naturaleza la calienta, procedente del interior del suelo. O tal vez se calienta con la magia de cultivo, pero a Mo Ran no le importa, demasiado concentrado en disfrutar cómo libera toda la tensión en cada músculo suyo.

Xue Meng se aleja lo más posible de ellos dos. Habla de que todos ellos son hombres, Mo Ran pone los ojos en blanco.

Mei Hanxue se acerca a Mo Ran y durante mucho tiempo permanece estancado, sin saber cómo romper el tema.

Mo Ran espera a que hable, pero nunca lo hace. Cansado de esperar, decide hacerlo él mismo (y porque Mo Ran tiene la sospecha de que si él no inicia la conversación tampoco lo hará Mei Hanxue).

"Está realmente bien, no me importa", suspira Mo Ran, sintiendo el inicio de una conversación que ya había esperado del hombre tarde o temprano.

"¿Por qué estás tan, tan.....bien?" Una vívida confusión se apodera de Mei Hanxue. Juega con las manos, los ojos muy abiertos y la boca abierta en un círculo confuso. Su cerebro intenta comprender cómo y por qué Mo Ran está tan tranquilo acerca de que él es una bestia.