Narrador omnisciente.
Aidan se encontraba vagando por las calles de la Ciudad de México, pensaba que alejarse temporalmente de _____ le ayudaría a ella, para que dejaran de pensar que estaba loca, además de que no le gustaba verla sufrir, ya había pasado un buen tiempo desde que la vio la última vez mientras la subían a aquella camioneta blanca y polarizada, se preguntaba ¿como estaría?, ¿ya habrán descartado la idea de que esta loca?, ¿ya comerá bien?, había tantas preguntas que tenia acerca de esa chica. Él joven sentía que era su culpa todo lo que le estaba pasando a _____, tal vez si nunca lo hubiera conocido ella ahorita estaría feliz, con mucho futuro por delante siendo una magnifica escritora de los sobrenatural, pero no.
A lo lejos, el pelinegro podía distinguir a una pareja de novios, que paseaban tomados de la mano mientras comían un helado, ojala el pudiera hacer lo mismo con ____, pero es imposible, ella es humana, pertenecía a un mundo diferente y merecía a alguien digno de ella.
— Hola... — Aidan giro con los ojos abiertos como platos, al escuchar esa voz que lo había saludado.
— Aaam ¿Hola? ¿Puedes verme? — pregunto asombrado mirando a aquella joven pelinegra y de ojos mieles, quien sostenía un helado en su mano derecha. Tomo asiento junto a Aidan de forma despreocupada y soltó un suspiro.
— ¿Por que no he de verte? — pregunto divertida mientras lamia su helado, Aidan frunció el ceño — Estas sentado en una banca del parque muy solitario, tal vez reflexionando acerca de la vida.
— Pero... — Aidan no sabia como reaccionar, alguien además de ____ lo estaba viendo.
— Tranquilo — la joven giro a verlo y le mostró una sonrisa — Ya me di cuenta... Eres un fantasma — sonrio — Que interesante.
— ¿Y lo dices asi de lo mas normal? ¿No te afecta que la gente te vea hablar sola y te tache de loca? — La joven soltó una carcajada.
— Eres tan gracioso — dijo y volvió a lamer su helado — En realidad no me afecta, muchos ya creen que estoy loca — dijo mientras levantaba los hombros restándole importancia.
— ¿Quien eres tú y por que puedes verme? — pregunto Jos poniéndose de pie, y mirando directamente a los ojos a la chica.
— Oh disculpa — dijo poniendo una mano en su pecho — Soy Esther Vélez, y soy una médium, por eso puedo verte.
Aidan abrió los ojos como platos.
— ¿En serio? — preguntó el chico aun sin poder creerlo, una médium.
— Así es... Cariño — dijo terminado su helado, para posteriormente echar la basura en su lugar — y dime ¿cual es tu nombre?
— Bueno... — hablo Aidan nervioso mientras sobaba su nuca — Mi nombre es Aidan Gallagher.
— Bonito nombre — la gente pasaba y veía a Esther de forma extraña pero al parecer ella decía la verdad, no le importaba que la tacharán de loca.
— Emm gracias...
— ¿Y bien?, ¿Quieres que te ayude a pasar a la otra vida? Ya sabes descansar en paz... No creó que quieras seguir aquí — sonrió — Digo, no eres el primer fantasma al que veo y ayudo.
— ¡No! — exclamo el pelinegro — En realidad todavía quiero permanecer aquí — Esther cruzo los brazos y lo miro confundida.
— ¿Neta? — Aidan asintió — Bueno... Pero ¿por que?.
A Aidan se le iluminaron los ojos y tomó a Esther de ambos hombros y la sacudió — ¡Tu puedes ayudarme!
— Oye tranquilo viejo, se que dije que no me afectaba que me vieran hablar sola pero otra muy distinta es que parezca que me están dando convulsiones — comentó divertida mientras apartaba las manos de Aidan de sus hombros — Dime en que puedo ayudar — Aidan se asombro al ver que a ella si la podía tocar y sentir su piel... Pero a _____ no, miro sus manos y segundos después volvió a mirar a la linda joven — ¿Y bien, Aidan? —pregunto a Aidan, al ver que el chico se había quedado pensativo.
— Bueno... Yo — dijo bajando sus manos — Es que... Tengo a una amiga humana, que puede verme pero a diferencia de ti ella no es médium — Esther abrió los ojos a mas no poder.
— ¿Entonces? — pregunto — Oh ya entiendo... tuvo que creer lo suficiente en ti para poder verte, conozco eso... Bueno continua.
— Ok , el caso es que... Ella, bueno sus padres piensan que esta loca y la metieron a un manicomio por mi culpa, ya que siempre la escuchaban hablar sola. y ahora que estas aquí, puedes ayudarme a demostrarles que ____ no esta loca, ayúdame... En verdad ella me importa mucho.
— Con que ____ — lo codeo pícaramente — Supongo que puedo ayudarte, solo llévame con los padres de ella y les diré que existes.
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El Fantasma del Espejo | Aidan Gallagher | Terminada |
Teen FictionLos cuentos de fantasmas existen... "Acabo de descubrir que después de todo, el amor no precisamente puede ser un chico de carne y hueso". ____ Stine Lerman es una joven solitaria y con mucha imaginación, que busca motivación para escribir una histo...