ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 𝔘𝔫𝔬

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Los globos decoraban todo el patio, un gran castillo inflable se encontraba sobre el césped y en el que los niños saltaban felizmente. Habían distintos aperitivos en una gran mesa y en el centro de ésta había un gran pastel de dos pisos con temática de Mickey mouse y estaba escrito en fondant las palabras "Feliz cumpleaños #5". Todo eso para festejar al lindo Nakamoto Yuta.

El infante anteriormente mencionado estaba jugando junto a varios de sus amigos a las escondidas. Estaba escondido detrás del cobertizo junto a Lee Taeyong, su mejor amigo.

Éste estaba mirando mucho a su amigo y este simplemente le preguntó si tenía comida en la cara.

──Eres muy lindo ──dijo Lee para acercarse más al japonés y dejando un beso en la mejilla de éste provocando que está se tornará de un ligero color carmín.

──Gracias, tú también.

De repente escucharon un zumbido proveniente del arbusto que tenían a un lado y vieron salir a dos avispas de éste y perseguir al apellidado Lee quién corrió fuera de su escondite asustado haciéndolo perder en las escondidas.

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Ya había sonado la campana, todos estaban recogiendo sus cosas, menos Yuta porque el profesor de geografía le había dicho que quería hablar con él después de clases.

Cuando vio que todos salieron del salón el profesor se le acercó a él.

──¿Para qué quería hablar conmigo? ──preguntó Yuta con indiferencia mientras se levantaba de su asiento.

──¿Sabías que eres muy bonito? ──inquirió el docente acariciando el rostro del chico que lo vio aterrorizado.

──Muchas gracias. Si era sólo para eso, ya me voy ──habló el joven intentando escapar de aquel lugar, pero siendo retenido cuando el mayor agarró su muñeca.

──No era sólo para eso ──dijo el adulto con su voz ronca por el tabaco.

Las lágrimas en las ojos de Yuta no se hicieron esperar y sus sollozos tampoco mientras intentaba alejarse del docente siendo aquello un intento fallido.

Estaba a punto de resignarse ante la situación hasta que escuchó la puerta del salón ser abierta y ver a la profesora Kang parada del otro lado de esta.

Yuta empujó al profesor aprovechando la sorpresa de éste y corriendo fuera del instituto deseando no volver.

Ese día lloró como nunca, su madre no sabía que le había pasado y estaba consumida en miedo y preocupación.

A la mañana siguiente Yuta no quería ir a la escuela diciendo que se sentía mal a lo que su mamá lo dejó faltar y pidió la mañana libre en su trabajo para quedarse a cuidar a su hijo.

Ese día el menor recibió un mensaje de Taeyong que decía que el profesor de geografía había muerto el día anterior. En ese momento Yuta se sintió sumamente aliviado.

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La música retumbaba la casa, habían bebidas hasta en el piso. Ahí pocos andaban en sus cinco sentidos y Yuta no era la excepción.

Decir que estaba borracho era poco, parecía que ni siquiera sabía en dónde estaba, con suerte y se acordaba de su nombre.

En ese momento se encontraba en una habitación con un chico que no sabía quién era que lo estaba besando y metiendo sus manos debajo de su camisa.

Escucharon la puerta de la habitación ser abierta y cuando voltearon vieron a un chico de cabello azabache, tes blanca y ojos carmín que vestía un traje color borgoña con una camisa negra.

Éste se acercó hacía ellos y agarró al chico que anteriormente estaba besando a Yuta y lo estrelló contra la pared del cuarto.

De un momento a otro ya Yuta no se encontraba en ese camarote sino en la puerta de su casa más desconcertado que nunca.

Aunque a la mañana siguiente no recordó nada.

Cuida a tu hijo ── 𝗗𝗢𝗬𝗨  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora