Quédate conmigo... por favor

Capítulo 12

—Sigo diciendo que esto es una mala idea y que nos meteremos en graves problemas— volvió a repetir Miya mientras nos acercábamos más a la reja.

—Si sigues así de pesimista eso es lo que va a pasar— lo regaño Shadow nuevamente.

Yo sólo ignoraba lo que hablaban. No era el mejor plan que teníamos pero debíamos de intentarlo.

~Horas antes~

—¿De donde obtuviste la dirección por cierto?— preguntó Cherry mirándome con duda.

—Un número desconocido me la mando y me dijo que no habláramos con la policía— les extendí el teléfono.

—¿Es que acaso no comprenden que no deben de ir o hablar con extraños?— me "regañó" Miya.

—Estas tontos, no comprenden— le siguió Rumi— por eso son el uno para el otro.

—Déjame ver— pidió Joe, le entregue el teléfono— ¿tú crees que sea el secretario?

—Lo más probable, es fiel a lo que Adam diga o haga— refunfuño Cherry— entonces ¿cuál es el plan? Porque para haber dado la idea deben de tener uno.

—Miya, Langa y yo estaremos cerca de la casa pero a unos costados. Si dicen que es rico ese sujeto debe de tener una reja— explicó Rumi.

—Además tenemos la ubicación como mapa, por lo que sabremos donde podríamos entrar con mayor facilidad— siguió el plan Miya— mientras una distracción puede ser el señor Oka, que haga una entrega falsa y se quede ahí un rato.

—Oh, opción dos— volvió a hablar Rumi— si el señor Oka termina antes o se complica entrarían ahora ustedes dos— señala a Cherry y a Joe— quieran o no tendrá algo de que hablar con ustedes o reclamarles. Mientras entraremos y buscaremos a Reki.

Todos nos quedamos asombrados viendo al par.

—¿En qué momento se les ocurrió todo eso?— pregunto Oka un poco sorprendido.

—Hay que ser ingeniosos y creativos— dijeron los dos a la ves.

—¡Decidido! Ese será nuestro plan— dijo Joe y nos salimos todos hacía los coches.

~Actualmente~

—Bueno, Oka mandara un mensaje apenas este por bajarse de su coche con las cajas— nos dijo Shadow ya estando casi enfrente de la cerca— Langa ira primero, después Miya y al final ira Rumi. Yo los esperare aquí cerca del coche.

—Si no te mandamos mensaje en veinte minutos interviene Joe y Cherry— comento Rumi— de igual forma usted escribanos si con Oka no funciona.

—¿Por qué me hablas de usted y a Oka de tu?

—Porque él me dijo que le dijera así— lanzó la cuerda a una de las rejas— y bueno, se ve usted más grande que él.

—¡Tengo veinticinco años!— se quejó mientras la ayudaba a subirse.

—¿¡Quieren guardar silencio ya?!— nos susurró Miya alterado— mejor concentrémonos en pasar la reja de una vez.

Asentimos Shadow y yo, paso Rumi, después pase yo. Nos pasó una cuerda y la amarré cerca de un árbol.

—De acuerdo, ahora que te vayas activaremos el tiempo. También debes de activarlo— le dije a Shadow.

—Ya lo sé por Dios— se froto la cara cansado— solo tengan cuidado. Y si ven a alguien corren o lo noquean.

Los tres asentimos y nos alejamos con cuidado yendo por toda la orilla de la casa. Sinceramente era enorme, hasta tenía una piscina pero esta estaba vacía.