𝗕𝗟𝗢𝗢𝗗 𝗠𝗢𝗢𝗡 ─ 𝘄.𝘆𝘂𝗸𝗵𝗲𝗶 ✔

26.

La madre de Lucas le había contado leyendas de la mesa elaborada con la madera del Árbol Eterno cuando era más joven, pero no recordaba los detalles exactos. Todo lo que sabía era que el árbol era una enorme fuente mágica, más poderosa que el brujo más sabio de todos.

"Está bien, aquí vamos." Dijo Mark, frotándose las manos mientras miraba la hoja de papel al lado del libro abierto, que Lucas asumió que contenía la versión traducida.

Lucas observó junto con Evie y Jungwoo mientras Mark concentraba su magia en la mesa y unos segundos después, cobró vida.

La mesa comenzó a brillar antes de que aparecieran las imágenes, dándoles una lección de historia que no sabían que necesitaban.

"Hubo un tiempo en el que los sobrenaturales vivían en armonía con los humanos". Jungwoo les dijo, apoyado contra la pared mientras veían a los diferentes sobrenaturales interactuar. "Los humanos se ocupaban de ellos mientras que las criaturas nocturnas los protegerían. Eso fue antes de que aparecieran los vampiros".

"¿Vampiros?" Preguntó Evie, volviéndose hacia Jungwoo. El hombre asintió con la cabeza, señalando hacia la mesa.

"Mira."

Lucas vio como una mujer se movía hacia un enorme árbol ubicado en medio de la tierra. Era como si Lucas estuviera allí, escuchando las palabras salir de la boca de la mujer.

"Querido espíritu del Árbol Eterno. Me gustaría usar tu magia para devolverle la vida a mi hijo". La mujer suplicó, con la cabeza gacha mientras se arrodillaba junto a las raíces del árbol. "Está enfermo y los médicos del pueblo dicen que no le quedan muchos días de vida".

A juzgar por lo callados que estaban todos los demás, Lucas asumió que también podían escuchar la voz.

Vio como un hombre apareció frente a la mujer, brillando con tal fuerza que dejó en claro que él era el espíritu del Árbol Eterno.

"Tu hijo no es una buena persona". El espíritu le dijo a la mujer. "Ha causado dolor a las personas que lo rodean".

"¡Pero que él muera de una enfermedad, eso es injusto!" La mujer argumentó. "Por favor, dale inmortalidad, su corazón es puro".

"No puedo." Dijo el espíritu, desvaneciéndose. Pero antes de que lo hiciera, los ojos de la mujer se oscurecieron mientras sacaba un cuchillo y lo clavaba en el corazón del espíritu.

Los ojos del espíritu se agrandaron cuando su forma humana cayó inerte. La mujer sacó un paño, absorbiendo suavemente la sangre del espíritu.

Las imágenes cambiaron y vieron como la mujer escurría la tela, la sangre del espíritu se vaciaba en una taza de jugo de arándano. La mujer entró en la habitación con un niño enfermo acostado en la cama, y sus ojos apenas abiertos.

"Hijo mío, estoy aquí". Dijo la mujer pero el chico la ignoró. "Sé que estás despierto."

"Vete." Murmuró el chico. "Solo quiero morir ya".

La mujer suspiró, sentándose junto a su hijo. "Sé que es difícil, pero por favor, aguanta. Puedes hacerlo".

"¿Por qué debería?" El niño lloró, finalmente abrió los ojos mientras las lágrimas rodaban por sus mejillas.  "¡Maté para ayudar a mi mejor amigo a convertirse en el próximo alfa, no hay una gota de bondad en mí!"

Lucas trató de no llorar mientras veía cómo el corazón de la mujer se rompía ante las palabras que decía su hijo.

"Es difícil, lo sé". La mujer arrulló, limpiando suavemente las lágrimas de su hijo. "Aquí, te hice un poco de jugo. Solo bébetelo y vuelve a dormir. Te sentirás mejor después".