Kazekiri. La princesa del viento.

Décimo Octavo Corazón.

Kazekiri👨‍👨‍👧

Habían llegado a la aldea de ya tenían poco más de una semana que habían regresado y Kazekiri estaba practicando su genjutsu con Itachi y con Ino. Los dos eran muy buenos y así se le daba algo de variedad a su entrenamiento.

Ya es hora del almuerzo —Llegaron Chouji, Kurama y Hinata con comida, la niña debía comer adecuadamente para poder seguir creciendo y mejorando sus habilidades.-

Ya era hora, gracias a Kamisama. —Shikamaru también estaba ahí, pues estaba analizando el entrenamiento para hacer estrategias para ayudar a Kazekiri y también lo acompañaba Kiba y Shino, quienes también estaban observando el entrenamiento para ayudar más tarde a la más pequeña.-

Cuando se trata de Kazekiri, todos se unen. Jajajaja —En ese momento entró a escena Asuma, quien iba acompañado por Kakashi.-

Todo se ve muy rico -Kazekiri se acercó a Itachi, quien la recibió en sus brazos felizmente. Kurama quién llevaba unas costillas agridulces, se las dio, dándole en la boca. - Mmmm, está delicioso.

Mira Kiri-chan, te hice una tarta de miel con limón. —Comentó Hinata mientras le mostraba la tarta que más le gusta a Kazekiri.-

Siiiii yo quiero tarta, yo quiero tarta… —Kazekiri se bajó de los brazos de Itachi y corrió a la espalda de Hinata, amaba esa tarta y podría comerla por el resto de su vida.-

-Chouji también le sirvió un poco de hamburguesas con ensalada y un poco de aderezo dulce para que coma Kazekiri.- Ten Kiri-chan, debes comer, trajimos lo suficiente, pero debes comer. Después te toca entrenar la mente y eso es muy desgastante.

Ok, yo como. —Kazekiri se sentó, todos comenzaron a servirse para comer con ella. La pequeña Kazekiri era el centro de su universo, por lo que la trataban como tal-

Pasaron un día agradable todos, hasta que terminó el entrenamiento y por ende Kazekiri cayó dormida en los brazos de Asuma. Mismo que se había sorprendido. Es verdad que él guarda una muy buena relación con Kakashi, pero jamás se había dormido en sus brazos.

Kakashi, Kazekiri ya se durmió. —Asuma habló un poco avergonzado, pues eso había sido una sorpresa para él.-

—Kakashi sonrió feliz.- Sí, eso es lo que veo. Pero me temo que debemos llevarla, si se nos ocurre mover de más a la niña, se despertará y no podrá volver a dormir.

Ok, entonces debemos llevarla. —Asuma se rindió, pues efectivamente lo que había dicho Kakashi, era cierto. Si en este momento se despertaba Kazekiri, no volvería a dormir.-

Mmmm debes aprovechar Kakashi, este es tu momento. —Kurama se acercó a Kakashi, le susurro al oído y se alejó pronto para llevar a los demás herederos a casa. Estaban algo lejos de la aldea y era mejor que Kazekiri durmiera y que Kakashi hablara con Asuma.-

Ese maldito zorro, ¿que le habrá dicho a Kazekiri? —Pensó Kakashi un poco confundido y molesto a la vez.-

Gracias Kurama, por favor cuida que mi papá sea feliz. —Kurama se conectó con Kurama, ellos tenían una relación tan buena que podían comunicarse aún cuando Kurama se la pasaba todo el tiempo como Akashi. Su hermano adoptivo. Ese hermoso hombre de cabello pelirrojo que la cuida.-

Si tu duermes, yo me encargo. —Kurama sonrió feliz- Hiciste un gran trabajo hoy. Duerme bebé.

Kurama durmió en Kazekiri, y vio como Kakashi, Asuma y Kazekiri se iban a lo lejos. Asuma llevaba en brazos a la niña y Kakashi se veía feliz.

Todo por tu felicidad, mi niña. —Pensó Kurama mientras caminaba con los herederos.-