La desnudez de mi alma

Me gustas

Día 9

Y me gustaría que no fuera así.

Por qué cuando tus manos rosan las mías, el corazón arde, y me encanta cuando se está quemando.
Son en vano mis preguntas sobre porque tú. Sobre qué no tengo que ella sí, y odio con todo mi ser sentirme tan insuficiente por qué sé que no lo soy, me aferro a la idea de que no lo soy.

No eres a quien amo. Pero daría tanto por ti. Porque no tengo a nadie más cuando el túnel está obscuro, solo estas tú del otro lado esperando por mí.
¿Por qué esperas por mí?
Si tu miserable corazón no late por el mio.

Me besas, pero nunca pides perdón por tocar mi alma sin siquiera quererla y estoy cansada de aparentar que eso está bien. Nunca fui de nadie, camine sola por el desierto mientras las moscas entraban en mis oídos. Esta ves sería  tuya si me lo pidieras. Podría perderme en millones de vidas solo para que me encontraras. Sé que que jamás serás mío, no importa que haga por ti, estás lejos cuando se trata de mis manos y cuando miro tus ojos, el mundo se hace chiquito, insignificante, y cuando beso tus labios me siento en lo más alto del cielo.

Juro que no quiero qué, pero me gustas.