El día de hoy podría considerarse uno de los mejores en mi vida.
Ayer, después de que Riker y yo arreglaramos nuestras diferencias, fuimos a cenar con nuestros amigos a un restaurante muy lindo, para terminar nuestra noche rendidos de tanto caminar, en la cama, tendidos y profundamente dormidos. Hoy Riker me ha traído el desayuno a la cama con el pretexto de nuestra reconciliación. Después fuimos a tomar un helado y al salir, en el transcurso al campo de Volleyball, nos encontramos con Katina, Rydel y Ratliff. Terminamos nuestro juego y fuimos a comer pizzas para terminar en la feria recién inaugurada y llegar a casa a las 7pm.
― Estoy exhausta ―decía mientras me acurrucaba a un lado de Riker.
Zip me miraba desde el sofá continuo con una sonrisa hipócrita en la cara mientras yo sonreía con malicia en mi interior. A pesar de la reconciliación entre mis esposo y yo había algo en esa chica que no terminaba de caerme bien. La rodeaba un aura de envidia, egoísmo y mala vibra. El timbre del departamento me sacó de mis pensamientos y enseguida refunfuñé para que Riker fuera a abrir.
― Yo voy ―se ofrece Zip.
Se levanta del sofá y mientras camina veo como mueve su enorme trasero, lo peor no es que ella tiene más que yo, lo peor es que Riker no aparta la mirada de él. Enseguida le doy un codazo en la costilla y hace una mueca combinada con una sonrisa de lado. Que sexy es el.
― ¿Caroline? ―exclamó Zip tan sorprendida como yo misma
¿Que hacia ella aquí ahora?
Mire a Riker y el me devolvió la mirada.
― No tenia donde quedarse ―responde él a mi pregunta no formulada.
Me levante del sofá y caminé a la cocina, no sin antes fulminarlo con la mirada. Agarré palomitas de maíz sacadas del microondas y las eché a un plato hondo para ir a compartirlas con las invitadas y Riker. No me quedaba de otra.
― Hola, Caroline ―saludo a la recién llegada. ― Riker me ha hablado mucho sobre ti... Y sobre tu hermana ―concluyo arrastrando las últimas palabras.
Miro a Zip y sonrío tanto que creo que todos pueden notar el sarcasmo que hay en mi voz. Riker voltea a verme y se que por dentro quiere reír y no parar por la forma tan antipática que trato a sus invitados.
― Tengo un poco de jaqueca ―advierte Zip con su voz tan aguda. ―Me iré a dormir ahora. Hasta mañana Riker ―se despide de él y sube a su habitación.
Me quedo plantada en el lugar donde estoy, atónita. Ella no me dio las buenas noches, y no es que quiera que me las de, pero es mi departamento ¡Por Dios!
― Entonces, ¿no causo ningún tipo de problema quedándome aquí? ―pregunta Caroline rompiendo el silencio.
Muevo la cabeza negativamente y Riker agrega:
― Por supuesto que no. Eres mi mejor amiga, pasa y ponte cómoda.
Asentí y me acomode de nuevo en el sofá. A unos minutos de haber hecho más palomitas y de empezar a ver "Casa Blanca" mi teléfono sonó con el tono de Katina.
― ¡Fiesta! ―gritó por la bocina del aparato mientras tomaba la llamada.
― Katina no ―respondí cortante.
― Katina si. Vamos para allá ―y colgó.
Traté de recomponer mi temperamento y al hacerlo Riker se dio cuenta de que algo estaba fuera de su lugar.
― ¿Que pasa? ―pregunto medio angustiado.
Pensé e inventé un código para emergencias sobre Katina y sus locas fiestas, así que de la nada, solté:
― Código EPK.
Emergency Party Katina.
HOLA A TODOS LOS HUMANOS VIVIENTES Y NO VIVIENTES DEL PLANETA TIERRA!
SI, CREO QUE ME HE ATRASADO DOS DIAS CON EL CAPITULO, PERO ES QUE HE TENIDO BASTANTES EXAMENES SORPRESAS Y MANTIENEN MI MENTE OCUPADA.
PERO AQUÍ ESTÁ... TAL VEZ ES MUY CORTO PERO AHORITA NO PODRÉ ACTUALIZAR MÁS HASTA VACACIONES (QUE NO FALTA MUCHO)
Y DIGANME! ¿QUE LES PARECIO EL CAPITULO DE HOY?
DEJENME SUS VOTOS, COMENTARIOS Y OPINIONES ¡RECUERDA ES GRATIS!
―DarleyInYourDreams.
