Kim Taehyung es un empresario famoso con un exitoso futuro por delante, esta casado con una bella chica y modelo de pasarelas, Kim Jennie, ambos tienen un hijo pequeño. Cuando era joven hizo un viaje para visitar a su abuela en Geochang y fue ahí cu...
Taehyung despertó por la mañana estirándose en aquella habitación que antes era de su abuela, encontrándose solo una vez en aquel lugar, miró por la ventana que daba al gran campo que yacía atrás de la casa. No pudo evitar pensar en la feliz niñez que tuvo al lado de su abuela y en aquel verano maravilloso que pasó a su lado. Aquellos momentos felices que tal vez no volverían a su vida pero que si atesoraría siempre.
Pronto se acercó a la mesa de noche para tomar su celular, quiso marcar a Jin pero al final no pudo hacerlo. Prefería estar solo durante un buen tiempo y disfrutar de su paz antes de que aquel chico curioso llegase a casa con una nueva pregunta que hacerle.
Durante las siguientes horas se aseo y se dirigió a la caseta cerca del huerto que yacía en aquel lugar maravilloso.
Mirando aquel lugar recordó aquel día en que conoció a Park Jimin.
—Todos los que vienen de la ciudad serán muy tontos como tú —cuestionó por un momento— Es la primera vez que conozco a alguien de afuera y siento que es decepcionante.
—Crees que por ser de la ciudad soy tonto —sonrío por un momento antes tamaña absurdez.
Como un chico de su edad podría pensar algo como eso, además no tenía sentido, toda su niñez vivió ahí así que no deberían decirle algo como eso. Estaba a punto de decir algo cuando fue interrumpido por la voz de aquel chico y lo que dijo a continuación hizo llamar la atención del castaño aún mas.
—Sabes, sentir la luz de la luna durante todo el día, incluso si no es de noche y que la atmosfera se llene de una inmensa tranquilidad...¡Es así como se siente cuando ves a un extraño por primera vez! —soltó sin quitar la mirada del cielo hermoso que veían sus ojos— Incluso el sol y las estrellas parecen brincar de alegría ante la llegada del extraño —sonreía.
Taehyung se sentó encima de unos costales viejos que estaban en una esquina del lugar, mientras que otro recuerdo venía a su mente.
—Si no estas seguro de las cosas que quieras o sientas, ¡No deberías hacerlo! —exclamó sinceramente— A veces creemos querer algo pero realmente no es lo correcto.
—¿Y como estar seguro de algo que realmente quieras? —preguntó curiosamente— ¿Cómo puedo descubrir eso que tanto quiero Jimin-ah?
—Tan solo escucha tu verdadero ser y encontraras la respuesta —respondió rápidamente.
—Y tú —lo señaló— ¿Tuviste algún amor de infancia o algo así? —le preguntó sin quitar su mirada tierna de él.
—Nunca sentí nada raro...—hizo una pausa para luego continuar su respuesta— No hasta que te conocí —le confesó— Sentí algo muy raro en la boca del estomago cuando te conocí osito —volvió a llamarlo con ese tierno apodo que solo su abuela le había dicho, claro hasta que conoció a Jimin— Fue algo raro y muy difícil de descifrar...¡Creo que sentí como un revoloteo interno que con los días salen mas y mas! —le sonrió tratando de recibir una respuesta a cambio pero lo que recibió fue una acción de amor.
—Taehyung...Kim Taehyung.
El sonido de una voz suave llamaba al chico, por un momento pensó que era Jin así que se apresuró en salir de aquel lugar. Pero grande fue su sorpresa al ver a aquella persona que tanto deseaba tener a su lado.
Sus miradas se cruzaron entre sí, sus pasos eran lentos, sus rostros reflejaban alegría y una gran tristeza. Sin pensarlo sus lagrimas cayeron y poco a poco sentían la presión en sus cuerpos. Que en cualquier momento caerían sin poder sostenerse el uno al otro.
—Lo siento —dijo Jimin una vez estuvo frente al castaño— Lo siento tanto mi amor.
Taehyung lloraba sin poder detenerse, su corazón dolía pero no por simple capricho sino mas bien por sentirse arrepentido de no haber luchado en el pasado por el amor que sentía por el rubio.
Jimin tomó con suavidad el rostro de Taehyung mientras este posaba sus manos sobre las suyas. Estaban felices de volver a verse, de volver a tenerse cerca el uno del otro.
—No hubo ni un solo día en que no dejará de pensar en ti Jimin —besó sus manos con delicadeza— Pero me convencía de que estabas con Jisoo, feliz —susurró— Solía pensar en tu felicidad, que reducía mi felicidad por la tuya.
—Lo sé, lo sé Tae —lo hizo callar— Lamento pensar que estabas feliz cuando también estabas solo y sufriendo como yo —confesó.
El castaño lo miró sorprendido sin poder creer en las palabras que decía su amado, eran unas confesiones que ambos habían estado esperando por mucho tiempo. Y ahora que lo sabían no podían alejarse por mucho mas tiempo.
Taehyung pronto se arrodilló frente a Jimin, no pensaba proponerle matrimonio, no por ahora pero si algo que ambos debían compartir.
—Ambos cometimos muchos errores y gracias a ellos todos comparten tristezas, sufrimientos.
Jimin tan solo lo miraba mientras limpiaba algunas lagrimas de su rostro.
—Quiero compartir este castigo contigo —propuso— El castigo de amor que el destino hizo para ambos.
—Sí —respondió mientras se agachaba a la altura del castaño— Quiero compartir este amor verdadero contigo, hasta el final Osito.
Dicho eso, ambos se besaron rompiendo así aquel espacio que los separó durante tanto tiempo. Aquella encrucijada que los había distanciado de su verdadero destino. Ahora solo les quedaba sonreír y caminar de la mano juntos para superar aquel dolor que una vez sintieron.
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