✨Las hermanas Naky ✨

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Capitulo 7

✨Las hermanas Naky ✨

Hinata no quería mirar a nadie mientras el carro se movía lentamente llevándola a ella y sus hermanas dentro, hacia el palacio Naky.

Hanabi, que era una de las hijas de Hizashi, se encontraba dentro con ellas, pero sentada a los pies de Hinata. Ella odiaba esto, la forma en que la pequeña hembra se rebajaba por Hinata, pero no temía reducir con la mirada a sus hermanas. Hablaba muy mal de la raza, como desprestigiaban a las demás, pero podían adorar a una de ellos mismos. Orgullosos y altaneros, la pequeña Hanabi estaba hecha un desastre, su ropa elegante rota y su aspecto y olor deplorables, pero ella no dejaba de mirar con superioridad a sus hermanas que la habían ayudado a salvarla.

Primero se había peleado con Izumi, y luego con Tamaki cuando esta quiso ayudarla a subir al carro cerrado. Luego de eso, decidieron que Hanabi tendría que esperar última para bajar cuando llegaran, así le mostrarían dónde se encontraba su puesto en el favor con la supuesta Señora Naky.

Hinata odiaba tener que hacerse pasar por eso, primero actuando como una perra fría y altanera, había tenido que demostrar que Namikaze estaba bajo ella. Aunque Namikaze sólo le había dado una mirada filosa y roja cuando comenzó a arrodillarse, una vez que tuvo que apartarlo, sus ojos eran dorados y respiraba con dificultad. Él se había quedado allí, después que le diera unas suaves palmadas en su cabello rubio para luego subir al carro primero. Gracias al universo, él permanecía afuera con los demás machos mientras avanzaban.

Hinata miró a Matsuri cuando esta le hizo una señal.

—Le haremos creer que no puedo hablar, que soy una clase de mascota para ti. Así podré pasarte información de esta forma, y no levantaremos sospechas. De esta forma, a penas me prestarán atención y podré recolectar información.

Hinata y sus demás hermanas asintieron.

Ella estaba segura que podría fingir, gracias a su entrenamiento y su forma de poder ocultar sus verdaderos sentimientos.

El cuerpo de Hinata se tensó cuando empezaron a llegar al pueblo. Aunque de afuera, parecía completamente cerrado, desde adentro tenía unas aperturas para poder mirar el exterior.

Hombres y mujeres caminaban lentamente por el costado del carro, sin siquiera levantar la mirada hacia el transporte. Hinata se percató que las hembras también eran algo peludas, pero estaban más vestidos que el que habían logrado atrapar. Por lo que sabía, Zabuza lo traía sobre su hombro, maniatado. Las casas, si les podían decir de esa forma, eran simples paneles con otro por arriba. Hinata se asomó mejor cuando vió a un grupo de pequeños que estaban en una de las calles. Cuando vieron al carro, sus caras se transformaron, habían estados alegres y charlatanes, pero sus ojos se agrandaron mostrando terror y bajaron rápidamente la cabeza.

Hinata frunció el ceño mientras veía cada vez más señales como esas.

Naruto miró todo con ojos afilados.

La pobreza y miedo eran palpables por donde sea que mirara. Niños mal alimentados, hembras y machos con poca higiene, chozas precarias que ni siquiera un animal eligiría. Se notaba que los Nakys estaban aprovechando la poca evolución que tenían los ghinconianos.

Naruto miró sobre el carro que llevaba a las hembras, dónde Haku estaba parado observando hacia todos lados, buscando algún ataque sorpresa más, pero él ya no creía que fuera a pasar. Más allá del desdichado pueblo, se alzaba tres torres, que él suponía que era donde estaba la fortaleza Naky.

Cediendo Terreno (NaruHina ❤️)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora