3. El Goliat de piedra

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Era un día lluvioso en Thunukthai, un poblado a las afueras de Fallowheart situado en el centro de Grim Hollow, llamado así por el clan de goliats "Los Thunukthai" conocidos por su gran dureza y ferocidad en el combate.

Finalmente Ghakon, un goliat de dos metros y medio de alto y gran envergadura, de cabello y barba negra y a su vez, el hijo del líder del clan, cumplió sus 16 años y como de costumbre en el clan el realizara la prueba de adultez, debe lograr sobrevivir solo en el bosque y volver con un buen trofeo de caza o no será aceptado en el clan nunca mas. Antes de partir, su padre Thotham, un goliat de casi tres metros , calvo y de larga y trenzada barba blanca, coloco sus gigantescas manos en los hombros de Ghakon.

-Hijo, haz lo que sabes hacer, te estaremos aquí esperando — dijo Thotham con su voz grabe y solemne.

Ghakon tan solo asintió, agarro todas sus armas y herramientas y se dirigió al bosque, tras unas horas buscando una presa y sin conseguir nada mas que pequeños a animales como conejos, ardillas y diversos animalillos del bosque, Ghakon avisto a lo lejos lo que era una cornamenta de alce por lo que se dispuso a sacar su pequeña ballesta y cargarla con una flecha. Tras eso se acerco sigilosamente hacia la criatura y disparo en su lateral. Cuando la flecha impacto la criatura comenzó a deshacerse como si se estuviera derritiendo y en un pestañeo esa criatura se había transformado en un pequeño señor con ropa haraposa, flores por toda esa ropa y un casco en el cual portaba esos cuernos que vio desde lo lejos.

-¡Pero que cojones!—exclamó Ghakon al ver todo eso.

-¡Eso debería decirlo yo que me atacaste sin hacerte nada!—dijo mientras se sacaba la flecha del costado.

-S...si perdón es que pensé que eras un alce, ¿Qué es lo que eres realmente?—preguntó Ghakon extrañado.

-Soy un enano y con respecto al alce, si era yo, solo que era mas bien una pequeña ilusión mágica. Puedo modificar mi aspecto a placer y utilizo esta cornamenta para que sea lo mas real posible, ya que al ser ilusión si mis cuernos impactaran con algo estos los atravesaría si no fuera por los que llevo encima—explico el enano mientras ponía sus manos sobre la herida.

-¿Estas bien?—pregunto Ghakon al ver al hombre presionar la herida

-Si, no es gran cosa—dijo mientras sus manos comenzaban a brillar 

Cuando el enano se quito las manos del costado la herida ya no estaba por ningún lado, esto sorprendió a Ghakon pero no podía perder mas el tiempo debía volver con con un trofeo lo antes posible.

-Oye... ¿Y no sabrás donde puedo obtener unos cuernos como los que llevas o encontrar algún animal así de fuerte?—preguntó Ghakon desesperado.

-Si realmente los necesitas puedes quedártelos ya encontrare yo otros—dijo el enano al ver la impaciencia del goliat.

Tras obtener la cornamenta del enano y agradecérselo, Ghakon se dirigió hacia  su poblado sin embargo al llegar se encontró con unas grotescas vistas. Algo había arrasado el pueblo entero, no quedaban rastro de nadie, tan solo había charcos de sangre, restos de las chozas en las que vivían y unas huellas enormes. Ghakon desesperado salió corriendo siguiendo las huellas las cuales finalmente se perdieron. El chico sin saber que hacer volvió al bosque a buscar al enano ya que quizás el podría ayudarle con su magia. Ghakon paso días buscando y gritando la palabra enano a pleno pulmón hasta que finalmente logro localizarlo, estaba sentado cerca de unas montañas próximas al bosque.

-¡Enano!—grito una vez mas Ghakon.

-Fargrim, me llamo Fargrim y deja de gritar que estoy mayor pero no estoy sordo—dijo el enano mientras se levantaba del suelo.

Más Allá Del Velo De La MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora