Amor A Primer Vista/TAEGI

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Martes 28 de septiembre.
Otoño.

Pasaron diez minutos hasta que llegamos a un terreno baldío que se encuentra atrás de una escuela. Taehyung paró el auto, y los dos bajamos de este. El lugar se parece a cualquier otro pedazo de tierra, pero mientras más comenzamos a caminar, a mi vista llegó el terreno que está adornado por enormes girasoles tan altos que si caminaramos entre ellos no seríamos visibles para los que pasan por ahí.

Mi vista quedó fascinado por lo que estaba viendo, no era muy noche a decir verdad, el sol ya estaba al punto en el que se estaba ocultando, y eso dejaba la imagen con los girasoles mucho más hermoso.

Taehyung se abre paso entre las flores —Acompáñame— dice, y eso hago, avanzó detrás de él. Entre más caminamos, el panorama se despeja más, al fondo se distingue un pequeño puente con un lago, Taehyung sube a ese puente siguiéndolo yo también. Nos sentamos uno al lado del otro. El saca su celular del bolsillo y puso una clara y relajada melodia, que quedaba perfecto con este tipo de situación.

—¿Por qué no sabía que existía este lugar?— pregunté, estuve aquí viviendo unos años en Seúl y a mis cortos años nunca había visto este lugar, no sabía de su existencia.

—Yo tampoco sabía, hasta ayer yo tampoco la conocía— contestó y quedó un momento en silencio —Pasé por coincidencia y por curiosidad quise ir a ver, y simplemente lo descubrió y de inmediato pensé que a ti te gustaría— sonrió por lo último.

Me sonroje un poco —Y acertaste, me encanta la vista, es un poco nostálgico, pero tiene más toque de paz—

—Efectivamente—

Los dos nos quedamos en silencio haciendo la melodia nuestra compañía, yo miraba al lago, pero no sabía con certeza si Taehyung hacia lo mismo, hasta que gire mi vista hacia el, y su mirada chocó con la mía, los dos sonreímos avergonzados, podremos ya ser un par de adultos, pero cuando uno está comenzando a enamorarse de alguien, simplemente se vuelven tontos y sólo ellos entienden su propio idioma, así como yo con taehyung, ya sabemos con certeza lo que nos decimos con tan solo mirarnos, o sonreirnos.

—También hay luciérnagas— habló taehyung sin dejar de mirarme.

—Se verán hermosos cuando caiga por completo la noche— dije sin quitar yo también mi mirada de la suya.

Cuando el sol ha desaparecido por completo sólo distingo la silueta de Taehyung iluminada por las luces lejanas. Hay pocas luciérnagas, no mas de cuatro destellos simultáneos y aún así se siente como magia.

Quiero correr alrededor de los girasoles y de las luciérnagas, pero siento que tengo que quedarme aquí sentado. Pero taehyung tal parece que leyó mi mente.

Se levantó sucidiendo por completo su pantalón, tomó su celular y pauso la música, seguido de eso me extendió su mano y yo la tomé para levantarme, haciendo lo mismo con mi pantalón, hasta que estuviera completamente sacudido.

—Vamos Yoon— dijo mientras me sonreía y los dos tomados de las manos comenzamos a correr hacia donde estaba los girasoles, haciéndose mucho más visibles los pequeños destellos de las luciérnagas, nuestras risas, eran lo único que se escuchaban a nuestro alrededor, ¿y yo? Me sentía completo, feliz y libre.

Taehyung tenía sus ojos cerrados, pero igual sonreía, y se veía cómodo.

Luego de un rato, los dos paramos, y nos sentamos cerca de un árbol que estaba enfrente de las girasoles, nuestras respiraciones se escuchaban aceleradas, y a cada minuto soltabamos un suspiro. No nos vemos después de un rato, hasta que Taehyung hace el primer movimiento, se pone de pie mientras saca sus llaves, dándome cuenta que tomaba una navaja que colgaba de ellas. Camina al girasol más cercano y lo corta por el tallo.

—Ten para que te lo lleves a casa— lo tomé mientras me sonrojaba —Gracias por asistir a esta cita yoongi, espero puedas asistir a las otras que tengo en mente más adelante—

—Gracias a ti tae, por darme una gran cita y noche, te prometo que asistiré a las demás citas—.

Los dos nos quedamos en silencio mientras yo veía la girasol, sentía que Tae me miraba a mí, fue uan maravillosa cita, a pesar de haber sido la primera que tuve en mi vida, estoy satisfecho con el resultado.

Lo miré de nuevo y ahí estaba, con esos ojos miel tan hermosos que hacían quedarme hipnotizado y preguntarme si en verdad existe la perfección. Y si es así, no hay duda que lo tengo en frente.

Me di cuenta que comenzamos acercarnos cada vez más, mi respiración se volvió desigual y mis labios se entre abrieron, sabiendo lo que seguía después. Nuestras narices estaba de punta a punta, pero un sonido de celular hizo que saltará de la impresión, y quisiera alejarme, pero al momento de querer hacerlo, Taehyung me tomó por la nuca y junto nuestro labios finalmente.

No fue un beso intenso, tampoco uno desesperado, fue lento, con cariño y transmitia más que palabras, al fin de separarnos, el celular dejó de sonar.

—Creí que contestarias— dije

—Si, pero no iba a desaprovechar este momento yoongi— reí ante lo dijo.

—Es hora de irnos, Jungkook debe estarse preguntado dónde estarás, y tú seguro que no le avisaste, debe de estar preocupado— asentí a lo que dijo.

—Si vámonos— y tomados de las manos, nos dirigimos hacia el coche, deseando que la noche no se acabará nunca, quería estar más tiempo con el, tener más momentos como ese, pero sabía que no era así, así que recordando que más adelante vamos a tener más citas, sonreí y nos dirigimos a casa.

Hola gente bonita, aquí otro capítulo, espero les esté gustando mucho, tuve tarea así que la hice temprano, por eso subí un poco tarde el capitulo, pero lo que cuenta es que lo subí, bueno sin más que decir me despido, nos vemos mañana.