una estruendosa risa retumbó en toda la casa, cada ventana chilló y en el acto se reventó en miles de pedasitos. ellos se cubrieron los oidos como pudieron, era bien desgarrador esa voz, apezar de taparse los oídos con bastante fuerza, esa risa entraba fuertemente a sus tímpanos, sus rodillas cayeron al suelo para mas soporte, derrepente un mareo les rebolcó toda la cabeza, destellos verde esmeralda aparecieron en el irisde sus ojos, el mareo insoportable fue cambiando a unas visiones, el grito se convirtió en voces masculinas.
Sangwoo escuchó una grave voz masculina, su acento elegante le sacudió su cuerpo, abrió sus ojos, y lo que vió no era la sala de su casa, era un hombre alto y de buen cuerpo, vestido con un traje coreano muy antiguo, el sombrero grade que llevaba en la cabeza no logró distinguir su rostro, el hombre se volteó de espaldas completamente, solo alcanzó a ver su ancha espalda. Después todo se oscureció y cayó en la inconciencia.
— ¡Sangwoo! —Bum corrió a socorrerle. El castaño no se movia — ¡Sangwoo, despierta! —le removió una y otra vez, pero el hombre no parecia querer despertar.
No obstante el grito silencioso de esa voz lamentable, volvió traspazar su mente, el dolor sufrible entró hasta su ser, se agarró la cabeza con mucho desespero el mareo y el destello cambió a un blanco translucido, ese color fue cambiando, se transformó en unas rosas azules resplandecientes, sus espinas de los tallos fueron desapareciendo, pero a cambio eso se creaba a un chico, era un poco mas alto que él, y con un cuerpo menos esqueletico. Se paró de enfrente, no pudo distinguir su rostro, pero si su melena. Tenia una tela blanca alrededor de su cabeza y sus mechones sobre salian de ella, vestía una típica ropa de la antiguedad. Escuchó un suspiro suave saliendo de él. Después de eso, su vista volvió a la normalidad, los gritos y risas cesaron, el silencio reino en todo el lugar.
Sangwoo despertó, confundido miró a su alrededor y obvervó a su amigo que también tenia la vista perdida.
— Bum —su llamado salió casi en un susurro.
Yoonbum se giró exaltado — ¡Sangwoo! —se abalanzó a los brazos ajenos — ¡que alivio! —con sus brazos delgaduchos le rodeó alrededor de su cuello — por un momento me asustaste —ocultó su afligido rostro en el hombro de su amigo.
— no tenias porqué —le correspondió el abrazo —vi a un sujeto en mi mente —cambió de tema.
— yo también lo vi, vestía los trajes antiguos de nuestro país. Tenia el cuerpo delgado y una cinta de tela en la cabeza.
— yo alcancé a ver a un hombre que vestia un Hanbok y su sombrero cat.
— ¿ellos serán nuestros ante pasados? —se separó del abrazo.
— lo dudo mucho, me parecen muy imposibles, ellos eran... diferentes —dijo al final recordando al chico de pelo largo. Sintió conocerlo, anhelarlo desde lo profundo de su corazón, en cambio su mente e intuisión le decia que no tenían niguna relación sanguínea.
Los dos pensativos se levantaron del suelo, se acomodaron en el sofá para descansar sus mentes mareadas.
— vi al frente de tu casa mucha sangre —sin previo aviso soltó de golpe el hecho.
Sangwoo se acomodó en su sitio — no te voy a mentir, rompí nuestra promesa de no matar—sus ojos se ocultaron en algun lugar de la casa, no tuvo el valor de mirarlo a la cara, se sintió como un niño confesando la culpa de su travesura.
— lo que hiciste... —no tuvo el valor de reclamarlo, no se sentía en derecho después de tantos meses ausentes. Comprendía su manía. Desde niño, el no tuvo la culpa, y más ahora de sus actos — yo... me alegro que te contuvieras hasta ahora —sonrió de lado — pero yo necesito ver a la primera víctima de estos meses —se levantó con brusquedad y a pasos agigantados a casi correr se dirigió al sótano.
ESTÁS LEYENDO
VIAJE A OTRA DIMENSIÓN
Science FictionSeungho x sangwoo Na-kyum x bum Lo que todos queremos (o al menos yo)