Capítulo VII

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—      Vaya, vaya, mi hermano no puede concentrarse – se burló el Min menor mientras entraba a la oficina a dejar papeles

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— Vaya, vaya, mi hermano no puede concentrarse – se burló el Min menor mientras entraba a la oficina a dejar papeles

— ¿No tenías que estar en la universidad? – cuestionó molesto

— Estoy esperando a que Hobi-hyung venga, me va a ir a dejar a mis clases y recogerá a Taetae de las suyas – explicó con calma – Pero me pidieron que te dejará esto, porque al parecer estas de mal humor – se encogió de hombros

— Pues ya los entregaste, ahora vete – gruño tomando los papeles

— Que bruto eres – reprochó molesto mientras acariciaba su muñeca, el movimiento repentino lo había lastimado - ¿Por qué el mal humor?

— Jimin y Hyomin están en celo – suspiró molesto

— ¿Y por qué no estás con ellos? – cuestionó sorprendido

— Ellos no quisieron que pasara su celo con ellos – chasqueo la lengua dándose vuelta para ver por el ventanal de su oficina

— ¿Por qué no? – siguió preguntando

— ¡No lo sé! – explotó levantándose de la silla – No sé porque, bueno según ellos no era necesario que estuviera con ellos y que seguro sería una molestia para mí, no sé cuántas absurdas razones me dieron, pero era obvio que no me quieren con ellos en algo tan importante y eso me molesta

— Tal vez aún no están listos – intentó explicar

— Pero si ya tuvimos sexo y los anude, ¿Cómo qué no están listos? – cuestionó sin entender

— Mira hyung – llamó su atención para que se sentara – Ciertamente hay personas como tú que no consideran el celo algo especial – explicó con calma – Pero hay otras personas que piensan que el celo se debe pasar con la persona correcta

— ¿Tú piensas así? – cuestionó

— Pues sí, es un momento en el que estoy tan caliente que mi tigre se vuelve loco y está muy en la superficie. No me gustaría que por un momento de locura, pudiera marcar a cualquiera, eso sería un grave error y no quisiera lastimar a la otra persona al hacerlo – continuó – Además yo soy alfa, ahora imagínate ellos. Podrían temer que los marques al estar cegado por sus feromonas, recuerda que serían dos omegas en celo, tendrías el doble de feromonas para volverte loco. Supongo que ellos temen eso – se encogió de hombros, esa era la única explicación en la que podía pensar

— Pero nos vamos a casar – susurro

— Hyung – soltó una risa divertida – Ni siquiera les has pedido ser tus omegas de manera formal y ya quieres marcarlos como si nada


En ese momento Yoongi entendió, tal vez se estaba dejando llevar por aquellos cuentos infantiles que su madre adoraba contarles cuando eran niños. Jungkook tenía razón, aunque su alfa los sentía como suyos y que a Yoongi le gustaran mucho esos pequeños. Eso no quería decir que ya fuera amor o que ya debían casarse y él marcarlos.

Gemelos Park - YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora